Hacerlo bien.

Capitulo 4.

Jacaerys Velaryon.

Desde que él tiene memoria siempre ha sido señalado como un bastardo, al igual que sus hermanos que nacieron después de él. Siempre había susurros que los señalaba como bastardos, él incluso había comenzado a dudas de que su padre sea Laenor Velaryon. Había muchas cosas que le decían que el hombre no era su padre, no tenían su apariencia, no habían sacado nada de Laenor y aún decía que era su padre; y que sus hermanos como él son sus hijos. Pero él sabía que no, porque él se parece más al caballero jurado de su madre: Seré Harwin Strong.

Él junto con sus hermanos se parecían a Ser Harwin, no habían sacado la apariencia de su madre, ni la de su padre. Tenían cabello negro y ojos marrones, lo que solo corresponde a una persona en el castillo. Ser Harwin Strong tenía cabello negro y ojos marrones, hasta Luke había sacado los rulos del caballero. Así que si, él sabía que su padre no era su padre y que el caballero jurado de su madre era realmente su padre.

El hecho de que ser Harwin era su padre, también cuadra perfectamente cuando es todo amoroso con sus hermanos y él. Incluso agarraba suavemente su mentón cuando entrenan y sonríe orgulloso cuando ganan contra nuestros tíos. Todo eso hace que sea más fácil decir del parentesco con el caballero.

De cualquier forma a él no le importaba nada eso. Él seguía siendo hijo de su madre, seguía siendo un dragón. El eclosionar de su huevo lo dice todo. Puede que él no sea hijo de Laenor Velaryon, pero seguía siendo hijo de Rhaenyra Targaryen, la heredera al trono de hierro, y él, el futuro heredero también de dicho trono.

Aunque él pensará así y trataba de mantenerse fuerte, los susurros y las agresiones de sus tíos le dolían. Siempre sus tíos eran agresivos en las prácticas de combates, a veces tanto que lo lastimaban y a su hermano Luke también. Ni hablar de que Ser Criston no les enseña como a sus tíos y ellos siempre se quedan atrás.

Cuando fue al campo de entrenamiento, él se dio cuenta de que su tío Aegon no se encontraba. Se preguntan si estaba enfermo o algo por el estilo, de cualquier forma él comenzó a entrenar con su hermano y tío Aemond. Una hora más tarde, su tío Aegon había aparecido.

Ser Criston había comenzado a regañar a su tío, pero no esperaba que su tío levantara la voz a Ser Criston, parecía que nadie se lo esperaba, ya que todos estaban quietos como una estatua. Luego su tío les había dicho que comenzarán a practicar y que no nos quedemos quietos, le hicimos caso y seguimos practicando. Cómo era de esperar Ser Criston entrenaba a sus tíos, pero no a ellos.

Unos minutos después, su tío Aegon se acercó a decirles que lo estaban haciendo mal. No sabía a lo que se refería hasta que él se los dice. Decir que no estaba avergonzado era como decir que su padre no es Ser Harwin. Estaba muy avergonzado de que su tío les haga ver qué estaban haciendo mal, pero lo estaba más cuando se dio cuenta de que toda la atención del lugar estaba dirigida hacia ellos.

-Oh, nosotros... No lo sabíamos.- es lo que salió de su boca en forma de susurro, estaba avergonzado de no ser suficientemente bueno como para saber que estaba agarrando mal la espada y que estaba dejando muchos huecos en su postura. Pero su tío, en vez de burlarse cómo lo hace siempre, él los sorprendió cuando comenzó a explicar lo que tenían que hacer.

Su tío, que de alguna manera se volvió bueno de la noche a la mañana, les explico los movimientos que estaban realizando. Al final estuvieron así por un largo tiempo, fueron unas largas horas donde Luke y él jadeaban por el cansancio y la falta de aire en sus pulmones. El tío Aegon los detuvo y los felicito para luego decir que mañana seguirían. Eso fue lo mejor que le había pasado a él, su tío nunca les había felicitado y ahora lo hizo.

Él estuvo extasiado por eso. Cuando la hora de entrenar se terminó, su tío se fue caminando, ignorando que Ser Criston lo miraba con enojo puro y que el resto de los que estaban ahí lo miraban aturdidos e incrédulos por lo que acababa de pasar.

<No los culpo, yo también estaba incrédulo por lo que acaba de pasar.>

Mientras caminaba, Luke se había detenido por unos segundos, parecía pensativo por algo.

-¿Luke?.- él lo llamo y su hermano, en vez de contestar, soltó un sonido interrogante.

-¿Por qué crees que el tío Aegon nos ayudó hoy?.- estaba claro que Luke estaba confundido por la ayuda del tío Aegon hoy, y para ser sinceros él también lo estaba.

-No tengo la respuesta a eso, Luke.- porque realmente no la tenía, no sabía el porqué su tío los había ayudado cuando tiempo atrás ni se les acercaba o los humillaba junto con su tío Aemond.

-Tal vez le agradamos al tío Aegon.- Luke decía eso con una gran esperanza en su voz, que él no quería romper su ilusión por muy ilusa que sea. Pero dentro de él también quiere creer que su tío les agrada, aunque sea un poco.

-No lo sé, el tiempo lo dirá.-

-De cualquier forma, ¿Viste los movimientos que hizo? Eso fue tan grandioso, no sabía que podíamos hacer eso con las espadas.- él sonríe al ver a su hermano tan emocionado, ver qué su tío había hecho sonreír a Luke le daba algunos puntos extras en su nuevo gusto.

-Sí, fueron muy buenos.- realmente lo fueron, porque él también había quedado tan absorto en los movimientos que no pudo pensar en nada más.

Realmente, él espera poder compartir más con sus tíos, o mejor dicho con su tío Aegon, espera que les pueda enseñar más cosas. Y tal vez, compartir más y conocer más a su tío Aegon, también tal vez recibir cumplidos de la persona que admira cuando es buena. Pero eso lo sabrá mañana.