Cap. 10: "La siesta"

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Steve estaba totalmente nervioso, no sabía que iba a pasar, pero se hacía una idea de la cual no se sentía preparado.

Unas manos firmes y frías al tacto por los anillos, le levantaron la camiseta en la zona de la espalda baja, para moverse lentamente hacia adelante trazando lineas en su abdomen con los dedos. Una respiración agitada chocaba en su nuca y pronto sintió una presión en el trasero.

-E-Eddie no se si...- Realmente no estaba seguro, está bien toda la confianza y los besuqueos recientes pero eso era un paso mucho más adelante.

-Escuchame.- Sacó una mano del interior de la camiseta y le agarró suavemente la mandíbula, haciéndolo voltear hacia atrás para mirarlo a los ojos.- No voy a hacer nada que tu no quieras, ¿está bien?

Las palabras lo tranquilizaron bastante, él verdaderamente confiaba en Eddie, y sabía que el basta, es basta.

-Bien, entonces continúa.- Se lanzó a sus labios ferozmente empujándolo hacia el sillón.

-Hace calor, ¿no?, esto sobra.- Acto seguido despojó ambas camisetas de sus cuerpos, dejándolos con sus torsos desnudos rozandose apenas.

Eddie se sentó en el sillón y jaló a Steve para que se sentara encima suyo.
Iniciaron una guerra por el control de la situación, cuyo final fue un castaño ganador que atacó toda la boca, cuello y orejas del mayor.
El metalero solo se dedicaba a acariciarle y arañarle la espalda, pero cuando clavó las uñas en los hombros a causa de la excitación, un gemido verdadero fue soltado por los hermosos labios del menor.

Se avergonzó al instante y detuvo la acción, el de pelo rizado aprovechó y lo tiró al sillón, quedando recostado encima de él para devolver el favor.
De nuevo, besos por aquí y por allá, y a pesar de que se tomaban su tiempo para dejar algunas marcas, nada de eso era ni cerca a aburrido.

Steve siempre pensó que algo así sería demasiado aburrido y abrumador; era un imbecil que quería las cosas simples y rápidas. Ah y era hetero, eso es lo peor.
Ahora estaba volviéndose loco con un hombre besando cada parte de tu tórax, y al mismo tiempo el alma del castaño, quien se sentía conmovido eh excitado.

La situación aumentó de nivel, Eddie además de lo besos, necesariamente empezó a crear una fricción con ambos miembros cubiertos por la tela de sus boxers y shorts, quienes dentro de poco ya empezarían a molestar de verdad a ambos.

-Y-ya Eddie, los vecinos nos van a escuchar.- Aunque pareciera una excusa para parar, verdaderamente podrían molestar a los vecinos considerando el volumen de los gemidos por parte de ambos.

Como prometió, y sin tener que repetirlo, Eddie salió de encima de Steve, se enderezó una vez ya parado y le ofreció la mano al castaño para que lo acompañara.

-¿Nos vamos a dormir una siesta?.- Oficialmente la mejor propuesta que le habían echo hasta el día de hoy.

-Dios, claro que si-. Le tomó la mano y con su ayuda también se levantó, y sin soltarse, entraron en la habitación, encendieron un ventilador que allí se encontraba y se acurrucaron en la cama abrazados, aunque a diferencia de la otra noche, ahora era Eddie quien se sumergía en el pecho del otro.

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Buen día gente

Hoy tuve una excursión y estoy toda contracturada porque me dormí una hora hecha una bolita.

Aún no toca 18+, pero no falta mucho, así que por ahora disfruten esto.

Buenas noches, los amoooo

Besos💋💋💋

!Los amigos no se comen! [Steddie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora