❝Haven, ¿no es eso un peligro de incendio?❞
❝No, tú eres un peligro de incendio.❞
LUZ. | Draco Malfoy.
En el que Haven Potter era su luz al final del túnel.
𝑯𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂 𝑪𝒐𝒎𝒑𝒍𝒆𝒕𝒂
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Hogwarts había cambiado drásticamente con la muerte de Albus Dumbledore. Ignorando el hecho de que Snape era el director, muchas otras cosas estaban mal en el lugar que Haven solía considerar su hogar. Para empezar, tener Mortífagos patrullando los pasillos y acechando en cada esquina definitivamente no era lo ideal. Tener que marchar a todos lados como si estuvieran en el ejército, no poder comer a menos que hicieras lo que los profesores te pedían, ser golpeado hasta que tu visión se volvió borrosa y tu rostro está cubierto de sangre. Esas eran solo algunas cosas que podía enumerar en la parte superior de su cabeza.
Hogwarts era un infierno. Y no fue una subestimación decir que fue peor que cuando Umbridge estaba a cargo. Haven suspiró, moviéndose en su cama mientras se alejaba de sus pensamientos. Mojó su pluma en un poco de tinta mientras continuaba escribiendo su carta.
'Querido Harry,
Haré esto rápido porque no estoy segura de cuánto tiempo tengo hasta que ocurra el toque de queda.
Snape se está inquietando, más de lo que estaba antes. Creo que sabe algo sobre la rebelión. No creo que alguien nos haya delatado, pero no me opondría a la idea. Después de todo, todo el séptimo año está amontonado en una habitación, sería imposible que alguien no dejara pasar nada. Además de eso, la rebelión va fatal. Neville fue golpeado en la cara por uno de los Mortífagos, pero personalmente, creo que valió la pena. Era un segundo año, Harry. ¿Puedes creerlo? Las personas desaparecen de la noche a la mañana y regresan días después con moretones y cortes en la cara. Sé quién está detrás de esto, y sé que tú también. Es por eso que necesito que os deis prisa.
Sé que te lo estás preguntando, así que te lo diré. No hay noticias de Draco. Ha estado en silencio durante la última semana, estoy empezando a preocuparme. Sé que solo envía cartas para informarme qué está pasando en el mundo exterior, pero generalmente envía algo pequeño para decirme que está bien. Pero no he conseguido nada. Estuve tentada de enviarle una lechuza, pero eso sería estúpido e imprudente. Ya me estoy arriesgando bastante mandándote una actualización cada cuatro días. Lamento escuchar lo del Horrocrux. A estas alturas, espero que hayas avanzado algo en el caso.
Estoy haciendo todo lo que puedo para investigar, pero incluso nuestro tiempo en la biblioteca está restringido. De todos modos, ya no importa. Los mortífagos seguramente han revisado todos los libros para asegurarse de que no haya ninguna información sobre Voldemort en ninguno de ellos.
Te extraño. Malory también. Todos lo hacemos.
Haven'
"Date prisa, Journey", susurró Haven, abriendo un poco la ventana y su lechuza salió volando rápidamente. La cerró, reajustando las barras para que pareciera que no habían sido templadas. Haven se enderezó de su hamaca cuando la puerta se abrió y dos Mortífagos entraron bailando.
"¡A vuestras camas!" Exigió uno, y todos corrieron a sus respetuosos catres. Haven todavía no podía creer que todos los de séptimo año lograran caber en la habitación. Sus casas estaban separadas por nada más que un trozo de cinta de colores pegada a la pared. Todas las habitaciones de la vivienda estaban así ahora. Era una locura, ninguno de ellos tenía privacidad.
Deseaba haber podido estar con su hermano, junto con Hermione y Ron, pero una vez que Haven se dio cuenta de lo que estaba pasando en Hogwarts, necesitaba ayudarlos de inmediato. Así que había iniciado una rebelión, y aunque no iba tan bien como ella quería. Lo primero que Haven quería hacer era hacer salidas secretas ya que Snape había bloqueado todas las habituales. Solo habían logrado hacer uno hasta ahora, pero afortunadamente, fue suficiente para proporcionarles comida para cuando Snape decidiera que no iban a comer.
"¿Estás bien?" Malory susurró, y Haven levantó la vista para ver una fila a su izquierda. Las dos chicas se reconciliaron rápidamente justo antes de que Harry partiera en su misión. Sabían que se necesitaban la una a la otra, y ambas acordaron no volver a hacer nada idiota nunca más. Haven se alegró de que estuvieran en buenos términos una vez más. Después de todo, Malory era en quien más confiaba. Cuando descubrió que Sydney era un mortífago, se rompió por completo. Era la única familia que le quedaba a Malory, y cuando se reveló esa información, quedó destrozada. Haven asumió que esa era una de las principales razones por las que había aceptado ser su co-líder de la rebelión.
"Sí", murmuró Haven. "Estaba pensando."
Malory exhaló y oyó cómo se movía en el catre. "¿Alguna noticia de Draco?"
"No", respondió Haven, la decepción inundó su pecho. "Pero sé que no es como si lo estuviera haciendo a propósito. Tiene que haber una razón detrás de eso. Lo sé".
"Pones mucha fe en alguien que es un Mortífago", murmuró una voz masculina desde el catre de abajo. Haven se inclinó hacia adelante para jalar la almohada en la que estaba acostada debajo de ella, solo para agacharse y golpear a Jermey en la cabeza con ella. Dejó escapar un pequeño gruñido.
"Confío en él, ¿de acuerdo?"
"Él no está equivocado", afirmó Malory. "Confié en mi madre y mira a dónde nos llevó eso".
"Confío en Draco porque todavía está arriesgando su trasero para ayudarnos desde afuera. No estaría haciendo eso si estuviera planeando traicionarnos. Está aterrorizado de su padre, y Voldemort para el caso. Así que dejarlo en paz con vuestras dudas".
Jeremy suspiró. "Todavía no confío en él, pero confío en ti. Así que sí".
Haven puso los ojos en blanco y se movió para poder ponerse cómoda. "Sabias palabras de sabiduría, amigo".
Ella no pudo escuchar su respuesta porque ya se había quedado dormida.
