El Deseo del Olimpo 𝐈. Ⓒ [Blue Fortress]

Capitulo 13: Bienvenida a Atlantis.

Darle mi virginidad a alguien, no solo es acostarse con él. Hace tiempo leí que las personas que lo hacen le entregan un poco de ellos a esa persona. La conexión físicamente no solo es el propósito, los humanos solo buscan deseo y sin saber terminan creando un vínculo entre ellos.... Algo que no sentía hasta ahora.

La luz me hizo despertar. Mis ojos se percatan de todo a mi alrededor. La cama desordena, mi ropa tirada en el suelo y yo sola en esta habitación. Trato de levantarme, pero el dolor en mi espalda y vientre trataban de impedírmelo. El ardor que pensé que había desaparecido hoy se hizo más fuerte. Me doy cuenta de que traía algunos moretones en mi abdomen, muslo y brazos.

Por más poder que obtenga, mi cuerpo no deja de ser humano. Una sonrisa torpe me invade. Despego las sábanas por completo y vuelvo a colocarme el vestido para ir hacia mi habitación. Una vez terminó escucho la puerta. Me acerco y abro percatándome de quién se trataba.

—E-eros...— dice Licia, pero está crea un silencio incómodo entre nosotras y una vibra no buena me invade. Me mira de arriba abajo y trato de arreglarme disimuladamente el pelo, el cual estaba hecho un desastre. Su vista va adentro del dormitorio.

— No esta. — dije rápidamente y está tratando de disimular, pero lo veo bien! siento sus emociones.... estaba furiosa y con un nudo en su garganta que no la dejaba hablar bien. Eso pensé hasta que....

— Te está usando. — Dice y yo solo voto por escucharla. — Él es así y una bastarda como tú no va a hacer que cambie. Si no lo hice yo menos tu.

— ¿Cual es tu problema? — dije con cierto enojo. —Lo único que has hecho es mirarme con odio y desprecio, insultarme y tratar de darme celos con Eros.

— Tu eres mi problema! — se altera. — desde que llegaste solo ha sido un estorbo para él, El no solía ver a los humanos como lo hace contigo. Me refiero a que.... yo soy la que siempre ha estado con él. ¡El no estaría con alguien como tú, lo sé porque lo conozco!

Nunca pensé estar en esta situación. — Si fuera como tú lo dices, no sería yo quien estuviera en su habitación ahora.

Esta se petrifica con mi respuesta y con los ojos aguados se aleja de mi bruscamente. No quiero problemas con ella, pero si Eros la quisiera como ella dice nunca hubiera pasado lo qué pasó anoche. Se supone que cuando amas a alguien, sus sentimientos van por encima de todas las cosas. Solo espero no haberme equivocado respecto a lo que hice ayer.

Me di una ducha larga y me puse una de las ropas que las hadas habían hecho para mí... botas altas, pantalones ajustados y un chaleco negro. Peino un poco mi cabello y salgo encontrándome con Víctor el cual ayudaba a unos centauros con unas espadas y Fui a ver a Vrol.

— Buenos días. — dije y este me recibe.

— La pasaste bien anoche?

— Fue maravilloso, gracias por la fiesta. — dije y este me pasa una taza — No es orina de Fénix, ¿verdad? — este ríe leve.

— No tranquila, puedes tomarlo solo es té. — dice — Pronto se irán y espero que regresen.

— Si y hablando de eso... puedo volver a entrar, aunque ya no sea.... tú sabes. — pregunto apenada por no decir la palabra.

— ¿Eros no te dijo?

— ¿Decirme que?

— Bueno.... Una vez hagas uso de tu magia varía veces, tú raza varía y una pequeña parte se doblega. — explica— Es como un peso, de este lado está tu lado humano y del otro tu lado de Diosa— Este levanta sus dos manos y baja más una mano que la otra. — ahora mismo tu parte de Diosa se inclina más debido a tu uso de poder. Por lo que significa que si activas tu magia frente al portal que te envía aquí podrás entrar.