Take Me To Hell [Corea del Norte]

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Ha estado sentado en su colchón esperando que ya sea el momento, ya no hay marcha atrás de ningún tipo, aunque muy en el fondo espera que alguien venga a"salvarlo"; suspira para pensar que hacer ¿deberá hacer cartas? Pero ¿Para quien, si quiera alguien se interesará en él y su muerte? Si quiera alguien se molestará en leerlas y no tirarlas.

Es ridículo, es un ridículo, ¿por qué no solo lo hace y ya?

Nuevamente se sienta en el piso abrazándose sus piernas delgadas, hará las cartas, así al menos fingirá que a alguien le importa, como en su diario. Al menos como último deseo.

━━ Al menos creo que sería lo mejor ━━ busca algunos trozos de papel y un bolígrafo para escribir a las personas más importantes para él.

Primero, su hermano, si es que le deja decirle así, ve que lo odia, no le quiere ni ver por lo que hace o supuestamente hace.

Norte toma el bolígrafo para escribir un poco "lo siento muchísimo Sur, espero que ya deje de provocar problemas para ti y para los demás, siento mucho como te sientes, en verdad. No te preocupes por nada, acabaré con esto, acabaré con todo y con eso espero que estés feliz"

Es el resumen de la carta.

Deja la carta para su hermano a un lado y toma otra hoja, esta vez es para China.

"Señor China, espero que no se enoje conmigo o con mi gente, en verdad lo siento, no soporto más, siento que en cualquier momento explotaré y no quisiera aquello, quiero acabar todo ya, espero que lo entienda, le agradezco mucho lo que hizo por mí y mantener a mi gente como usted podría espero que no deje de cuidar a mi gente, gracias"

Nuevamente, cerró la carta y tomó la última hoja, esta sería para Rusia y los hermanos de este.

"Hola Rusia, saludos a ti y a tus hermanos, sabes, últimamente he estado recordando lo poco que recuerdo de mi infancia con ustedes, fue muy bonita, URSS nos cuidó bien a todos.
Lamento decirles esto así pero, me voy para siempre, espero revivir los momentos bonitos de la infancia allí... Arriba"

Cerró la última carta; las va a entregar y después de eso se va a tirar, miró a Mora, su peluche que siempre lo ha acompañado. Lo tomó para llevárselo consigo, cierra la puerta de su casa, ese hogar en una zona pobre, siempre lo ha visto, se despide de este alejándose lentamente.

La primera carta ya fue entregada, una de las sirvientas de la casa la tomó y la llevó con Sur que la colocó al último lugar, pues este está muy ocupado. Mañana hay reunión.

La segunda carta fue entregada a China, este la desechó sin interés al ver que era de Norte, tal vez una queja o un aumento o alguna estupidez así. 

Por último la carta a Rusia, Norte la dejó en el buzón pues le tiene miedo al jefe de este y a las criadas, todo ese trayecto le tomó bastante tiempo, demasiado tiempo. Ya todo está bastante oscuro, el norcoreano suspira para caminar al puente más cercano, es alto, abajo hay una carretera y es la hora pico.

Con esperanza se sentó en el borde preparado para saltar, sin embargo, esperaría, que alguien de los tres viniera para decir que no lo haga, que lo quieren, mira constantemente hacia los lados.

Esperó allí aproximadamente una hora y media, pero nada, suspira levantándose y mirar abajo abrazando a su conejo, muchas luces rápidas, le da mucho mareo, mira por última vez a los lados.

━━ Al menos nos vamos juntos ━━ sonrie leve, cerrando los ojos para finalmente saltar al vacío.

Suena un crack más un golpe de camión.

Lo último que se vio es a Norte en un charco de sangre aún abrazando a su conejo de peluche bicolor.

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Continuará.