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Mikaela Tepes

Estaba a punto de tomar un vuelo a Japón junto a mi madre, ya que fue transferida de nuevo ahí por su trabajo.

Hace unos meses debimos haber llegado, pero debido a ciertos asuntos, nuestro vuelo se retrasó. Finalmente, volveremos al lugar de mi nacimiento. Me trae mucha nostalgia regresar a mi tierra natal, ya que al año de ser adoptado, tuvimos que salir del país por el trabajo de mi madre, quien fue transferida al extranjero.

Me dolió dejar a mi amigo de la infancia, Yuichiro. A pesar de que han pasado diez años, no me he permitido olvidarlo. Aunque mis recuerdos de su rostro son algo borrosos debido al tiempo transcurrido, lo atesoro como un buen recuerdo del hogar de acogida. Confío en que él está bien y es feliz con una familia que realmente lo aprecie.

También me duele irme de aquí, donde tengo toda mi vida. Ir a Japón significa empezar de nuevo, algo que, solo de pensarlo, me da rabia. Es una contradicción: me siento dividido entre la felicidad y la molestia.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por una voz femenina que anunciaba nuestro vuelo hacia Japón. Los nervios comenzaron a apoderarse de mí, algo que mi madre notó, y me sonrió con ternura antes de animarme a caminar.

Acomodamos nuestro equipaje ligero en los compartimentos superiores y nos sentamos.

—Estás muy nervioso —dijo con una leve sonrisa.

—¿Se nota mucho? —fruncí el ceño. A mi madre no se le escapa ningún detalle cuando se trata de mí.

—Un poco —respondió, sosteniendo mi mano—. Todo estará bien, ¿sí? Sé que estamos dejando una vida atrás, pero podemos hacer que esto funcione si ponemos de nuestra parte.

—Tienes razón —sonreí, intentando calmarla. Debe estar preocupada por mí. Aunque sus palabras de aliento me ayudaron un poco, no puedo evitar sentirme en conflicto.

—Arreglé todo respecto a tu transferencia. Están a poco tiempo del período de exámenes, así que tendrás mucho trabajo para ponerte al corriente —dijo divertida. Sé que disfruta verme sufrir.

—Debes estar bromeando —dije, rodando los ojos.

Soy bueno en los estudios, nunca se me han complicado. Estaba en segundo lugar en promedio en mi escuela, pero no me gusta estudiar. Ya me imagino estudiando día y noche para estar a la misma altura que los demás alumnos.

This is love || MikaYuuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora