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James estaba despierto pero aún seguía en la cama, a su lado estaba Regulus durmiendo. El mayor se dedicó a mirar su perfil pero fue interrumpió por un golpeteo en la ventana.

Perezosamente se levanto, esperando no despertar al pelinegro. Se dirigió hacía la ventana y la abrió dejando que la lechuza entrara a su casa, cuidadosamente tomó la carta entré sus manos y comenzó a leerla.

Le dio agua y comida a la lechuza, junto a una carta de respuesta. Sin más la dejo irse hacia su dueño, tenía curiosidad sobre la decisión que había tomado el menor.

Pero dejo el tema para ir a la cocina a prepara el desayuno, al terminar lo llevo a la habitación y lo colocó sobre una mesita.

-Reg…- murmuró -Despierta- el menor se removió -Prepare el desayuno- Regulus sonrió ante eso.

-Hola- Regulus le dio un beso en los labios

-Hola precioso- dijo James

Regulus se sentó en la cama, mientras que James ponía el desayuno en esta para que coman los dos.

-¿Qué debes hacer hoy?- pregunto el mayor.

-Mmm- Reg se quedó pensando -Debo buscar una forma de destruir los horrocuxes-

-¿Quieres que te ayude?- pregunto el azabache

-No, esta bien- respondió -Creo que encontré una forma- dijo comiendo.

-¿Cuál es la misteriosa forma?- cuestiono James con un tono divertido

-Veneno de Basilisco- Declaro el menor -y la ayuda de Severus- añadió

-¿Por qué?- James lo miraba con curioso

-Cuando ingresé a Hogwarts, quería saber todo del castillo, su historia- aclaro Reg -Recuerdo haber leído sobre la espada de Godric Griffindor, el libro decía que la espada fue forjada por duendes, que ni la suciedad, ni el óxido afectan a la hoja- agrego Regulus dejando de comer -Que acepta todo aquello que la fortaleza-

Regulus pido ver James estaba confundido y rio ante la imagen.

-Significa que si impregnamos del veneno del Basilisco podremos destruirlos- termino feliz el menor -O esa es mi teoría-

Dudo pero no duró mucho ya que James comenzó a besarlo, puso sus manos alrededor del cuello del mayor.

-Eres un maldito genio- exclamó James

Regulus sonrió por lo dicho, lo atrajo hacia él y volvió a besarlo.

-Lo se- añadió presumido el menor -Y eso te gusta-

-Por supuesto- dijo James -Me encantas-

-0-

James tomó una chaqueta para abrigarse del frío, salió de su casa.

Sabía que Reg no notaría su ausencia, este estaba averiguando sobre el veneno de Basilisco con su “amigo misterioso “

No mentiría, estaba asustado y temía, lo que podía suceder. No confiaba realmente en Crounch pero era la única persona que podía ayudarlo y conseguir entrar.

Entro al bar no se fijó quienes, estaban ni como estaba, se concentro en ir a una mesa alejada para que nadie los molestará, esperaba que el castaño lo ubicará.

Solo espero unos minutos para que el contrario llegará, este tardo unos segundos en encontrarlo pero lo hizo a pesar de la poca iluminación que había en el lugar.

-Potter- saludo cordial Barty con un asentamiento

-Crounch- respondió James serio, el menor se sentó enfrente de el, manteniendo la distancia.

-Iré directamente al grano- dijo el Slitherin -Seguramente estás aquí por la carta y por mi decisión, no me preguntó cómo la tomé- aclaro Barty con un semblante serio

-Solo dime, no quiero estar aquí más tiempo de lo que necesito- James suspiro pesadamente

-Decidí aceptar tu propuesta- confesó el menor -Te haré la marca, te ayudaré a entrar ,pero, debes de hacer todo lo que te pida y tendrías que permitirme el acceso a tu mente cuando estemos en presencia de un Mortífago peligroso- aclaro, con una voz tranquila ante todas las palabras dichas.

-Bien, acepto las condiciones- dijo el azabache -pero, tendrás que informarme de todo lo que pasa dentro y fuera de las reuniones, el acceso a mi mente será limitado y cualquier cosa o acción que quieras que haga tendrá un explicación lógica- anuncio

-No estás en posición de negociar- volteo su rostro para quedar frente a frente -Pero respeto tu decisión- levantó sus manos en forma de rendición.

James solo asistió con la cabeza lentamente -¿Cuando lo haremos?-

-Ahora si quieres- admitió -A menos que quieras esperar-

-No…- murmuró en voz baja pero lo suficiente alto para que Barty lo escuchará-

Barty tomó su varita, la guardo cuidadosamente sobre su saco, James al verlo repitió la acción. Salieron del bar, James estaba a punto de estallar de los nervios y de ansiedad.

El se había prometido a si mismo nunca tomar esa marca, ni aunque su vida corra peligro. Pero ahora es diferente, su vida no corre peligro ,si no, la de Regulus, de su Regulus y estaba dispuesto a hacer todo lo que tuviese al alcalde de sus manos para salvarlo

Cuando salieron se dirigieron al callejón que está cerca, James no sabía si tendrían que ir algún lugar o podría ser ahí mismo.

Dejaron de caminar al llegar, Barty tomó el hombro de James y se aparecieron en una casa, el mayor no sabía dónde estaban pero sin saber por qué, confiaba en que estaba el un lugar seguro.

-Ven…- murmuró Barty.

Guiándolo a una habitación que al parecer está era la sala de estar, está era grande y amplia, era iluminada por el fuego de la chimenea.

-Dame tu brazo- James le entrego su brazo, el menor subió la manga de su abrigo, dejando al descubierto su piel morena. Sabía que estaba temblando, pero no le importaba al menos no en ese momento.

Barty tomó su varita y la elevó hacía el antebrazo de James, comenzó a murmurar el hechizo a la vez que presionaba levemente la varita en el lugar indicado.

James comenzó a sentir un ardor en el brazo, quería quitarlo pero internamente sabía que podía soportarlo. Un pequeño color gris emanaba de su piel, se movía lentamente, logrando que se pudiese presencia a simple vista.

La serpiente aparecía sutilmente en su piel, hasta el punto de completarse totalmente y quedarse estática.
James no podía creerlo…

Ya estaba hecho, pertenecía a los Mortífagos, tenía la “ marca”. Pero el sabía que nunca sería de ese bando, no completamente.

Se sentía mareado por la sensación de temor que habitaba en su cuerpo, su respiración dificultaba con cada segundo, sus brazo le ardía pero este dolor se fue desvaneciendo poco a poco.

-¿Estás bien?- Barty lo saco de sus pensamientos -Duele al principio, pero luego pasará-

-Si… Si…- se limitó a responder
El menor lo invito silenciosamente a sentarse en unos de los sillones, el azabache solo se sentó y respiraba.

Estaba hecho…

No había nada que pudiese hacer al respecto…

-¿Qué sigue ahora?- la voz opaca de James llamo la atención del castaño.

-Debo hacer que ganes la confianza de los demás- respondió suspirando -Luego de eso, ellos te integrarán en las operaciones- agrego.

-¿Cuándo?- pregunto curioso.

-Pues…- murmuró él menor -Ahora no, deberías irte y hablaremos después-

James cayó en cuenta que el trabajo de Crounch ya había acabado y que tenía que irse, el solo asistió y se apareció en su casa.

Está estaba vacía, Regulus no había vuelto y decidió ir a pensar en el jardín, tenía que decírselo a Reg ,pero, ¿Cómo?.

El tiempo pasó, James simplemente se quedó dormido afuera, sobre el pasto y bajo las estrellas.

Regulus cuando llegó a la casa de los Potter’s, busco a James por cada habitación ,pero, no lo encontraba por ninguna. Llegó a pensar que había ido de compras, pero descarto la idea al notar la hora.

Pensó en todos los lugares que había buscado y cayó en cuenta que faltaba uno por buscar. Bajo las escaleras y se dirigió al jardín, allí pudo notar a James dormido en el suelo y sonrió inconscientemente.

Se acercó para acomodarse a un lado de el, teniendo mucho cuidado de no asustarlo comenzó a despertarlo. El mayor abrió los ojos, encontrándose con Regulus sonriéndole.

-Hey- saludo Reg -¿Estás bien?- murmuró

-Si, lo estoy- respondió James mirándolo fijamente -Es solo que estoy cansado- dejo el tema a un lado, dando a entender de qué no quería hablar de ello.

El menor no quiero insistir, solo se ocupó en apoyar su cabeza en el hombro derecho de James, ambos quedaron en un profundo silenció en el cual solo podía escuchar sus respiraciones.

-¿Me amas?- Pregunto Regulus.

-¡Si!- Respondió rápidamente James tomó la barbilla del menor haciendo  que este lo mire, los ojos del mayor tenían un brillo que resaltaba.

-¿Por qué?- Cuestiono el menor, con un poco de miedo en su voz

-Por qué estás roto- confeso suspirando

-¿Qué?- murmuro confundido el pelinegro

-Yo seré la razón por la que entiendas que puedes ser amado- Declaro el mayor tomando su rostro -Que tú no eres el problema-

-¿Vas a dejarme?- balbuceó ante la mirada intensa de James

-No- dijo el azabache mientras que el brillo en los ojos comenzó a desvanecerse- Tu lo harás- añadió.

-No, no lo haré- interrumpió rápido ante lo dicho

-Reg…- murmuró acercándose para abrazarlo por los hombros – Y… Yo ten… tenía…- James quería decirlo pero no podía, su voz no paraba de temblar

-Shh, tranquilo- Regulus comenzando a acariciar su pelo.

-Yo…- James sabía que no podría decirle aunque quisiese, por lo que, levantó su brazo y tomó su manga de su abrigo.

La marca quedó completamente al descubierto, James temblaba y el como Reg contuvieron la respiración.

-¡QUE DEMON…- Lo único que Regulus pudo formular.

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😅😅Holaaaa...😅😅

🍀No me maten, se que tarde mucho en actualizar.🍀

😝😝Pero la buena noticia es que ya he adelantado algunos capítulos.

Solo me estoy concentrando en un capítulo que realmente me tiene estancada 😔😔😔

🥰Tengan paciencia...🥰🥰

🤙🤙Voten y comenten🤙🤙

✨Gracias por leer✨

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⏰ Última actualización: Sep 25, 2022 ⏰

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