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¿Irás a la cena de Max hoy? -el monegasco frente a mi asiente mientras se levanta tomando sus cosas-

Así es, iré con Charlotte pero ahora debo irme -murmuró en la puerta del avión- llegaré tarde

¿A dónde vas? -sus cejas se levantan con una sonrisa ladeada viéndome, no quiere decirlo-

Gemma me espera para probar pasteles -asiento en silencio levantando mi mano a forma de despedida cuando el baja del avión sin decir nada más-

(...)

Gemma Leclerc -el grito de la rubia me hace reír mientras ella pone sus manos en su pecho-

Mierda -mis cejas se elevan divertido cuando me mira- ¿no te parecía mejor saludar en lugar de darme un infarto?

Mi error -asentí sonriendo mientras me apoyaba en su ventana- ¿qué haces aquí?

Traje a Charles y a Charlotte -asiente dejando su celular de un lado-

¿Y a dónde irás ahora? -sus cejas se levantan con curiosidad mientras formo mi mejor sonrisa-

Debo llevar unas cajas de champaña al restaurante para un evento -asiento cuando señala la parte de atrás de su camioneta- después iba a cenar con Arthur pero Carla esta enferma así que comprare sushi y iré a casa

Voy contigo -murmure dando vuelta para subir al asiento del copiloto-

¿Qué haces? -sus ojos azules me ven confundida cuando me acomodo colocándome el cinturón-

Te acompaño al restaurante y después cenamos juntos -una sonrisa se forma en sus labios antes de asentir empezando a conducir-

Pero como sea cenaremos sushi -señala antes de fijar su vista en el camino-

Quería preguntar -mi voz sale en un susurro cuando nos detenemos en un semáforo en rojo y ella se gira para verme- ¿estamos bien?

¿Por qué no lo estaríamos? -su sonrisa genuina me hace removerme en mi lugar, una parte de mi quería que tal vez sintiera celos de Heidi-

Pensé que algo de la fiesta te habría incomodado -niega varias veces cuando vuelve a empezar a conducir haciendo que suspire- me alegra saberlo, hoy estaban en pruebas para el pastel ¿no es así?

Charles es un chismoso -ríe estacionando la camioneta- pero así es, mi madre nos ha hecho probar muchísimos sabores y yo digo que a nadie le interesará, ya estarán ebrios como sea

Tienes un buen punto, Leclerc -asentí bajando del auto para ayudarla con las cajas- pero te casas con una familia que tiene restaurantes, creo que si es importante el sabor

Más vale que comas ese pastel entonces, Ricciardo -rio abriendo el baúl- ¿Heidi será tu acompañante?

¿Cómo? -mi asombro es evidente y sé que lo nota cuando pone sus manos sobre las mías para que la caja que cargo no caiga al piso- somos amigos Gem

Lo siento, tenía que preguntar -se encoge rápidamente de hombros mientras una pequeña sonrisa de alivio está en su rostro- debo ir adentro unos segundos, no tardaré 

Seguro -asiento cerrando el maletero mientras la rubia corre en dirección a las escaleras del restaurante, suspiro viendo las luces y la decoración en la entrada, a veces envidiaba lo bien que Gemma parecía adaptarse a una vida sin mí- ¿puedo preguntar de qué es el evento?

Una sonrisa crece en su rostro mientras baja las escaleras con cuidado y sostiene en sus manos varios sobres.

Será una propuesta de matrimonio -asiente llegando junto a mí para extender las llaves de su camioneta- ya sabes que odio conducir de noche

O te gusta sobreexplotarme -bromeé haciendo que sonriera, tal vez esa era una de las cosas que más me gustaba tener en común con ella, sonreír por todo-

(...)

No sabía que conservabas el departamento -la rubia asiente acomodándose en el sillón frente a mí mientras toma un trozo de sushi- esto sin duda es un dejavú

La primera noche que realmente nos conocimos -asiente refiriéndose a la noche en la que estuvimos en esta misma terraza- no estaba lista para dejar ir mi departamento así que lo conservare

¿Hasta cuándo? -sonríe encogiéndose de hombros cuando me escucha-

¿Para siempre? -rio cuando ella deja caer su cabeza hacia atrás, no sabe lo que hace- si tuve celos de Heidi

Mis cejas se levantan con sorpresa cuando la rubia susurra aquello sin mover su cabeza, impidiendo que mi mirada se crucé con la suya.

Me agradaría volver a escuchar eso mientras me miras a los ojos -una suave risa sale de sus labios cuando por fin me mira-

No te pases, Ricciardo -sonrío cambiando de silla para sentarme junto a ella- ¿qué intentas?

Ya que estamos siendo tan honestos, la respuesta es no besarte -susurró haciendo que un suspiro salga de sus labios mientras baja su mirada- pero como se que es imposible, diré que ver el mar

Es espectacular, ¿no es cierto? una infinidad de posibilidades -asiento escuchándola, frunciendo mi ceño cuando su celular suena- es una alarma para el álbum de Taylor y ya que estas aquí, serás obligado a escucharlo conmigo

No estoy seguro de que mi cantante favorita sea Taylor -negué rápidamente, pero antes de que pudiera terminar en los parlantes de la casa empieza a sonar la primera canción-

Dime un número para la siguiente -sonrío cuando sus ojos azules me miran curiosos esperando mi respuesta-

Siete -asiente rápidamente buscando en su celular mientras yo vuelvo mi mirada al mar-

Questions -susurra cuando la canción empieza a sonar, hago mi mayor esfuerzo por no girarme a verla cuando el coro suena por primera vez, cuando por fin lo hago noto que tiene sus ojos llenos de lágrimas- creo que desde que volvimos a vernos nuestras noches solos funcionan así, ¿no es cierto? haciéndonos las preguntas que no hicimos cuando era el momento

Si quieres que te responda una -murmure limpiando la lágrima que caía por su mejilla- sí me gustaría dar más pelea

No necesito que lo hagas -su susurro es acompañado por un abrazo que me toma por sorpresa, suspiro acariciando su espalda mientras ambos nos recostamos en el sillón con el álbum sonando de fondo- a mí me gusta más pensar en que fuimos amor, no preguntas sin resolver

Somos amor -corregí abrazándola con más fuerza, guardando ese instante en mi cabeza, aterrado de que en menos de dos meses Gemma iba a caminar a un altar vestida de blanco-





Insomnio. - Daniel RicciardoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora