Capítulo 11

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Capítulo 11

Lan Zhan no estrelló el auto camino a casa solo por un mero milagro. Su respiración era profunda y lenta, trataba de mantenerse bajo control pero fallaba miserablemente. Ten cuidado con Jiang Fengmian, él realmente es una mala persona. La voz de Wei Ying, su rostro lleno de culpa, y esos ojos atormentados que miraban a Lan Zhan pidiéndole perdón de salir del cine. Es realmente una mala persona.

Lan Zhan siempre tuvo un tipo de desconfianza hacia Jiang Fengmian. No podía decir por qué, era solo algo que su corazón sentía. Jiang Fengmian no parecía ... honesto, genuino hacia su hijo, ni hacia Lan Qiren y ellos, sin embargo, para su tío todo estaba bien, no vio nada malo, porque técnicamente no había nada que ver, era solo una corazonada.

Lan Zhan apretó las manos en el volante, una furia fría recorrió su cuerpo, pero se mantuvo inmóvil en el asiento. Jiang Fengmian estaba planeando algo, algo tan horrible que ni siquiera Wei Ying sabía y, sin embargo, Wei Ying fue lo suficientemente valiente como para contárselo, temeroso de que su padre los lastimara. Salió del auto, esas macetas hermosas que diariamente eran regadas por Meng Yao, habían quedado pulverizadas y en pedazos gracias a la defensa de su auto estrellándose. Se disculparía más tarde, ahora mismo necesita advertirles.

"A mi oficina. Ahora'' Lan Zhan hizo un buen trabajo manteniéndose bajo control. Sentir ira está permitido, es una emoción natural y reprimirla no le hace bien al cuerpo y el alma. Sin embargo, lo que estaba prohibido era ser descortés con la gente, sin importar cuánta rabia tenga, Lan Qiren dijo que un verdadero alfa debe tomar el riendas sobre sus instintos y sentimientos, no al revés.

Meng Yao miró a Lan Xichen y su alfa le devolvió la mirada. Estaban cómodamente sentados junto a la chimenea, Lan Jingyi cenaba en los brazos de su padre omega, sin darse cuenta de la bomba que estaba a punto de explotar en su casa. Lan Xichen se levantó primero, ayudando a su hijo y omega. Lan Zhan no los esperó, por darles privacidad, o para huir de los pensamientos dentro de su cabeza.

Lan Zhan destruiría a los Jiangs, no haría ninguna excepción con ellos. Todos eran exactamente como Jiang Fengmian. Fríos, crueles, despiadados. ''¡Ah! ¡Lan Zhan! ¿Ya conociste a mi hermano?'' Wei Ying generalmente invadía su espacio personal, con el consentimiento de Lan Zhan, por supuesto. Si no disfrutase de las atenciones del omega, sus burlas, bromas y charlas, lo hubiese alejado desde la primera vez, la cosa era que Lan Zhan había caído por él desde que lo consoló durante su primer encuentro en la oficina de Jiang Fengmian.

"Deja de llamarme así en público" Jiang Cheng susurró airado al omega, Wei Ying envolvió apretó su agarre en el brazo de Lan Zhan, su sonrisa temblando en su rostro, se vio obligado a reír para evitar cualquier confrontación futura. "¿Qué estás haciendo con él? Wangji, ¿te está molestando?" En ese momento, cuando todavía eran niños, no era extraño ver a Wei Ying en las fiestas que Jiang Fengmian organizaba o eran invitado, especialmente si en estas celebraciones estaban los Lan. Él era la atracción principal de Jiang Fengmian, el diamante precioso que atraía como abejas a la miel para mantenerlos distraídos.

"Estoy disfrutando de su compañía", dijo Lan Zhan, con un tono más frío que cualquier otro día. Lan Qiren le ha dicho que nunca se haga a un lado si ve que alguien maltrata a otra persona, peor si esa persona era un omega (el suyo).

"Si su presencia se vuelve insoportable, no dudes en llamarme, me encargaré del problema" El rostro de Lan Zhan no se movió ni un centímetro, pero Wei Ying supo de inmediato que ese comentario lo había molestado. Pasó saliva, mirando entre los dos. Era bien sabida la admiración que Jiang Cheng tenía por los Lan y cómo quería complacerlos y mantenerlos felices, sin embargo... Cualquier acto descortés hacia Wei Ying terminaba por ser un acto descortés hacia Lan Zhan.

Propiedad de Lan ZhanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora