Para el fin de semana Taehyung y yo decidimos empezar a trabajar en el jardín, por lo que me vestí con unos pantalones desgastados y una playera con manga, mientras que Taehyung eligió un estilo deportivo en tonos azul marino. Se veía espectacular y sexy aunque seguía prefiriendo los trajes con chaleco; por otro lado, al ver sus zapatillas podía adivinar que se gastarían apenas pusiera los pies en la tierra mojada y lodosa, así que sugerí que se cambiara a unas sandalias para andar en casa, acepto de mala gana diciendo que iba a terminar con los pies enlodados, el clima no era el más favorable pero al menos no estaba lloviendo, por lo que podíamos trabajar abonando la tierra para las futuras plantas y arbustos que sembramos.
Bajamos a desayunar sin los niños, Minji solía dormir hasta hasta las diez de la mañana y en cuanto a Jungwoon salía de su habitación cuando le diera hambre, los últimos días me aplico la ley del hielo y yo tampoco puse de mi parte para intentar arreglar las cosas entre nosotros, por ahora quería darle su espacio para asimilara los hechos. Taehyung y yo ya estábamos casados después de todo y Jungwoon tenía que aprender a vivir con eso y seguir adelante. La señora Park preparo un rico omelette que comimos acompañado de un jugo de toronja y pan tostado, no tardamos desayunando y apenas nos pusimos de pie, nos movimos hacia el jardín para empezar a trabajar. Todavía quedaban rastros de las antiguas plantas que habían Sido arrancadas así que fui a la bodega a buscar bolsas grandes para la basura.
Jungwoon estaba sentado en el sillón de en medio de la sala amarrando los cadetes de su zapatilla derecha, tenía una mochila colgada y los audífonos gruesos de diadema sobre su cabeza. Cuando se levantó me miró y parecía sorprendido con la misma expresión que ponía Minji después de hacer una travesura.
—¿Por qué estas vestido como si fueras a salir? —pregunte y me acerque hasta dónde estaba, no quiso mirarme.
—Quede con Jay para ir a su casa. No está lejos así que no creí que debería avisarte —su mano apretó la correa de la mochila.
—Siempre tienes que avisarme, no te mandas solo —dije de mala gana, es cierto que Jay vive sólo a unas cuantas cuadras, pero hasta ahora Jungwoon me había pedido permiso para hacer cualquier cosa, no como hoy que parecía, no tenía pensando avisar, además de que era necesario poner más límites antes de que se descarrilara y no supiera que hacer después con él—, además Taehyung ya te había dicho que...
—A mi no me importa lo que él diga, no puede decidir sobre mi vida, no es mi padre, sólo es un remplazo de mi padre que tú escogiste.
Suspiré cansado y me acerque para poner mis manos sobre su hombro.
—No te estoy pidiendo que lo veas como un padre, pero tienes que respetarlo cómo mi pareja. Jungwoon sé que es difícil pero él me hace feliz —Jungwoon parecía tener una expresión complicada en su rostro—, ¿No quieres que sea feliz?
Se alejo rápidamente de mi agarre y salió de la sala listo para huir de nuestra conversación. Estaba apunto de decir que todavía no le había dado permiso para salir a cualquier lado pero Kim entro tapando con él frente a frente.
—Estas tardando mucho sólo para ir por unas bolsas —miro a Jungwoon—, ¿no eres muy joven para usar bálsamo labial?
Desde donde estaba pude ver cómo las orejas de Jungwoon se ponían rojas, se dio la vuelta y subió corriendo por las escaleras bastante avergonzado.
—Son insoportables —dejo gritado y quise reír. Ya estaba claro para mí que mi hijo tenía un enamoramiento con su amigo, pero aún me parecía demasiado joven para tocar ciertos temas con él, además de que no sabría que hacer con la incomodidad, mi madre tampoco toco esos temas conmigo, pero fui lo suficientemente maduro para no hacer nada con Taehyung hasta que tuviera la edad adecuada. Jungwoon es todavía un niño, no podía siquiera pensar en él teniendo sexo.
—¿Iba a salir? —preguntó Taehyung colocándose detrás de mi y poniendo su mano en mi cadera—, parece que se arregló.
—Quería salir, pero no pidió permiso así que no lo hará.
Taehyung giro mi rostro para que lo mirará, su ceja estaba alzada.
—No crees que quiera escapar.
—Podría hacerlo pero creo que está lo suficientemente avergonzado por haber sido descubierto por ti como para querer salir, de todos modos, no es como que pueda impedir que se vea con Jay sin ninguna razón, sólo quiero que me avise y prohibirle cosas sólo podría hacer que su rencor hacia nosotros aumente, además salir a divertirse con su amigo puede distraerlo.
Saque mi teléfono del pantalón y le envié un mensaje a mi hijo: cuando estés más tranquilo, puedes salir, no llegue tarde y pórtate bien, te quiero.
No hubo respuesta, me dirigí nuevamente a la bodega con Taehyung detrás de mi para buscar las bolsas, una vez adentro Taehyung cerró la puerta y me atrapó por la cintura, se froto contra mi y me besó forzando su lengua en mi boca. Cuando nos separamos tenía la respiración agitada pero me atreví a decir:
—Tus manos están llenas de tierra.
—Lo sé, solo me acordé que no te había dado un beso de buenos días.
Sonreí y antes de volverme a distraer tome las bolsas y salimos hacia el jardín de nuevo.
Por la tarde Minji insistió en unirse a nosotros para arreglar el jardín, no es que una niña de cuatro años pudiera hacer algo, pero era mejor dejarla jugar a que hiciera un berrinche y se pusiera a llorar por horas, ya tenía suficiente con el desprecio de Jungwoon, no podía dejar que Minji se pusiera rencorosa por algo tan insignificante. Termino haciendo varias filas de pasteles de lodo, si cara, ropa, manos y pies estaban bastante manchados de tierra y por lo visto el vestido que había usado no se iba a poder recuperar de tan mal uso.
Deje el jardín antes de Taehyung y tomé una manguera para poder limpiar mis pies y los de Minji antes de entrar a la casa, sino hacia eso y dejaba mis huellas, la señora Park podría molestarse mucho.
Lleve a Minji a su habitación y la metí a la tina después de que se llenó con agua caliente y empecé a bañarla, me metí con ella para limpiarme también, en segundos el agua de volvió color café, me quedé ahí hasta quitar todo rastro de tierra de nuestros cuerpos y después fuimos a la regadera para limpiarnos a profundidad.
Había sido divertido pasar todo el día con Taehyung y con Minji, casi parecíamos una familia, sólo faltaba Jungwoon y sería perfecto. Taehyung era atento con Minji, dándole más tierra para que hiciera sus pasteles e incluso alguna hojas para adornar, también le ayudo a armar algunos muñecos. Verlos interactuar le dio un vuelco a mi corazón, la había estado ignorando hasta hoy y se podría decir que estábamos avanzando, después de todo era más fácil interactuar con Minji que con mi hijo mayor.
Me envolví en una toalla y dejé mi ropa sucia en el cesto de Minji, después de cambiarla con su ropa de dormir le dije que bajara a cenar y yo me fui a la habitación principal, que ahora compartía con Taehyung. Él ya estaba ahí, limpió y arreglado con su ropa de dormir también, fui al armario a tomar mi propia ropa, frente al mueble deje caer mi toalla quedando completamente desnudo.
"Ujum" Taehyung expreso detrás de mi y yo sonreí de lado, escuchando como caminaba hacia mi dirección.
—Y si nos saltamos la cena de la señora Park por otro tipo de cena —sus labios besaron mi cuello e hicieron un recorrido hasta mi oreja dónde Taehyung lamió y me fue imposible no gemir, sus manos sostuvieron mis caderas, mi culo se froto contra su erección, mientras que una de sus manos hizo un recorrido hasta mi pene y empezó a estimularlo.
Movió sus manos de arriba a abajo por mi pene y mis pies empezaron a flaquear, se sentían débiles y temblaban de excitación.
—Vamos a la cama —susurré y caminamos hasta ahí para dejarnos caer, en la lujuria.
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Malas decisiones
RandomHe sido humillado, pisoteado por las familias ricas y tratado como basura, me miraban como si fuera menos que un animal. Le han arrebatado a mi familia la oportunidad de crecer en este mundo de mierda, perdí a mis padres por la razón más estúpida p...