Cap 38

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Tamaki metió la pata así que la mujer simplemente decide ser directa con el chico, sino funciona que la misma Tamaki lo transporte al orfanato más lejano, los dos tomaban el té e Izuku esperaba lo que sea que tenía que esperar.

—Te seré breve y sincera muchacho, somos criminales, por eso es muy delicado tenerte aquí con los demás que estarán pronto aquí, así que tienes que saber con quién te juntas—

—Pero los criminales no salvan gente—

—Es complicado— responde la mujer —realmente no somos criminales de ese tipo, sino más bien vigilante, usamos nuestros quirks sin licencia y nos encargamos de crímenes que los héroes no son conscientes o simplemente no quieren hacer. Hay mucha corrupción de parte del gobierno y la asociación de héroes, así que hay muchos lugares no protegidos y trabajos que no toman porque no dan reconocimiento o fama—

—Si quieres quedarte aquí será con condiciones, siempre tienes que aportar en algo y entrenar para ser un digno vigilante, aceptar el riesgo que eso conlleva, como Tamaki eres solo un niño, así que mejor te recomiendo ir al orfanato y no hablar nada esto, sin embargo te estoy dando la posibilidad por si quieres quedarte. Eres pequeño para una decisión tan grande, pero es lo que hay—

— ¿Si me quedo puedo salvar a personas como ella me salvó a mí? — Preguntó el chico con brillos en sus ojos.

—Sí, pero entiende que esto es más oscuro y cruel que la vida de héroe, verás cosas horribles y claro que no te dejaré hasta que esté capacitado, pero repito, ahí está el orfanato—

—Me quedo—

—Chico piensal…—

—Me quedo—

—Déjame termiana…—

—Me quedo—

— ¡Bien! Entiendo, te quedas, te quedas— (¿Qué le pasan a los niños últimamente?) —Entonces oficialmente eres un miembro y yo soy tu Sensei ¿Entendido? —

— ¡Sí! —

Al final la rubia es sensible con los niños, siempre quiere cuidar de ellos aunque se haga, como dice Tamaki “La malota” Izuku conoció al grupo y fue presentado como un miembro más, ahí conoció a un tonto peli rojo un poco mayor que él, una tímida chica peli azul que da diabetes dos años menor que él. La estoica y burlona Tamaki, y un hombre llamado Roger, hay más miembros, pero es raro que estén todos en un mismo día.

Izuku aprende rápido, alivio para su ahora maestra y líder de la organización, aparte todos los miembros empezaron a amarlo, tiene un gran carisma para vivir a una vida tan mala. Y ya en menos de uno año Izuku era introducido a las misiones que hacían ellos para salvar a personas y terminar con algunos mafiosos, lo que siempre hacen.

— ¡Uy! El chico nieve no lo hace nada mal—

—Ya ha pasado mucho tiempo y aún me dices así—

—Sobrenombre de cariño— decía mientras se sentaba al lado de él —parece ayer el día que te encontré tirado como un perro y mírate ahora, incluso la Sensei no puede despegarte de ti, Sabía que sus gustos por los niños iría más allá—

A Izuku le dio un escalofríos —no me desbloquee los recuerdos, Tamaki—

—Por cierto Izuku, sé mi novio—

— ¡Espera! ¿Qué? ¿Es otras de tus bromas? —

—Meh, no, me gustas, así que si quieres podemos ser novios—

Izuku empezó a reír —realmente esto es tan tú—

—No te rías de mi confesión de amor— dijo en broma fingiendo una voz lastimada.

—Pero ¿Y qué pasará con él? Sabes que les gustas mucho—

— ¿Te gusto sí o no? —

—Bueno… Sí—

— ¿Entonces? —

— ¿Sabes qué? ¡Olvídalo! — Exclamó el peli verde y besó a la chica, algo que ella correspondió, un extraño momento romántico, pero Tamaki es simplemente así de directa y despreocupada.

—Ok, ahora eres mío, tengo que advertirle a la Sensei que no intente nada raro— dijo en broma.

—Gracias por protegerme, celosa—

—Ser un poco toxica no hace daño— y con eso Tamaki le dio un beso que ambos decidieron que sea uno muy largo.

 

 

 

 
¿El voto o el plomo?

 

Se me olvidó de publicarlo ayer, así que lo hice hoy.
 

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