11 Explotación laboral

570 41 5
                                    

La cafetería es pequeña pero muy bonita, tiene diez mesas para cuatro personas máximo, la barra para ordenar tiene pasteles y a su lado esta la caja registradora. Tiene linternas colgantes y las paredes son de ladrillos decoradas con cuadros de paisajes.

Cuando llegamos no estaba nadie así que Seth abrió el negocio y empezamos a limpiar en silencio.

—Ya llego el amor de tu vida —un chico entra a la cafetería.

—Llegas tarde —Seth le reclama —, lava el baño.

—¿No me vas a presentar a la nueva? —me señala.

—No.

—Que grosero —el chico se empieza a acercar a mi y noto lo alto que es cosa que no me sorprende porque la mayoría de hombres porristas que conozco son altos. —Hola soy Diego —me sonríe. 

—Hola —dejo a un lado la escoba y me acerco a saludarlo —soy Andrea.

Me pone de nervios que me reconozca pero dejare en claro que no quiero ningún tipo de problema en este lugar.

—Aguarda un momento. Yo te conozco.

—No creo —niego con la cabeza.

—Si solo tengo que acordarme de donde —entrecierra la mirada.

—Recuérdalo pero en el baño —Seth le ordena.

—Aburrido —Diego se da la vuelta para entrar a una habitación que supongo por obvias razones que es el baño.

—No hables con él —Seth se acerca a donde estoy —probablemente no sepan quien eres.

—Eso espero —regreso a mis deberes.

—Lo bueno es que Karla vendrá hasta mañana y de ella si te debes cuidar ya que para ella Cooper es su adoración —hago una mueca ante lo que acaba de decirme Seth. —Prepárate porque vas a tomar las ordenes —cambia de tema.

—¿Qué? —no quiero me da pánico interactuar con gente.

—Yo debo estar en la caja registradora, Diego será el que cocine y tu tomas las ordenes y las entregas. 

—Esta bien.

—Ven te daré un mandil.

Empiezo a mentalizarme ya que yo no tengo ninguna idea de como hacer esto y tal vez sueno ridícula pero es que yo nunca en mi vida he trabajado.

Cuando las personas  comienzan a llegar enseguida tomo sus ordenes cosa que es bastante fácil.

Las cosas siempre son sencillas pero mi ansiedad no me permite estar tranquila. 

El día es bastante tranquilo, la mayoría de personas piden sándwiches y malteadas. Diego nos prepara sopa para comer cosa que agradezco porque empezaba a tener hambre.

A las nueve empezamos a recoger y limpiar para después repartirnos las propinas y a parte Seth nos paga el día. Cuando todo queda ordenado Seth cierra el establecimiento y se ofrece a llevar a Diego a su casa.

—Ya se de donde te conozco —Diego comenta al entrar al auto.

Seth y yo nos miramos pero no decimos nada esperando que Diego anuncie de donde me conoce.

—Fuiste quien golpeo a Cooper en la fiesta.

—No yo no fui.

No fui yo, fue Patricia

—Claro que si eres —miro a Seth que solo esta tocándose el puente de la nariz —Después de eso te busque en Instagram.

Pero

Cancha de campeonatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora