.*- Missed Memories -*. [Karlnapity]

GOOD NIGHT

— ¿Ya mejor?

Soltó el castaño sentándose frente a el regalando así mismo un vaso con agua fresca a aquel moreno. Quackity sorbió su nariz asintiendo aún sin decir nada, tenía la garganta seca, a pesar de querer decir algo con claridad simplemente saldrían susurros casi inhaudibles. El de vendas en el rostro tomo el agua en mano y bebió de manera lenta hasta que el líquido desapareció del vaso. Levantó la mirada observando a lo otros dedos chicos viéndoles con preocupación, sabía lo que iban a preguntar pero ¿Que podría decir? No había tenido razon para llorar así o ¿Si la tenía?

— Quackity. . . — llamo el otro pelinegro — ¿Puedes contarnos que sucedió?

El menor en estatura suspiro de manera entrecortada respondiendo un "No lo sé" recibiendo una mirada nerviosa y confundida por parte de los otros dos chicos. ¿Es consecuencia del golpe en la cabeza? Se preguntaban los dos frente al de suéter azul.

— ¿No recuerdas?

—¡No! Digo. Si, si recuerdo, pero. . . — miró nuevamente hacia abajo — No se lo que paso.

— ¿Puedes explicar mejor? — el pelinegro asintió.

— estaba caminando de regreso y escuché algo. Me acerque y era un cerdito atrapado. Lo ayude y después apareció un ¿ser? —Hablo con duda en sus palabras, no se puso a analizar que era, estaba muy asustado — No se si era humano o no pero tenía una cabeza de cerdo y una corona. — la cara de los presentes cambio a una de temor — Me dio miedo y corrí.

Finalizó de narrar el de cabellera oscuro. El silencio se mantuvo unos minutos que para el menor parecían eternos. Finalmente el castaño se levantó de su asiento para luego dirigirse al pelinegro menor y abrazarlo, este último regreso el abrazo cerrando los ojos. Sus párpados ardían.

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Había pasado la tarde de manera rápida, en ningún momento los tres jóvenes se separaron. En estos momentos Quackity se encontraba recostado en el pecho de Sapnap mientras esté último le daba mimos, daba cariños en su cabello - el pelinegro se mayor altura había quitado el gorro sin preguntar -, mientras Quackity se aferraba más a el en busca de más, no entendía por qué pero le gustaba, se sentía bien, seguro y querido. ¿Que más podía pedir?

Karl llegó de repente con tres tazas de chocolate caliente, afuera el aire corría como si de una tormenta de nieve se tratase logrando hacer que se escuchará el chillido del mismo viento contra las ventanas y paredes. Podría dar miedo pero para ellos era una ovación especial, nada excepcional pero si algo digno de recordar.

Finalmente Karl se acurrucó boca abajo en el cuerpo de Quackity abrazando sus estómago y colocando la cabeza en el pecho del mismo ladeandola un poco para poder respirar. Quackity comenzó a jugar con el cabello desordenado del castaño. Ya no tenía frío, ya no le importaba lo que había pasado en el bosque con aquel cerdo/humano extraño. Ya no le importaba recordar lo que había sucedido, no al menos cuando ellos lo hacían sentir de esa manera.

Poco a poco sus ojos comenzaron a pesar, tenía sueño, quería dormir pero a la vez temía que al despertar ya no estar con aquellos dos, temía ya no tener esa paz que lo llenaba cada vez que estaba entre ambos. Sin más remedio sus ojos se cerraron, perdió la conciencia, y cayó rendido ante el sueño. . .

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— Ya se durmió.

Surruro Karl entre risas. Sapnap lo acompaño riendo de igual manera, acaricio el cabello oscuro del que ahora se encontraba durmiendo de manera profunda, para seguido besar con dulzura la cabeza ajena. Karl de igual manera beso la mejilla del moreno susurrando un "buenas noches" antes de acomodarse sobre el pecho del mismo y cerrar los ojos para descansar, había sido un largo día.

Sapnap no tuvo más opción que aguantar el peso de ambos chicos y resignarse a dormir sentado. Sería una larga e incómoda noche para el de cinta blanca.

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