Habían pasado semanas desde que las vendas en su rostro habían sido removidas pues ya no eran necesarias. Los primeros días se sentía incómodo, no había estado acostumbrado a no sentir la presión de aquellas tiras blancas que de vez en cuando se manchaban. Karl y Sapnap le habían ayudado, dándole confianza en que estaría bien y apoyandole emocionalmente con su nuevo cambio, que si bien, no era para mal el lo sentía de manera extraña.
Ahora mismo se encontraba medio adormilado recostado entre las piernas de Sapnap, su cabeza apoyada en el pecho del pelinegro de mayor altura, mientras recibía mimos en el cabello que sobresalía del gorro, de vez en cuando rosando su cara acariciandolo como si de porcelana se tratase.
El viento chocando contra las hojas y ramas de los árboles le daban una sensación agradable pues el sonido de la hojas rosando entre si los relajaba, el clima estaba fresco y no habia tantos bichitos que les molestaran. El sol brillaba de manera radical pero a la vez agradable, no quemaba como si en el mismísimo infierno estuvieras caminando, simplemente llegaba a acariciar la piel de todo aquel que pasase por su camino.
Simplemente un lindo día. . . Habían quedado los tres -karl, Sapnap y Quackity- a un pequeño picnic fuera del pequeño país que habían construido, lo veía como una posibilidad para pasarla con aquellos miembros por los que había comenzado a sentir algo más que un simple sentimiento de compañerismo o amistad. Extrañaba pasar tiempo con ellos ya que ni Sapnap, ni Karl habían tenido el suficiente tiempo como para convivir. Se solían mirar a lo lejos pero no era la misma. Dejo sus pensamientos de lado cuando el mexicano se removió entre sus piernas acomodándose. Sapnap sonrió y acaricio de nuevo la cabeza del moreno.
- Sabes que te quiero mucho ¿Verdad?
Pregunto sin esperar respuesta pues sabía que lo más probable es que el menor en estatura ya estuviera disfrutando de aquel mundo de maravilla pero a la vez horrores llamado sueños. Su rostro reflejaba paz pura, una tranquilidad que pocas veces se podía divisar en ese lugar al que llamaban "hogar".
- Te amo - beso la cabeza de su contrario soltando una pequeña risa de deleite - Los amo a ambos.
Cómo le hubiera gustado que el joven amante de los patos hubiera escuchado, hubiera deseado que escuchará lo mucho que lo amaba y como cada día despertaba con la ilusión de que el tiempo pasará más rápido, que su mente se estabilizará o que el mismo se enamorara como lo había hecho antes del insidente del que nadie sabe lo que pasó en realidad, aun que la mayoría tiene una idea.
Sapnap estaba dispuesto a cuidar de ambos, de mantener a ambos y de que los tres lograrán formar su historia. . . Una que no pudieran olvidar. . .
Pero. . . ¿No son las historias con final tristes, trágicas las que mas difícilmente se olvidan?
[. . .]
- Lamento la demora
Dijo el castaño llegando de manera agitada, Sapnap negó con tranquilidad mientras sonría de manera alegre, Karl de igual manera sonrió y se inco para mirar al moreno, quién aún seguía durmiendo de manera tranquila sobre el pecho del pelinegro mayor. Acaricio una de las mejillas del menor con suavidad disfrutando del momento.
- Al parecer ha estado durmiendo mejor.
Karl miró al de banda con interés, realmente no lo había notado, en el rostro del moreno ya casi no se apreciaban las ojeras provocadas por las pesadillas que hacian temer al menor. Habían implementado un método para ello y era dormir con el moreno, si no eran ellos, era George pero esto no sucedía tan seguido. Lo que le precupaba a ambos es que en algún punto tendrían que dejar al moreno solo, temían que es lo que podría pasar con el menor de cabellera oscura.
Finalmente Karl beso la mejilla del moreno y de segundo los labios del de banda. Se sentó al lado de ambos y comenzó a platicar con aquel que estaba despierto.
No paso demasiado tiempo hasta que el moreno comenzó a removerse para seguido abrir los ojos con pesadez mirando a la nada intentando que su cerebro despertara o como solía decirse a si mismo "que agarrara señal". Aquellos dos, pareja oficial, miraron al menor con dulzura en espera de que logrará despertar completamente, Karl no aguanto y soltó una risita. El moreno volteo a verlo de reojo y seguido se sentó completamente en el pasto.
- Buenos días, ¿Dormiste bien?
Pregunto Sapnap de manera divertida viendo las marcas que había dejado su ropa en las mejillas del menor a causa de la presión y el peso del rostro mismo. Las mejillas del más bajo en estatura se colorearon de un tono rosado por la vergüenza del momento, no había sido su intención quedarse dormido. Rasco su mejilla y posó la mirada lejos de la de Sapnap avergonzado.
- Si.
Respondió con simpleza, los otros dos simplemente rieron, les parecía algo tierno de su parte, Sapnap estiró sus brazos de manera alejada entre si con una sonrisa aún divertida.
- Ven aquí
Quackity no dijo nada y se acurrucó entre los brazos del de cabellera negra enredando sus brazos alrededor de su abdomen. Sapnap entonces cerro los brazos tomando con cariño a Quackity. Karl bufó imitando enfado.
- ¡Yo también quiero!
Ambos abrazados terminaron riendo ante la actitud infantil del mayor de todos. Karl se abalanzó sobre la espalda de Quackity dejando a los dos menores presos entre sus brazos. Ahora Quackity era el relleno de un sándwich muy amoroso.
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No mamen, la escuela me va a consumir un montón de tiempo. Debido a esto, POSIBLEMENTE, no es seguro, no habrá capítulos semanales como lo he estado haciendo, una disculpa de antemano
'-﹏-';
Aún así, tengo unos cuantos capítulos ya escritos (no terminados) pero que puedo agarrar para regularizar esto, aún hay tres semanas(? De capítulos semanales aprox así que, disfruten o7
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.*- Missed Memories -*. [Karlnapity]
Fanfic¡Oh! ¡No! ¿Que ha pasado? Ni siquiera él lo sabe, no recuerda. Pero sabe que fue algo malo. Algo que no lo deja sentirse en paz. Las memorias son fragmentos de tu vida. . . Pero ¿Que pasa si no recuerdas? ¿Que sería de esa vida? ¿Dejarías esa para c...