Traición y Peligro

Cinco

Sakura miraba por la ventana mientras el Mercedes se estacionaba, el sol hacía su aparición en el cielo iluminando la ciudad.

Bajaron del automóvil y tomaron sus bolsos antes de ingresar al gigantesco centro comercial que abarcaba por lo menos dos o tres manzanas enteras. Las puertas se abrieron y rápidamente estuvieron sumergidas en un océano de gente, se miraron y comenzaron a recorrer tiendas para encontrar lo que usarían.

Ino tenía ya tres bolsas, pero decía que no había nada que le gustara realmente como para lucir esa noche, hasta que vieron una boutique con letras en color dorado que les llamó la atención.

- ¡Vamos! -gritó la rubia medio corriendo hacia allí, Sakura rodó los ojos y la siguió, ignorando el dolor de sus pies.

Era una tienda fabulosa, gigante y que tenía la mayoría de marcas de diseñador, Ino se probaba un vestido rosa ceñido en la cintura pero con caída suelta. Sakura observó.

- Muy barbie -dijo haciendo referencia al color de pelo de su amiga y el vestido.

- Encontraré otro.

Mientras tanto ella buscó que ponerse, no quería algo brillante ni de color claro, como todos los vestidos de fiesta que acostumbraba a usar, en su armario predominaban el rosa, el verde manzana y el amarillo claro. Esta vez usaría algo distinto, algo que vaya con su corte de cabello.

Sasuke siempre decía que los vestidos de color claro la hacían ver inocente y hermosa... pero esta vez lo menos que quería era verse así.

Un mono de color azul brillante le llamó la atención, se dirigió a él y lo vio en el maniquí, se imaginó como le quedaría.

- Se te vería genial -se volvió hacia la voz donde se encontró con una chica de estatura baja y de pelo marrón- ¿Te gustaría probartelo?

- Hum, sí, por favor.

La chica tomó el maniquí y lo llevó a la parte trasera de la tienda, al pasar unos minutos volvió con el mono en una percha.

- Anda, el probador esta de aquel lado.

Sakura le agradeció y fue hasta los probadores, cerró la cortina y su reflejo le devolvió la mirada. Se sacó la ropa hasta quedar en su conjunto de algodón rosa y observó su cuerpo, tal vez debía cambiar también la ropa interior por una más... atrevida.

Sus piernas eran largas y torneadas, de un color pálido, sus caderas anchas y el trasero bien formado, su cintura pequeña y abdomen plano, y finalmente unos pechos pequeños. Como dos naranjas.

- Con razón Sasuke prefiere a Hinata -suspiró viéndolos y pensando en los gigantescos pechos de ella- Hum, por lo menos tengo un buen trasero.

Y se puso el atuendo. Se veía diferente, su piel pálida destacaba sobre aquel color oscuro, cubría todas sus piernas y abdomen, era largo y suelto hasta el suelo; ajustado desde la cintura y era de mangas largas, un profundo escote era lo que mostraba su pálida piel ante el azul y el brillo del atuendo, resaltando también sus pechos pequeños y su abdomen plano. Tan... atrevido.

- Sakura, ¿Encontraste algo? -la voz de Ino la sacó de sus cavilaciones. Abrió la cortina y se topó con los ojos curiosos de su amiga que se abrieron con sorpresa- ¡Te ves hermosa! -chilló- ¡No te he visto usando algo así! Maldición, esto de verdad lo va a volver loco.

- Gracias, Ino -ella le sonrió algo apenada- ¿Y tu ya tienes que ponerte?

- Fue difícil -admitió la rubia, su amiga rodó los ojos- Pero encontré esto.

Y le mostró un vestido corto de color vino con volados en la cintura. Simple y sofisticado.

- Es hermoso -ella le sonrió.