Anastasia Steele

Capitulo 17. Carrusel

Estoy nerviosa, el Sr. Taylor marca un código para que un portón enorme se abra y avancemos por un largo sendero que termina frente a la casa más grande y bonita que he visto en mi vida.

Christian cruza el auto y abre mi puerta, me tiende su mano para ayudarme a bajar y tengo que jalar aire para poder salir.

- ¡Solo son mis padres Ana! - dice de forma tranquila y besa mis nudillos.

- ¡Estoy nerviosa! - eso es obvio, pero decirlo en voz alta me libera.

- No te alejes de mí - desvía su mirada al cruzarse con la mía, se que no pensó en sus palabras y eso lo molesta, por mi mente cruza la ilusión de que no se refiere solo a esta noche y busco descifrar su expresión cuando vamos rumbo a la puerta, pero tiene esa mirada inexpresiva que a veces me asusta, él ahora es un hombre completamente diferente al que hace unos minutos me hacía el amor en su auto.

Los padres de Christian nos reciben en la puerta cuando una joven mujer nos abre recogiendo mi abrigo. Sonríe y aletea sus pestañas con dirección a mi chico, quien la saluda con un cortéz movimiento de cabeza y ella suspira.

- ¡Hijo! - lo abraza su madre - ¡Tenía tantas ganas de verte! ¡Bienvenidos!

- ¡Madre! - dice de forma seca y guarda distancia a su fugaz abrazo - ¡Padre! - solo estrechan sus manos en un frío saludo.

- ¿Quién es esta hermosa señorita? ¡Ella es muy linda Christian! - me saluda con un beso en la mejilla y me da un efusivo abrazo.

- ¡Anastasia Steele! - hace una pausa - ¡Mi novia madre! - mi ya acelerado corazón se dispara de mil a millón al escuchar su presentación.

- ¡Bienvenida Anastasia! - dice su padre.

- ¡Pasen! ¡Pasen! - repite su madre emocionada.

- ¡Existes! - una mujer al parcer casi de mi edad baja las escaleras corriendo y me saluda con afecto.

- ¡Mía! - la reprende Christian.

- ¡Grey! - me abraza - ¡Esa soy yo! ¡Seremos mejores amigas! ¡Cuando mamá me lo dijo no podía creerlo! ¡Christian traerá una chica a casa!

- ¡Mía! - la regaña Christian nuevamente.

- ¡No la culpes bro! Todos pensábamos que traerias a un chico - ¡Y mirá! ¡Elliot Grey!

- ¡Aléjate de ella! - Christian impide me de un abrazo - ¡No!

- ¡Muchachos! - dice su padre.

- ¡Tranquila Ana! Ellos dos pelea todo el tiempo, pero se adoran - ¡Prometan que se comportan! - les dice su madre - ¡No molestes a tu hermano Elliot! - muerdo mi labio para ocultar una pequeña sonrisa, me causa ternura que ella use esa frase, y ese tono con dos hombres de su tamaño.

- ¡Ve esos labios! ¡Te equivocaste de Grey cariño! - Christian lo sujeta del saco y entro en pánico.

- ¡No te le acerques!

- ¡Soy el guapo de la familia y ella es linda!

- ¡Basta Elliot!

- ¡Ya! Los dos, pasemos a la mesa.

- ¡Yo me siento junto a Ana! - dice Elliot y Christian lo empuja, para después tomar mi mano y yo me abrazo a su costado, sujetó su brazo entero y apenas me pego a su espalda - todos nos miran sorprendidos y se hace un silencio incómodo, nadie dice nada por algunos segundos, pero todos nos miran atentos.

- ¡Ella! - dice Mía con asombro - ¿Ella puede?

- ¡Pasamos a la mesa! - dice su madre para interrumpirla, pero también parece sorprendida.