CAPÍTULO 28- Dejar de existir

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POV T/n

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De verdad que es muy difícil explicar los sentimientos.

Son algo tan abstracto que solo conseguimos describirlos con comparaciones que si son tangibles, o con las consecuencias que tienen estos.

Y es que simplemente es difícil de explicar ese latido saltado, esa respiración tan lenta y eterna, la electricidad de una caricia, el calor de otro cuerpo que se transfiere al tuyo.

¿Es posible que ya haya hablado sobre esto?

Mi mirada sigue posada en los labios del rubio.

Y yo estoy sintiendo cosas, cosas que nadie me ha dicho que debo sentir, simplemente lo hago.

Es posible que en toda la noche solo haya dormido como una hora, pero sinceramente no me siento casada, y mis ojos no me permiten ni parpadear, porque no quieren perderse ni un solo segundo de la imagen de JJ.

Joder, JJ.

Me cuesta demasiado, siquiera pronunciar su nombre en mi mente.

Porque es JJ.

JJ

JJ

JJ

El rubio.

Y esos latidos saltados y perdidos vuelven.

Gastamos los tres condones, por si te lo preguntabas. Totalmente productiva esta noche, lo bueno es que ya he quemado todas las calorías de una semana entera.

Oh, y el placer.

Dios mío el placer.

Desearía ahogarme en los orgasmos de esta noche, moriría feliz y satisfecha.

Cuando veo que se mueve un poco cierro los ojos y me hago la dormida.

Siento como se mueve a mi lado lentamente en silencio y como unos tibios labios se hunden encima de mis desnudos pechos cubiertos por las simples sábanas.

El ancla de un cuerpo hundido (JJ Maybank)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora