La bruja del bosque

18

Me quería desmayar de la fuerte impresión que acabo de tener como es posible.

En ese momento mi cabeza izo clic todas esas tardes que los dos desaparecían a la misa vez las demasiadas coincidencias que avía cada vez que se iban al reino regresaban ablando de dicha persona lucia se mantenía describiéndomelo y no me di cuenta soy una tonta.

Set: (nervioso) Amelia te encuentras bien lucia te está saludando y no le respondes

Amelia: a si claro mucho gusto también (con tono seco)

Fingiendo que no nos conocíamos como lo hizo ella primero.

papas: (preocupados) Amelia te sientes bien

Amelia: si solo me desconcentre tantito, pero estoy bien buenos pasemos a comer

Set: (diciendo en voz baja) no le hagas caso es un poco celosa con sus hermanos

Si tan solo supieras que no es por eso
sentados en la mesa

Amelia: entonces dinos donde es que vives

Lucia: (nerviosa) en un pueblo cercano de aquí 

Amelia: mmmm y en que trabajas a que te dedicas como es tu casa

Papas: (avergonzados) ya hija que te pasa porque estas así a la defensiva tu no sueles ser así

Amelia: (molesta) es que apenas y la conocen

Papas: por eso mimo la estamos conociendo, pero todo a su debido tiempo lo que estas asiendo horita es incomodarla ves esta toda nerviosa

Amelia: pero papa

Papa: (enojado) Papa nada si sigues así es mejor que te retires para que la dejes de incomodar con tu presencia

Lucia: nerviosa) no es necesario entiendo que son celos de hermana si tuviera un hermano ario lo mismo

Papa: si pero debe de saber que no debe de comportarse así además ya eres de la familia de seguro algún día hasta se casen

NARRADOR  OMNISCIENTE

Amelia estaba viendo a lucia con una mescla de sentimientos que reflejaban sus ojos y solo lucia lo noto decepción, enojo, traición, hubo demasiada emociones entre ellas.

Mientras que lucía no sabía que hacer no esperaba que ella fuera la hermana del muchacho que le gusta.

No le dio importáis después hablaría con ella a solas aclarando todo.

Toda la comida transcurrió con normalidad con uno que otro comentario sarcástico por parte de Amelia, pero con solo una mirada por parte de sus padres se callaba

FIN NARRADOR  OMNISCIENTE

Ya al caer la noche ella se despidió de toda la familia incluida yo que seguía fingiendo no conocerme mi hermano salió a encaminarla asía supuesta mente su casa cuando volteo asía atrás me encuentro a mi madre demasiado molesta

Mama: que te pasa porque la insistes hacerla sentir tan incómoda Amelia ella no te a echo nada

Amelia: pero no sabemos cómo es realmente y si está mintiendo acerca de su ser

Mama: lo dudo mucho se ve que es una muy buena muchacha para Set

Amelia: pero mama

Mama: no nada estas castigada por ser tan grosera con ella

Me fui a mi cuarto muy enfadada mi hermano no llegaba de seguro se fue con sus amigos a presumir que de seguro ya mero se casa y eso que ella todavía no dice que si

No podía dormir y no podía estar tranquila quería respuestas, pero no iba a esperar hasta mañana y menos sabiendo que no iba a poder salir porque estaba castigada así que agarre una capa que estaba en el reposabrazos de una vieja silla de madera baje con cuidado procurando no hacer ruido con mis pasos.

Cuando al fin estuve en la puerta la abrí con cuidado, aunque hizo un rechinido por lo vieja que estaba lo bueno es que no estaba con el tablón pesado que se utiliza para cerrarla para cuando Set regrese cierre.

Pensé que los despertaría a mis papas, pero no fue así que suerte Salí corriendo entre las casas procurando de que nadie me viera me fui cubriéndome con el manto oscuro de la noche solo avía una que otra farola prendida igual que antorchas o velas en las casas al llegar corriendo al centro del bosque note que seguía despierta.

De seguro acababa de llegar porque si mi hermano se entretuvo platicando con ella como no va a llegar tarde o si estuvieron haciendo otra cosa nonono.

Borrando ese pensamiento de la mente ella no aria eso verdad cuando llegue a su lado estaba distraída acomodando su capa sobre un perchero que estaba en la entrada de la cueva solo nos aluzaban aquellas pequeñas velas ya consumidas por tanto ser usadas.

Amelia: (molesta) así que no nos conocemos