La polémica de moda de esta semana es "La Mujer Rey", la película de título extraño y extraña premisa, que glorifica a una banda de traficantes de esclavos.
Esto es escandalosos y no tiene precedentes: Nunca antes había ocurrido que una película mostrase como un héroe a alguien que, en la vida real, fue un pedazo de mierda. Jamás.
Y lo que quería comentar es que me parece que tanto los apologistas como los detractores de esta película no están tocando el que es el verdadero asunto.
TODA película transcurre en un mundo de fantasía y está protagonizada por personajes ficticios. Da igual si tu mundo de fantasía se llama La Tierra Media o la villa 31 de Buenos Aires. Si tu héroe se llama Luke Skywalker o Neil Armstrong. Si tu película cuenta la historia de un viajero en el tiempo o de un desempleado que roba una bicicleta. Todo es igualmente fantástico.El valor de una ficción debe juzgarse única y exclusivamente por su lógica interna, por la eficacia con que despacha la fábula que está narrando. Y no por su "rigor histórico". Si la ficción se propone ser fiel a los hechos reales y lo logra de modo notable, bien por sus autores. Pero esto es solo una OPCIÓN artística tan buena o tan mala como permitirse toda clase de "licencias poéticas" o, incluso, elegir ser deliberadamente NO riguroso históricamente ("Bastardos sin gloria", por poner el ejemplo más obvio). Esto nunca fue un problema con ninguna película previa y no debería serlo tampoco con "La Mujer Rey".
¿Cuál es el verdadero asunto, entonces?Que los apologistas de esta película defienden dos ideas notoriamente falsas y acusan de ser "...istas" y personas horribles a quienes no acepten esas ideas:
1) Que, si la versión de los hechos que cuenta una película contradice lo que dicen los historiadores, entonces; tenés que aceptar la versión de la película. Una película ya no debe consultar a los historiadores si desea ser rigurosa, sino que ahora son los historiadores los que deben acomodar sus libros a la versión de Hollywood. De modo similar a como antes las publicidades de TV decían, cuando promocionaban un medicamento, "ante cualquier duda consulte a su médico". Y ahora son los médicos los que dicen, "haga lo que dice la televisión".
2) Que, si alguien filma una película cuyo protagonista se llama "Jack el destripador" o "Adolf Hitler", y que cuenta la historia de un hombre que rescata un perrito de una inundación; si te cayó bien el personaje de la película, entonces; también deberías admirar a la persona real con el mismo nombre.
Ambas ideas son notoriamente falsas.
Una de mis películas favoritas de niño era "Espartaco", de Stanley Kubrick. Cuando tenía 20 y tantos, decidí leer sobre la historia real que inspiró ese film: Me encontré con que ese film es bullshit de brontosaurio, y que el verdadero Espartaco de Tracia fue básicamente un "señor de la guerra", no mucho mejor que los tipos que por ese entonces se estaban repartiendo los restos del imperio belga a machetazos. A los 45 años me puse a escribir una historia sobre una rebelión de esclavos. O, más exactamente, sobre un adolescente que se une a una rebelión de esclavos y se va desilusionado gradualmente de ella. Cosa que dudosamente hubiese hecho nunca, si "Espartaco" no existiese.
No tiene nada de malo que una película sea bullshit. Todas lo son. Lo malo es que no esté permitido decir que es bullshit.
.........................................
Opinión: "La Mujer Rey" es la primera película políticamente relevante en décadas.
Cuando se estrena cada nuevo spin-off de una remake del reboot de una secuela de la versión live-action de una película de la época del cine mudo, la prensa pretende que el film es "polémico" por alguna razón increíblemente estúpida. "La protagonista es la primera mujer que aparece en una película en la Historia del cine. De hecho, hubo que inventar un neologismo, 'actriz', para referirse a ella. Esto ha molestado a muchos trolls sexistas de Internet que están haciendo un 'review bombing' diciendo que la película es mala sólo porque odian a las mujeres". Ya todo el mundo sabe lo que es eso y lo ve como lo que es realmente: una técnica de promoción. "La mujer rey", en cambio, es probablemente la primera película que REALMENTE cabrea a alguien desde "La naranja mecánica". Ignoro cuales eran las intenciones de los realizadores de este film o si las reacciones negativas que provocaron fueron intencionales o no. Económicamente, no les está yendo nada mal: la película tuvo uno de los 100 mejores fines de semana de apertura en la Historia del cine, con un costo de producción relativamente modesto de 50M de dólares. Como mínimo van a recuperar lo invertido con creces, a pesar de las campañas llamando a boicotear el film.
