3. Autentico conejo

307 49 3
                                    

Jungkook tenía que hacer más creíble todo, por eso cuando estaba esperando a Seokjin enfrente del edificio donde vivía, llevaba consigo su transportadora por si al caso decidía adoptar un nuevo conejo. Se sentía bien, pero realmente no sabía si lo suficiente para una nueva mascota, aunque sospechaba que no.

Estaba nervioso, por fin vería en vivo y a todo color a su guapo psicólogo y quería dar una buena impresión, por eso se había esmerado en arreglar su cabello y elegir un bonito abrigo que lo hiciera lucir.

El automóvil de Seokjin se detuvo enfrente de él y abrió la ventana del copiloto para que lo pudiera reconocer, a pesar de que el cubrebocas solo dejaba visible sus ojos, jungkook se quedaba impresionado por que era más guapo de lo que esperaba, esa cámara con la que hacia las videollamadas no le hacía justicia, en definitiva, ahora tendría que pensar en algo para verlo sin ese molesto cubrebocas.

—Hola, ¿vas a guardar eso? —Seokjin señalo la transportadora para macotas que Jungkook tenía en sus manos.

—Si —Jungkook salió de su aturdimiento y fue hacia la cajuela para guardar su caja que entre sus ideas locas dejaría olvidada la transportadora, para que después pudiera volver a ver a Seokjin, ya se sentía como un loco por haber planeado todo esto que más daba si le agregaba esto a su pequeña receta.

Jungkook fue directamente al asiento del copiloto, pero antes de entrar se roció sanitizante por todo su cuerpo vigorosamente, lo que provocó que Seokjin se riera, Jungkook parecía tierno mientras lo hacía. saludo a Seokjin y le indico la dirección a la que deberían ir. Comenzaron una charla alejada de sus consultas más con la intención de sacarle datos de sí mismo a Seokjin, que poco sabía de él.

Seokjin dejo a un lado sus formalidades y se abrió más a la charla con Jungkook, con bromas y chistes que si otra persona se los contara a Jungkook no le causaría ninguna gracia, pero al tratarse del psicólogo se reía. Jungkook intentaba no mirarlo de más para no incomodarlo, aunque esa tarea se le estaba dificultando.

Al llegar al refugio la encargada los dejo observar a todos los animalitos que tenían en su cuidado, la mayoría eran perritos y solo contaban con dos pequeños conejos que para su mala suerte ya estaban apartados. De todos modos, Jungkook se detuvo a observarlos por un buen rato mientras masticaban su alimento y asomaban sus dientes.

—No me mal interpretes Jungkook, pero ¿has oído esa frase de las cosas de parecen a sus dueños? —le pregunta Seokjin observando con el cariño que Jungkook ve a esos conejos. Jungkook asiente intentando acariciar a los conejos que corren por la superficie —. Creo que cuando sonríes pareces a un lindo conejo.

Jungkook mira sorprendido a Seokjin ¿dijo que era lindo? Hubiera deseado que le diera otra denominación, pero si así era la forma de llamar su atención, entonces podría comenzar a trabajar con eso.

Aunque Jungkook quisiera le hubiera gustado adoptar alguna mascota, pero en su departamento estaba prohibido y si le habían permitido tener a Mabel había sido porque este no hacia escándalo y siempre mantenía limpio para que su olor no se colara por el pasillo. Sabía que tener un perro conllevaba problemas con los vecinos.

Le había hecho bien ver más conejos, aunque no quería a uno más por el momento. Le había gustado tanto la compañía de Seokjin que era muy comprensivo con él, ambos sabían que esta sería la última vez que tendrían una consulta y dejarían de hablar. Al llegar enfrente del edificio donde vivía Jungkook era el momento de despedirse, pero permanecía sentado ahí en el asiento sin querer bajarse.

—Gracias por llevarme — dijo Jungkook y saco su teléfono— Permíteme, te hare la transferencia.

—No por favor, te acompañe como amigos, no tienes por qué pagarme.

Necesito terapia  | JinkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora