Capítulo 11: Flores Parte 2.

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Evelyn

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Evelyn.

Avancé hasta llegar frente al espejo, alce la mirada viendo mi reflejo y no pude evitar pensar ¿qué era lo que estaba viendo? Solo veía a una mujer recién salida de la ducha, con su pijama lista para ir a dormir, nada especial en realidad, pero antes también veía a una mujer que todos querían ser, a una mujer que en algún momento fue...

La esposa perfecta según los medios de comunicación y revistas.

Evelyn Kingston.

Evelyn Ackerman de Kingston.

Evelyn Ackerman Edevane.

Evelyna Andrea Ackerman Edevane.

Pero ahora frente al espejo no veo nada de eso. Es tan extraño como todo a mi alrededor, aunque para los demás han pasado meses, para mí solo fue un abrir y cerrar de ojos, aun así, lo que veo sigue sin convencerme, ¿Quién soy ahora? ¿Qué haré ahora? Nadie está para decírmelo, y eso es tan liberadoramente confuso.

Sobreviví al accidente. Y no tengo nada.

Sobreviví luego de tantos años y no tengo nada. Aunque no creo que todo haya acabado realmente. Algo dentro de mí cree que todo lo que viví en todos esos años aún no se acababa, y no lo haría en un largo tiempo más. Seguía teniendo su sangre, seguía teniendo poder sobre mí y la capacidad de hacerme tan pequeña e indefensa con solo mirarme.

Todo el mundo que conocía no existe. Y no sé qué hacer.

Sigo mirando mi reflejo intentando encontrar respuestas.

¿Quién soy?

¿Quién se supone que debo ser?

Ya no soy la Evelyn Ackerman que en momentos creí ser. Por qué ahora soy solo pedazos rotos de lo que era, sin esperanza de volver a estar intacta. ¿Cuándo desaparecerá este sentimiento tan agobiante? Supongo que lo hará cuando encuentre todas las respuestas a mis preguntas.

Pero solo puedo pensar en lo cansada que estoy.

Dan pequeños golpecitos a la puerta, deteniendo mis pensamientos, haciendo que mis ojos se dirijan hacia allá.

—¿Estás bien? —Se asomó por la puerta.

—Lo estoy. Tranquilo. —Lo calmé, desde que desperté, Mark ha estado más alerta y pregunta frecuentemente como estoy.

—Es que no había ningún ruido y me preocupé.

—Estoy bien, así que ve a prepararte para dormir. —Me giro en dirección a la cama, — Aunque suene un poco raro, estoy cansada.

Mark sacudió la cabeza con diversión adentrándose al baño. Por mi parte separé las sábanas de la cama, y me metí en posición fetal. Esperé allí unos minutos hasta que Mark volviera para acostarse a mi lado.

—Coloqué las flores en un jarrón con agua. —Se acomodó mirándome.

—Gracias. —Curvo mis labios intentando dar una sonrisa.

—¿Sabes lo que significan las Buganvilias? —preguntó, con entusiasmo.

Desde que desperté Mark también ha intentado mantenerme con ánimos. Nota mi tristeza y confusión.

—No, ¿Que significan? —Pregunto, intentando que todos esos pensamientos se vayan y me dejen dormir.

—Bienvenida.

(🌹)

Cuando desperté esta mañana Mark no quiso soltarme, sus fuertes brazos me mantuvieron cautiva por varios minutos, hasta que resignado me soltó. Definitivamente ha estado más sobreprotector con todo. En sus ojos puedo notar muy escondido en el fondo, un profundo miedo.

No ha hablado nada de lo que ha pasado. No ha querido que vaya a la empresa, hasta que me recuperé al cien por ciento, aunque yo diga que ya estoy bien.

Su mirada fija en la carretera, sus manos tensas sobre el volante. Algo le pasa, pero sé que no me lo contará. Es lo que hace.

Al estacionarse frente al cementerio, bajó corriendo del auto para abrir mi lado de la puerta. Sonreí como agradecimiento, pero aquella sonrisa se fue al volver a la realidad de donde estaba.

Todas las personas que quiero, excepto Mark, están aquí. Cubiertas por metros de tierra. Odiaba los cementerios por todo lo que representan, pero al final y al cabo, de igual manera vengo y terminaré aquí algún día.

Mark compró flores mientras yo lo esperaba en la entrada, una parte de mí no quería entrar, luego de llegar con ramos de flores me acompañó en la caminata hasta llegar a la primera lápida. La miré fijamente mientras Mark colocaba el ramo de hortensias azules, mientras que mi pecho se cerraba y me inundaban las ganas de llorar.

Aquí yace Maximilian Kingston.

Padre, Hijo, Esposo y Amigo.

1966 - 2021.

Después de tanto tiempo vuelvo a este lugar, y sinceramente lo odio. Mi pecho duele, mi cuerpo se mantiene estático mientras que el dolor avanza y un pensamiento viene a mi mente, no logre tener mi duelo como correspondía, mi mente en esos días era un caos, aunque ahora no es muy diferente.

Mi garganta presiona por el nudo en mi garganta, no pude decir tantas cosas, no pude despedirme, no pude.

—¿Por qué? —Pregunté intentando sacar lo que tenía dentro mientras que sabía que no me respondería, pero debía decirlo.

—De todas las personas en el planeta, ¿Porque yo?

—Sabías muy bien lo que podría pasar y aun así lo hiciste. —Hable con molestia.

—Laura me comerá viva, no sé qué haré ahora. — Mire molesta la tumba, pero no sacaba nada con molestarme ahora, aunque lo hacía y de alguna manera lo necesitaba, para descargarme, aunque fuera solo un poco. — No puedo hacerme cargo de la empresa yo sola. Matthew se fue, acabo de despertar de un coma de meses y esperas que yo lidere tu imperio.

Me hierve la sangre por lo enojada que estoy, pero esto no dura demasiado, mi cuerpo cae ante la tristeza, lagrimas con molestia y tristeza corren por mis mejillas.

—¿Por qué yo? —Repetí con voz quebrada. — yo...no soy capaz de hacerlo, yo...Desearía que estuvieras aquí para que me dijeras que hacer. — Sentí como todo mi cuerpo comenzaba a derrumbarse, Mark quien estaba unos metros atrás para darme espacio, se acercó rápidamente sujetándome.

—Evelyn, Evelyn, ¿Estás bien? —Pregunto tomando mi rostro en su mano.

—Estoy bien. Es solo que es demasiado y no sé qué hacer. —Lo mire con tristeza — Estoy perdida, Mark.

—Ok, ok. Está bien, sentirse así de vez en cuando. —Note su desesperación al no saber qué decir.

—Estoy cansada. 


🌹🌹🌹🌹

Holaaa, Lamento la tardanza, tuve un pequeño bloqueo, pero por fin pude terminar el capítulo.

Espero que disfruten este capítulo, nos vemos en el próximo.  

Recuerda comentar y dar estrellita. Me gustaría saber que opinan. 

Kora. <3

Esposo PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora