- la doncella es secuestrada por el dragón, por favor, salvarla de las garras del temible monstruo de ojos en rayas, ellos comen mujeres, destruyen pueblos, destierran reinos y asesinan héroes - Melanie se encogió cuando la mano del chico comenzó a...
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Yoongi y Melanie llegaron a Liberta cogidos de la mano, ambos cansados y viendo a toda las personas curando y sanando a sus heridos, algunas personas lloraban por sus familiares o amigos muertos en batalla. Taehyung llegó corriendo, agotado, pero feliz. Abrazo a su oprima con fuerza, la sacudió de un lado a otro, viendo que no tuviera heridas superficiales.
- ¡Todo acabó! - exclamó lloriqueando, el medio lobo parpadeó, varias veces para ver que Melanie estuviera en sus dos piezas - Hoseok está muerto, todo acabó.
El dolor surcaba sus ojos, lloraba desconsoladamente, queriendo que Hoseok pudiera estar con ellos, presenciando la libertad de su dimensión.
Melanie lo abrazó con fuerza, dejando que el niño derramara sus lágrimas a montones sobre su ropa.
- ¡Hija! -
- ¡Te dije que estaba bien! - exclamó Caius - nuestra bebé está bien.
Melanie dejó que sus padres le dieran un abrazo, aunque parecía que tenían más canas en la cabeza, no importaba, ambos estaban bien, a salvo, con ella.
Yoongi fue recibido por su gente y amigos, abrazándolo mientras se mantenía quieto, dejando que todos le den su muestra de afecto. Antes hubiera sido demasiado para él, pero ahora las cosas eran diferentes. ¡Lo había logrado!, terminó el calvario de su gente, la tortura terrible, los siglos de guerra sin retorno. Sintió su pecho cada vez más pequeño, toda la carga de ser el dragón de la profecía por fin se destruía, la enorme carga sobre sus hombros desaparecía y eso era tan bueno.
- Lo has hecho increíble muchacho, lo has hecho increíble - Alberto abrazó con fuerza a Yoongi, viendo como sus lágrimas caían lentamente, Yoongi ahora podría ser un joven más, con libertades - estoy feliz por ti jefe.
- ¿Se acabó? - preguntó, creyendo que todo era una farsa de su mente.
Lexie le sonrió, asintió mientras dejaba que todos sus soldados, quienes seguían a Yoongi con profunda lealtad, se mostrasen en filas rectas delante de él.
- Lo has hecho jefecito - murmuró Shanti, tenía una herida en la pierna izquierda, nada que no se pueda curar.
Dejó que Renardo le diera un estrujón último.
- No, lo hicimos, todos - murmuró frotando su nariz enrojecida por las lágrimas - todos lo hicimos.
Namjoon llegó corriendo a los segundos, estaba sollozando. Yoongi se acercó apresurado a su lado y se le quedó mirando, Namjoon jamás lloraba. Dejando que su amigo más fiel se aferrara a él, lo escuchó repetir palabras que estuvo absteniéndose de recordar.
Jain.
Jain, su otro cuidador, quien lo acompañó desde que nació, un fiel sirviente de los Min, le cambió los pañales, le dio biberón y lo entrenó a la par con otros. Jain el ser inmortal, quien había pensado varias veces acabar con su inmortalidad. Su sueño se le iba a cumplir muy pronto.
Parpadeó varias veces y buscó la mirada de Melanie entre todas.
Allí estaba, como si su cuerpo supiera que la necesitaba. Melanie se acercó a él sin pensarlo y cogió su mano entre la suya.
- Jain está... -
- lo sé, Joirietsen está con él - respondió.
El ambiente se tornó más triste y desanimado.
Yoongi y Melanie caminaron lentamente hasta la calle principal de Liberta, donde el palacio de los Min fue el epicentro del ritual más grandes de los tiempos. El círculo mágico aún estaba formado, claramente algunos brujos intentaban mantener con más tiempo a la pareja con más tiempo de vida de todo el planeta.
- ¡Jain! - Yoongi corrió hasta llegar a los pies de Jain. Un anciano Jain.
Abrazaba a su alma gemela con fuerza, no queriendo separarse de ella por ningún momento.
- mira cómo... Dios mío, te vez horrible -
Jain soltó una risa nasal mientras besaba con cariño a Joirietsen, se veía como una anciana de 110 años, piel arrugada, ojos vidriosos, cuerpo delgado y abultado. Ambos envejecieron juntos.
- que buen amigo eres muchacho - se burló Jain agotado, por darle más energía a Joirietsen, todo su mana - veo que lo lograste, mi rey, gracias por no demorarte tanto.
Yoongi se frotó un poco la nariz, se arrodilló frente a él y sujetó su mano, Namjoon y Melanie hicieron lo mismo, solo que ella se acercó a su tía.
Jain recordó cuando Namjoon y Yoongi eran unos niños. Cada vez que hacían una travesura, se escondían detrás de él, sujetando su saco largo para que Iolin no los atrapara, la mayoría de las veces era por culpa de Yoongi, siempre metía en problemas al menor, especialmente sabiendo que era tan torpe con todo.
- recuerdo cuando ambos eran solo unos niños pequeños - murmuró cerrando los ojos - Joirietsen siempre me decía que Melanie era mucho más grande que ustedes a su edad.
Joirietsen se rio un poco, sujetando la mano de Melanie a la par, la miró. En algún lugar del rostro ovalado de la niña, podía ver al imbécil de Jungkook y en los ojos a su adorada hermana. Había agradecido que no se parecía a su madre.
- recuerdo verte jugar con esas rocas cuando fue a la casa de tu madre - murmuró Joirietsen - informé de todo a Caius y Hicka cuando te vi, tu condición y todo. Tenías tanta vida en tus ojos.
Melanie parpadeó varias veces, a pesar de que conocía muy poco a Joirietsen, se sentía triste al saber que iba a ser la última de la sangre de Aneu.
- ¿estarás bien no estando entre nosotros? - preguntó Melanie mientras colocaba sus manos delicadamente, temiendo que sus huesos se rompieras.
La bruja sonrió, acarició los dedos de Melanie con cuidado, mucho más largos que los de Aneu.
- nací antes que todos aquí, he estado demasiado tiempo entre los vivos, esperando un sucesor como Eilenne Taehyun, quien es digno de mi poder, ya no hay nada que esperar - Joirietsen comenzó a sentir sueño, se apoyó más en los brazos de Jain y sintió su calor.
¿Cuántas veces se peleó con celeste?, muchas, su última pelea tardo casi un siglo en reconciliarse. Ambos eran inmortales y tenían tiempo de sobra, pero ahora... ahora ya no querían estar lejos del otro.
- te corono a ti, Min Yoongi - comenzó a murmurar Joirietsen.
Yoongi parpadeó varias veces, sintiendo un calor en su cuerpo. Le habían dicho como iba a sentir cuando lo coronaran como el rey Min de Liberta, un calor pasar por su cuerpo, el sentimiento de su poder despierto, su dragón clamando con furia despertar, soltar todo su poder y rugir con fuerza.
- como el futuro y amado emperador de esta dimensión, para que puedas hacer de esta basta tierra algo hermoso, cuidarlos y saber cómo usar tus habilidades de un encargado Dragón de trueno. Que sepas regir entre todos con sabiduría, con paciencia y, sobre todo, defender a los tuyos - Joirietsen sonrió mientras juntaba la mano de Melanie contra la de Yoongi - y tú, Melanie Jeon, con tu inteligencia, tu sabiduría y fuerza, reinaras junto a tu alma gemela, lo ayudaras a elegir sabiamente, sobre todo, a escoger de entre el bien y el mal.
Melanie miró a Joirietsen, su piel comenzaba a llover con escarcha brillante. Jain estaba en las mismas, sujetando a su amada con una sonrisa.
- Rey y reina de Liberta - murmuró.
Namjoon lloriqueo viendo como comenzaba a desaparecer Jain, en pequeñas luces brillantes.
- espero que puedan ser felices, consigan sus vidas y vívanla - habló dándoles un último mensaje - ahora este mundo está en sus manos, fórmenlos como ustedes crean.
Joirietsen bostezó como última vez y cerró sus ojos, partícula tras partícula flotaba por el aire, elevándose lentamente, sin dudarlo.
Melanie observó el show de como un fantástico moría, no había visto uno jamás, pero tenía que decir, que era hermoso.
Joirietsen y Jain subieron al eterno descanso de un fantástico, junto a sus amigos.
Las cosas tuvieron que ponerse en marcha tan rápido como pudieron, Iolin, Hicka y Caius se encargaron de todo. Las otras naciones comenzaron a buscar a los Eilenne, pero estos parecían haber desaparecido de las fas de la tierra, seguramente se escondieron con el rabo entre las piernas. Siempre de cobardes. Taehyung, el nuevo supremo, se iba a encargar de atrapar a toda su sucia familia, luego de eso, se iba a cambiar el apellido. De una buena vez.
- ¿Estás segura de que es de este color? - preguntó por última vez Hicka, quien no dejaba de ver la tela de la ropa de su preciada hija - creo que no le va a quedar bien.
- oye, ¿Eres el modista? - Greendelow se quejó viéndolo - ¡vete, sal de aquí, encárgate de ese chico que no deja que toque su cabello!
Hicka arrugó su frente, sabiendo a quien se refería. Yoongi no se había separado de Melanie en todo el tiempo, pegado a ella como chicle, robándole besos y cariños.
- ¿puedes soltar a mi hija? -
- Mía - murmuró Yoongi frotando su rostro en el cuello de Melanie. Ella sonrió mientras lo abrazaba, le gustaba el lado meloso de Yoongi en ese instante.
- sí, si, tuya, pero ahora será mi hija para vestirla, ¿Entendido? -
Yoongi puso sus ojos en rendijas, viendo al mago y padre de su alma gemela. Se alejó de ella a regañadientes y cruzó sus brazos.
- deberías buscar a Iolin, te está buscando, debes vestirte rápido - Hicka tomó a su hija por los hombros y corrió con ella a saber dios donde.
Yoongi suspiró y se dirigió al despacho de Iolin. La sirena había preparado la ropa especial para el gran anuncio que iban a hacer. Una transmisión especial directa en todos los canales centrales de cada nación, un mensaje que iba a ir directo a todos, calmando y como advertencia.
- hey - llamó al entrar a la habitación.
Iolin estaba mirando la ropa que Yoongi iba a usar, los bordados de hilo de oros dibujaban un dragón enorme en la espalda, hermoso y brillante.
- ¿no es hermoso? -
- lo has hecho tú, claro que es hermoso, madre - murmuró mientras se acerca a su costado y apoyaba su cabeza en el hombro de Iolin - que te tiene incómoda.
Iolin sonrió entristecida.
- Yoongi - comenzó - luego de tu mensaje, iré a un largo viaje.
Los hombros del dragón se tensaron.
- ¿te irás? -
- Seol está en alguna parte, no en esta dimensión, pero en otra si - Iolin se acercó a la ropa de Yoongi y la sacó de la percha, con cuidado peino sus dedos encima de la tela y volteó para mirar al joven - iré a buscarla.
Yoongi aplastó sus labios afelpados en una línea recta.
- hey, no te sientas triste, estaremos en contacto - Iolin lo abrazó con fuerza - pero es hora de que me vaya, es tiempo de que tu tomes riendas de todo esto, ahora te toca hacer esto.
El dragón se sintió cohibido por un momento, pero recordó todo lo que aprendió, el recuerdo de sus hermanos, de sus padres, de su hermana mayor y de todo lo que tuvo que hacer para que los fantásticos suprimidos fueran libres.
- haré que Liberta se extienda, madre -
Iolin sabía que dejaba a cargo a Yoongi. Era un Min después de todo.
