Capitulo 4

241 15 0
                                    


Termine de bañarme, y abrí mi placard tratando de buscar la ropa adecuada para salir. Opte por un vestido negro, apegado al cuerpo, y unos zapatos también negros con tacos. Y por ultimo decidí ponerme un tapado, ya que el clima estaba muy frío. Me maquille solo un poco, y deje mi pelo suelto al natural. Pude escuchar claramente una bocina de un auto sonar. Mire por la ventana, y observe bajar a Yongguk del auto. ¿Tiene auto? Fue la única pregunta que se me vino a la mente. Al rato escuche a mi madre llamarme desde abajo, y baje las escaleras.

— Vino un amigo a verte -dijo mi madre, sin entender nada-, ¿Qué haces vestida así?

Pude ver a Yongguk sentado en el living.

El vino a buscarme, porque vamos a salir a algún lugar -dije rápidamente-.

— ¿Salir? ¿A que lugar? ¿No vas a comer? ¿A que hora vuelves? -Tantas preguntas a la vez me marearon-.

— Si, quiero conocer un poco esta ciudad. No, no tengo ganas de comer. No se a que hora volveré.

— Pero... ¿Salir un lunes? Mañana tienes escuela. ¿Por qué no esperas el fin de semana? -Cuestiono, preocupada-.

— Es que Yongguk me invito hoy, y me pareció descortés decirle que no -mentí-. Se me hace tarde, Mamá -mentí nuevamente. Creo que si la seguía mirando, lloraría. Ella no merecía en absoluto lo que mi padre le estaba haciendo-.

—¿Y mi padre? ¿Dónde esta? -Cuestione, mirando por todas partes-.

—Dijo que tenía negocios que resolver, y se fue. -Me dijo, con una sonrisa-.

—¿Realmente es así?

— Si, ¿Por qué lo preguntas hija?

— Por nada, mama -le di una sonrisa fingida-.

—¿No vas a comer nada antes de irte? -me miro otra vez con esa cara de preocupación que conocía totalmente-.

— No tengo hambre, enserio... -insistí-. Te mandare un mensaje cuando llegue ¿Si? -la abrace, y una lagrima amenazaba con salir-.

—Cuídate, y no llegues tan tarde, por favor...

—De acuerdo, tú también cuídate -le sonreí, y llame a Yongguk-.—¡Yongguk! Vamos...

El se acerco, y me miro de arriba abajo, como si estuviera analizándome. — Vamos... -dijo, finalmente-.

Fuimos hacia fuera, y nos dirigimos al auto. Yongguk me abrió la puerta para que subiera. Le agradecí con una sonrisa, y subí rápidamente, ya que mis piernas se estaban congelando. Salude a mi mama, que me sonreía desde la puerta, y ella me devolvió el saludo. Luego nos fuimos. Cuando estuvimos allí adentro, se formo un gran silencio, que me ponía bastante incomoda. Finalmente, Yongguk hablo.

— ¿No me quieres contar que paso? -Dijo, al parecer preocupado-. Si quieres yo puedo escuch...

— ¿Tienes un auto? Jamás me lo hubiese imaginado de ti... -cambie rápidamente de tema-.

— Okay, ya entendí. No quieres hablar de ello... -dijo, riendo- El auto, me lo compro mi padre el año pasado...

— Ah, ¿Eres un niño consentido de tus papis? -me burle-.

— Si, ¿Algún problema? -dijo, riendo-.

— No, tienes suerte... Mis padres no me compran nada -dije, riendo también-.


Entre risas y risas, al final decidimos ir a un club. Baje del auto, y espere a que Yongguk estacionara. Entramos, y el ambiente era muy bueno. No había manera de que este triste en un lugar así. Por un lado estaba la barra, por el otro mucha gente bailando, y más allá había unas mesas con unos sillones donde se reían, y tomaban. Mire atentamente cada mesa, buscando un lugar. Y lo vi, ahí estaba él ...Mi profesor. Estaba riendo, abrazado a dos chicas, y con otro par de amigos al parecer. Me sentí mal, por un momento. No se porque me sentía así.


—¿Decidiste el lugar? -Me dijo Yongguk, sacándome de mis pensamientos-.

—   Ssi, vamos a la barra a pedir unos tragos –pude decir finalmente-.

— Bueno, si así lo prefieres... -se encogió de hombros-.

Nos dirigimos allí, y pedimos todo tipo de bebidas. Al no haber ido jamás a algún lugar así realmente me ponía en un estado bastante infantil de querer probar todo. De repente Yongguk mira su celular, y me mira apenado.

— ¿Qué ocurre? -le pregunte-.

— Me tengo que ir, mi mamá me llamo para una cena familiar -Me dijo, un poco molesto-.

— ¿Cena familiar? ¿No lo puedes hacer otro día?

— Es que mi papa casi nunca esta, y las veces que viene a mi casa tengo que ir...

— Aaaaaah, Esta bien...Puedes irte. Quédate tranquilo –le di una palmada en su espalda-.

— No, te tengo que llevar... -dijo, serio-.  Aparte, si sigues tomando así. No creo que termines bien esta noche...

— Puedes irte, ¡Enserio! –le hice señas con mis manos para que se fuera-.

— ¿Estas segura?

— Estoy segura, aparte no creo que me quede mucho tiempo más. ¡Quédate tranquilo! –le dije nuevamente-.

— Bueno, llámame cuando llegues a tu casa ¿Okay?

— Okay –le dije, y minutos después se fue-.

Puedo decir que desde ese momento en que se fue Yongguk, perdí totalmente la cordura. Empecé a tomar, y a tomar pensando en lo que mi papa había hecho. Una copa más, otra, y otra más. Llegue hasta tal punto en el que todo me daba vueltas, y no conseguía pararme correctamente.

— Hola bonita ¿Cómo te llamas? –Me dijo al oído un hombre de aproximadamente unos 35 años-.

— ¡Lárgate! No quiero hablar con nadie –dije, molesta. De enserio me sentía pésimo, y que venga alguien a molestarme era el colmo-.

— ¿Por qué eres así? ¡Vamos a un lugar en el que estemos solos! –Dijo, tomándome del brazo, y susurrando al oído-. Pude sentir un olor a alcohol fuerte salir de su boca. Me dio asco.

— ¡Suéltame! ¡No quiero ir contigo! -le grite, soltándome de su agarre-.

— ¡Vas a venir por las buenas, o por las malas! –dijo, tomándome a la fuerza del brazo nuevamente y llevándome. No podía soltarme de su agarre, y no podía caminar correctamente. Él tenia mas fuerza que yo, y esto ya no me estaba gustando nada. Le hubiera hecho caso a Yongguk cuando me dijo que fuera con él. Ahora me estaba llevando alguien que no conozco, ni se a donde me lleva, ni que me va a pasar. Comencé a llorar, y a gritar que me soltara.


— ¡Suéltala! –grito, otra voz... que se me hacia muy conocida por cierto-.





''Un nuevo Comienzo'' - Daehyun&TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora