Capítulo 22

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Capítulo 22

Lan Jingyi mira a su primo con ojos curiosos, era un bebé muy rosita y pequeño, pero igual pensó que Lan Sizhui era un hermoso bebé. "No, cariño, despertarás a tu primo" Meng Yao agarró su muñeca suavemente, evitando que sacudiera el sonajero blanco.

"Jugar...", dice Lan Jingyi, ha hablado mucho últimamente, usando palabras que no existen o creando otras nuevas, en muchas ocasiones sus primeras oraciones a veces no tenían ningún sentido. Meng Yao lo levantó del suelo, robando astutamente el sonajero antes de que creará una melodía fuerte que despertaría a todos. "Jugaar" Lan Jingyi señala a Lan Sizhui con impaciencia, mirando a su papá.

Meng Yao se ríe, sacudiendo la cabeza, meciéndolo un poco para distraerlo. "Todavía no puedes jugar con él, es demasiado joven, pero si duerme y come bien, crecerá grande y fuerte como tú", besa su mejilla, el bebé se ríe, pateando el aire. "Jugaré contigo mientras tanto, ¿qué te parece?", asiente su hijo, satisfecho con la idea. Se sientan en la esquina cercana de la habitación, con cuidado de no hacer ruido.

Wei Ying estaba durmiendo, exhausto, con Meng Yao y Lan Jingyi en la habitación, su bebé a pocos centímetros de él en su cuna, Wei Ying estaba hundido en una siesta larga y sin sueños, descansando, todavía con el suero intravenoso conectado a su muñeca. Los médicos y enfermeras entraron en pánico por un momento ya que Wei Ying estaba mostrando signos de una posible convulsión y eso era lo último que querían durante el parto. Afortunadamente, fue una falsa alarma, sin embargo, de todos modos hubo complicaciones, el bebé nació vivo y muy saludable, pero Wei Ying casi muere, Lan Zhan estaba a un paso de hacerse una vasectomía si no fuera por Lan Xichen.

Sin embargo, la felicidad de Wei Ying en el momento de sostener a su bebé por primera vez no fue forzada, como muchos omegas tenían el triste destino de abrazar una maternidad forzada. Wei Ying comenzó a decirle palabras amorosas al niño en sus brazos tan pronto como pudo cargarlo por primera vez, llorando junto con él, Lan Zhan los miraba con un amor que no podía describirse, protegiéndolos como un lobo, si era sobreprotector antes, a la llegada de Lan Sizhui, Lan Zhan apenas dejaba que alguien aparte de su hermano y Meng Yao se acercaran a él, como debería ser, al menos hasta que terminara el primer mes.

Este fue el primer día en que Lan Zhan finalmente se fue de casa, para su renuencia, sin embargo, Lan Zhan sabía que podía dejar a su hijo y esposo en las manos capaces de su cuñado, una de las pocas personas en las que Wei Ying realmente confiaba y se sentía cómodo. "Oh, no, Wei Ying, no te muevas demasiado, tus heridas están muy sensibles todavía", los ojos de Wei Ying parpadean suavemente, su mano cicatrizada temblando. "Soy yo, es tu hermano Yao, estoy aquí contigo, A-Zhui está durmiendo en su cuna, está bien, está a salvo, lo prometo", dice Meng Yao, Wei Ying deja escapar un suave suspiro antes de volver a dormir, consciente de que su cachorro no corría ningún peligro.

Wen Qing mostraba con orgullo a Lan Sizhui a los Nie como si fuera su propio hijo. "¿No es hermoso mi sobrino? ¡Míralo! ¡Es igual de bonito que mi hermano ...!" Lan Sizhui era demasiado joven para parecerse a cualquiera de sus padres, sin embargo, tenía los ojos de Lan Zhan, no había duda al respecto.

Wen Qing lo habría convertido en su heredero si no fuera por Lan Zhan, quien no la dejaría hacer tal cosa, obviamente, Lan Sizhui era un Lan de pies a cabeza, su futuro llevaba su nombre, en algunas décadas Lan Jingyi y Lan Sizhui gobernarán el hogar y la familia Lan, bajo la estricta pero paciente enseñanza de sus respectivos padres.

"Un cachorro sano, comenzará a rugir en unos años" Nie Mingjue estaba encantado, mirando con aprobación al pequeño bebé mientras Lan Sizhui sostenía su dedo meñique, bastante grande en sus pequeñas manos.

Propiedad de Lan ZhanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora