Damián Wayne Sumiso (Editando)

30° Especial

En la ciudad de Gotham vivia una familia bastante conocida, por cosas buenas como también por malas, pero por lo que mas se destacaban, era por la belleza de los miembros que conformaban esa singular familia, donde cada integrante tenía la capacidad de enamorar con tan sólo su presencia.

Ese encanto lo conocían todos, callendo a los pies de de los Wayne con facilidad, pero hace poco en la familia salió a la luz el nuevo hijo de Bruce Wayne. Un joven de diez años, con hermosos ojos verdes, piel morena y un gran parecido a su padre. Rápidamente todos calleron a los pies del niño de tan solo diez años y eso era peligroso, pues los pedofilos no tardaron en atacar al niño.

La belleza de Damian era exótica, cosa que lo hacía destacar de toda su familia, y de la sociedad. Poco después de su precentacion al mundo, los amigos de su padre y hermanos lo fueron a conocer, siendo algunos muy amigables con él y otros demostrando una gran morbosa y bizarra obsecion por el muchacho.

Aquellas personas fueron echadas de la mansión, con amenazas que dejaba en claro que su regreso a ella, jamás llegaría. El día en el cual se presentaría el pequeño niño fue horroroso, varios hombres tocaban a Damian de maneras obscenas, acosandolo a dónde fuera, dando halagos inapropiados. Eso fue un infierno, uno con el cual su padre acabó. Cada persona fue echada, dejando sólo a la familia dentro.

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Bruce se culpaba, no sabía en qué pensaba al presentar a su hijo de tal manera, sabiendo que pasó cuando a él le hicieron lo mismo sus padres.

Los tres hermanos mayores del menor se quedaron a su lado conversado, distrayendo le de lo sucedido.

Damian por su parte se sentía asqueroso, su cuerpo fue tocado por varios hombres, quería un baño que le limpiará todo lo que fue tocado. Sacó a su hermanos de su habitación, y prosiguió a lo suyo, fue un largo baño, pero la "suciedad" no se limpiaba, por más que el quisiera.

Aunque se asombro al ver como su hermano mayor, él estaba fuera de su habitación, esperándolo con una sonrisa, sin dudas lo dejaría pasar, pero tenía miedo por alguna extraña razón, Richar siempre a sido amable con él, pero en ese momento, su cara y sonrisa era de ansiedad, cosa que le asustó, dejándole afuera de su cuarto, el golpeo y grito su nombré pero no le habrio, algo en su hermano era raro esa noche.

Se mantuvo sentado en su cama, observando la ventana, parecía que alguien la escalaria y llegaría a él, pero no fue así, cosa que le dejó dormir, aunque aún así todos sus instintos estaban agudos, por el miedo de que alguien más le tocará.

Despertó y siguió su mañana como de costumbre, solo que lejos de su hermano mayor, quien le buscaba pero él rechaza, algo que le alivio fue que Tim se dio cuenta, así alejando lo de Richar, Jason también lo noto luego. Tenía gente quien le ayudaba, eso era bueno, tal vez así si podría estar seguro de los pedofilos.

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Jason fue quien más se le aserco, pero estaba bien, él no era malo, era sincero, lo quería, era el hermano mayor que perdía cada dia, aquel que quiso y ahora teme.

Su lugar seguro era estar con uno de sus dos hermanos, quienes eran capaces de protegerlo, Damian se confío, tanto que aveces dormia hasta con ellos, con Tim peleaban por las mantas, pero cuando se acostaba en la habitación de Jason, sentía como este le abrazaba, manteniendolo serca de él, pero no le disgustaba, por que con Jason sentía que no había intención oculta.

Dormia acurrucado a este, era feliz, su hermano mayor le protegía, cada que se escuchaban los pasos de alguien el mayor le abrazaba con más fuerza hasta que ese alguien se fuera, y aquello le encantaba, por fin alguien que lo protegía, sin tener deceos morbosos ocultos.