En el Hollywood de hoy hay una línea ideológica obligatoria de la que ningún estudio puede apartarse (en 2019, por ejemplo, hubo más republicanos en la convención anual del Partido Demócrata que en la entrega de los Oscars. La razón de esto fue que las invitaciones del PD eran para el titular "+1", las de los Oscar no). Incluso producciones independientes como las del Daily Wire tienen que cumplir con políticas de cupo y de censura impuestas por ley y/o por instituciones para-estatales como el sindicato de actores. Por lo que en realidad tampoco son muy diferentes de las de Disney o Warner, y pretender que sí lo son es sólo otra forma de promoción distinta. Nada que se aparte de la ideología obligatoria, por tanto, puede llegar a las salas de cine ni, en consecuencia, causar ninguna polémica. Pero lo que hace "La Mujer Rey" (ignoro si intencionalmente o no) no es contradecir la ideología obligatoria, sino REDUCIRLA AL ABSURDO. De allí que las mismas organizaciones identitarias raciales que están llamando a boicotearla (sin éxito) no pueden decir POR QUÉ, y se tuvieron que inventar hipócritamente que la película les cae mal porque está escrita y dirigida por dos mujeres blancas.
Toda ideología identitaria se basa en el principio de que nada de lo que HAGA una persona tiene la menor importancia: Lo único que importa, y lo único por lo que debe ser juzgada, es lo que la persona ES. Si una persona ES algo "bueno", no importa que HAGA algo "malo". Y si es algo malo, no importa que haga algo bueno. Pero este principio está casi siempre reservado a libros teóricos y cursos de adoctrinamiento esotérico solo para "iniciados". La principal actividad de los propagandistas de cualquier ideología identitaria es básicamente disimular en qué consiste realmente su doctrina seleccionando ejemplos tendenciosos. Es decir: ejemplos donde una persona "es" algo bueno y "hace" algo bueno, y ejemplos donde alguien que "es" algo malo "hace" algo malo. El objetivo de esta técnica de propaganda es que una persona distraída no entienda qué es lo que se está elogiando y repudiando realmente.
No es casual que las dos únicas ideologías identitarias que tienen mala prensa; el nazismo y el sionismo, o hace décadas que su propaganda está prohibida, o nunca tuvieron interés en hacer propaganda para las masas; por lo que la gente juzga a sus adeptos por sus ACTOS y no por su charlatanería. Tenemos, en cambio, un montón de distraídos que creen ser "feministas" porque les parece mal que una universidad rechazó a Madame Curie para la cátedra de física por ser mujer. Eso no es ser feminista: eso es el normal desagrado y rechazo provocado por una injusticia. Pero, si creen que una física mediocre o estudiante de fisca que adeuda materias, debería ser nombrada directora de una central nuclear por ser mujer, segregando a 400 candidatos varones más calificados que ella y provocando un Chernóbil en el camino; ENTONCES SÍ serían feministas.
En torno de toda ideología identitaria hay un PACTO DE HIPOCRESÍA, del que no sólo participan sus adeptos, sino también la gran mayoría de sus opositores; que juegan a criticarla con las típicas frases de: "Estamos todos de acuerdo con la 'inclusión', siempre y cuando esté bien hecha y no esté forzada". El pacto de hipocresía consiste en esto: "Vamos a defender esta idea, pero vamos a pretender, con cada ejemplo que elijamos, que estamos defendiendo OTRA COSA y no lo que realmente estamos defendiendo. Y ustedes, la coalición estamos-todos-de-acuerdo, van a pretender que no ven esta impostura y van a atacar también alguna otra cosa".
"La Mujer Rey" rompió con ese pacto de hipocresía. Si tratase de malvados hombres blancos esclavistas y heroicas mujeres negras tratando de acabar con el tráfico de esclavos, hubiese sido más de lo mismo. Pero, en cambio, trata de heroicas mujeres negras esclavistas y malvados hombres blancos que intentan acabar con el tráfico de esclavos. Como el alcalde Diamante, dice en voz alta la parte que debía decir en voz baja y en voz baja la parte que debía decir en voz alta.

ESTÁS LEYENDO
2001 películas de cine
Non-FictionUn recopilación de reseñas, críticas y reflexiones acerca de algunas películas que he visto.