6. ¿Clark?

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Conducir por las calles de Woodsboro, a toda velocidad, sin era una de las mejores sensaciones, se podía sentir libre, y si descarga todo su dolor, la brisa se llevaría sus lágrimas, y hacer su trabajo diario en la pizzería de sus tíos se sentía como un escape, un momento en el que él podía descargar tpdo el dolor acumulado en su p3cho desde que se enteró de la muerte de su mejor amiga, no, de su hermana, porque para él, Casey era como la hermana que nunca tuvo y perderla se sintió como si perdiera a un familiar. No lloraba de esa forma desde la muerte de su padre, nunca espero que esto volviera a sucederle, y le partía el alma saber que ese alguien se trataba de ella, siempre creyo que serían amigos hasta que fueran viejos y les tengan que cambiar el pañal, tantas cosas que no podría ya nunca disfrutar con ella, ya no verla cuando ella se casé con alguien que él nunca aceptaría, pero lo haría sólo porque veía a su rubia sonreír, ya nada de eso sucedería, por culpa de ese mal nacido que la asesino. Esa persona pagaría por lo que hizo y él se encargaría de que eso suce...- ¿Clark? -esa voz llena de calidez, lo sacó de sus pensamientos, dándose cuenta de que ya había llegado a la casa de Macher, ¿Cuando o como llegó? Estaba demaciado perdido, igual no se sorprende, aquél joven alto debate suyo siempre pedía pizza para desayunar, aunque en lo personal nunca lo haría. Sonriendo con nerviosismo le entrega la caja de pizza-Es muy amable de tu parte, pero es que yo no ordene pizza, por lo menos no todavía.

Se puso rojo de la vergüenza al instante en el que le dijo eso-Mierda-maldice a lo bajo, en lo que intenta recordar a quien debía de llevar esa pizza, pero no había caso-en verdad lamento el inconveniente, no se en donde tengo la cabeza estos últimos días.

Tomando la caja de regreso, se dispone a irse, aún avergonzado por lo que sucedió, ¿Como puede ser que estuviera tan distraído? De seguro ahora Stu se estuviera burlando de él, siempre se burlaban de él cuando cometía un error similar-Oye Clark-su voz lo vuelve a sacar de su asoñación, regresando a la realidad se da la vuelta y conecta con esos ojos llenos de dulzura- ¿Te gustaría pasar? Tengo algo de café preparado por si gustas pasar... Cl-Claro, si no tienes nada mejor que hacer.

-M-Me vendría bien algo de cafeína-murmulla, correspondiendo a la sonrisa que el mayor le obsequia.

Entrando después de él, ambos se dirigen al salón en donde se sienta en el sillón, en ma espera de que el contrario trajera las tazas con café. Se sentía nervioso y algo incómodo, nunca anres había entrado a la casa, puesto a que sus conversaciones con Stu eran cortas y no pasaban del pórtico, y ahora que estaba dentro, no negaría de que era lindo el interior de aquella vivienda. Pronto el dueño de la casa llegó con las tazas, entregando una de ellas a él, para posteriormente sentarse a su lado, y ciertamente no sabría diferenciar cual de los dos se encontraba más nervioso.

- ¿Te gustan las películas de terror? -dice Stu rompiendo el silencio incómodo que se habia formado entre ambos-Por que a mi si, aunque prefiero todavía más las de zombies.

Una leve risa escapó de entre sus labios al escuchar la pregunta, le parecía una forma ingeniosa de comenzar una conversación-Yo también prefiero las de zombies, y mucho más las pelis de found footage.

- ¡Esas son las mejores! -declara con emoción el mayor de altura-Aunque sólo eh visto la de Holocausto caníbal que posee ese estilo de técnica.

- ¡Al fin alguien con algo de buen gusto! -exclama sonriente.

-Sa-sabes, hace p-poco conseguí la película de Rosemary's Baby, por si quieres venir a verla un día de estos-comenta sonriente el mayor de altura, abrazando por sobre los hombros al contrario-, comemos algo de pizza y tomamos algunas cervecitas, cl-ckaro, sólo si quieres.

Su rostro se había teñido de mil colores por el contacto, aún así intenta mantener la compostura-S-Suena bien, ¿Te parece que lo hagamos esta noche?

-Por mi esta bien-dice sin poder dejar de sonreír.

Oh Dios, oh Dios, oh Dios, no podía evitar emocionarse o sonreír a lo bobo. Y es que prácticamente acababa de invitar a su crush a una cita no tan cita y eso lo emocionaba. Y aunque el chico se retiró, no pudo dejar de sonreír, estaba enamorado, no lo podían culpar, llevaban más fe un año más o menos con esa rutina en la que él pedía algo de pizza y Clark se la traía, intercambiaban un par de palabras y eso era todo. Pero hoy fue distinto a las otras veces, y eso le encantaba, además, de que pudo hacer al moreno olvidarse por un momento de lo sucedido con Casey. Una muerte que había sido culpa suya, él queria vengarse de ella e ignorando todo sentimiento de culpa que sentiría después la asesino con la ayuda de Billy. Si tan solo alguien le hubiera dicho lo mal que se sentiría después de eso todo a causa de Clark, de verlo llorar, algo que le partió el corazón.

Pero llegada la noche y tres atormentar por un rato a Sidney, llegó a su casa y arreglo todo en la espera del muchacho, mas Clark nunca llegó a su cita, lo que lo desánimo, pero la llamada de Billy al menos lo distrajo, ahora debía de encargarse de llamar a Sidney, porque este plan apenas había comenzado.

[...]

-Explicame una vez más-pidio Randy desde el otro lado de la línea, intentando aguantarse las ganas de soltar la carcajada- ¿Porque te metió preso la policía en esta ocasión?

-Exceso de velocidad-dijo cortante-. Si vas a venir a pagar mi fianza o estoy desperdiciando mi única llamada.

-Voy en camino, tu sólo esperame y no dejes que abusen de ti-se burla entre risas.

-Eres un imbécil.

Clamando su risa, agrega-Lo se, pero ahora soy tu único canal de escape de prisión.

Cortando la llamada regresa a su celda, como mjcho, tendría que esperar máximo una hora hasta que llegue su compañero a pagar su fianza, se sentó a esperarlo. Se suponía que está noche sería una de relajación, en la que se la pasaría viendo películas con Stu y comiendo comida chatarra hasta explotar, pero no, había conducido demaciado rapido por las calles y la policía lo detuvo, y al no tener los papeles del vehículo en mano o su licencia lo metieron a la prisión en la comisaría, en al que por suerte al no haber tanto crimen en Woodsboro, tan solo se encontraban un borracho que según sabía se había metido en una pelea y uno de sus compañeros de clase, se llamaba William si no mal recuerda, y la razón por la que este estaba aquí aún se le era desconocida, pero tampoco es como si le interesará saberlo.

Jugando con sus pies pasaba el tiempo, estaba aburrido y no era alguien tan sociable como para iniciar una conversación con ese chico, además tenía una mirada como de un loco psicópata como el te muestran en las películas, razón número uno por la que no pensaba hablar con él. ¡Razón número dos! Randy iba a llegar en cualquier momento y no le gustaría irse y dejar una conversación a medio terminar, además, de que debía de buscar las palabras indicadas para explicarle a Stu la razón por la que no pudo llegar a su reunión de esta noche.

-Bianchi-sobresalto del susto, cuando el oficial lo llamo-, pagaron tu fianza ya puedes irte.

- ¡Al fin!

Despidiéndose de quienes estaban con el en la celda, se retira tranquilo con una sonrisa de oreja a oreja, una que crece al ver a Randy con el ceño fruncido puesto a que tuco que pagar cincuenta dólares para que lo liberen, dinero que nunca se lo pagaría por que lo más probable que se termine olvidando que se lo debe.

- ¿Tenés tu teléfono a mano?

Nesesitaba explicarle lo más pronto posible toda la situación a Stu, aunque tampoco comprendía su necesidad de hacer cumplir esto, pero lo haría para al menos no quedar mal ante Macher.

- ¡Ho-ola, Stu! -titubea al hablar.

- ¿Clark?

Pizza delivery ᴳʰᵒˢᵗᶠᵃᶜᵉ/ˢᵗᵘ ᴹᵃᶜʰᵉʳDonde viven las historias. Descúbrelo ahora