La nueva vida de la heroína legendaria. Parte III.
Mis días desde que comencé a vivir en la mansión Dimitrov era muy pacíficos.
El Duque y la Duquesa me pidieron que los llamara padre y madre respectivamente y ellos parecían muy felices cada vez que los llamaba así, sobre todo la Duquesa, la cual me abrazaba con fuerza durante varios minutos incluso frente a los sirvientes.
Zelphine por su parte me llamaba hermana mayor y me pidio que la ayudará a entrenar para mejorar el control sobre sus poderes.
Por otro lado estaban Anity y Jelena, eran dos chicas de quince años quienes habían sido nombradas mis sirvientes principales. Por alguna razón ellas parecían disfrutar vestirme cada mañana con obstentuosos vestidos, peinar mi cabello, y darme de probar diferentes postres cada día.
Aunque eso último era algo que todos los sirvientes parecían disfrutar de verme haciendo.
Como por ejemplo, ahora mismo...
—Pruebe este postre señorita Fylia —Dijo Anity, dándome de comer con una cucharilla un postre amarillo que se veía muy blando.
Miré a Anity y luego al postre, nunca había visto ni probado un postre con una apariencia así.
Hasta ahora todos los postres que había probado desde que llegué a la mansión habían sido muy deliciosos, sobre todo el pastel enrollado que preparó Ethan recientemente se había vuelto mi postre favorito, y estaba segura que este no sería la excepción.
Abrí un poco mi boca y me comí de un bocado todo lo que había en la cucharilla.
Y por alguna razón cuando lo hice los comentarios de los sirvientes que me miraban comenzaron.
—La señorita Fylia se ve muy linda cada vez que abre sus ojos y sonríe cuando prueba un postre —Comentó una de las sirvientes que estaban en el comedor con nosotras.
—¡¿Verdad que sí?! —Dijo Anity alegremente— Deben de gustarle mucho.
—Jeje, reaccionar así por probar un simple pudín es tan lindo —Habló una de las sirvientes que parecían más mayores que las demás.
"¿Simple dices?" Pensé con mis ojos cerrados mientras saboreaba el postre. "En mi época no había nada tan delicioso como esto".
Y así, hubieron muchos otros comentarios mientras yo seguía probando los postres que Anity, Jelena y aveces otras sirvientes me daban de comer hasta que, repentinamente, las puertas del comedor se abrieron.
Eran el Duque y la Duquesa.
Las sirvientas casi se congelaron con la repentina llegada de ese par pero rápidamente la tensión se esfumó cuando ambos se sentaron a mi lado.
—A ver, a ver, di "Ahhh" —Me dijo la duquesa, dándome a probar otro postre a la vez que el duque también me ofrecía un postre diferente.
Todas las sirvientas tenían su mirada fija en mí mientras esperaban a que comiera lo que el Duque y la Duquesa me estaban dando ellos mismos.
Por primera vez en muchos años me sentí levemente apenada sin saber que hacer, pero, al final elegí comer primero el postre que la Duquesa me ofrecía y luego me comí el postre del Duque.
Y así fue como fui alimentada por la pareja de Duques más fuerte en el imperio en ese entonces.
==== Fin del MiniCap ====
Pregunta:
1) ¿Les gustan los Minicapitulos de Fylia?
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Salvaré a las villanas de la historia
RomanceEra un fanático de historias de reencarnación en mundos de fantasías ambientados en la época victoriana. Entre las muchas historias de ese estilo que leí sobresalía una muy similar a la historia de Cenicienta; con la típica protagonista atormentada...