𝑷𝒓𝒐𝒇𝒆𝒔𝒐𝒓 𝑻𝒂𝒘𝒂𝒏 [𝑇𝑎𝑦/𝑁𝑒𝑤]

ᴄᴏᴍɪᴅᴀ

New miraba con superioridad
al mayor delante suyo, había logrado
su cometido y estaba sumamente
contento.

- Ven.- llamó Tay extendiendo su
mano en su dirección.

El castaño ladeó la cabeza y obedeció.
Tomó la gran mano de su profesor y
este lo jaló hacia su regazo.

New entre abrió los labios al
sentir la boca de Tay en su cuello.

- Bien... ahora dime, ¿qué cosa querías
lograr diciendo que irías con otro
imbécil a mostrarle tu ropa interior?-
murmuró en su oido, mandando
corrientes electricas a su cuerpo.

- No me hacías caso... y necesitaba
sentirte, Tay.- farfulló.

- ¿Sentirme? Tu me alejaste en primer
lugar, New. No vengas a decirme luego
que me necesitabas.

- ¡Estaba nervioso por lo que hicimos!
No dejabas de mirarme y-y me sentí
raro...

Tay alzó una ceja y sonrió aún
escondido en el cuello color canela.

- Umh bebé...- suspiró mordiendo
suavemente la piel.- ¿por qué no me dijiste que te incomodaban mis
miradas? Estamos en total confianza,
por favor a partir de ahora no te
escondas nada conmigo, yo vere la
forma en que puedo ayudarte, ¿si?

- Suenas como un novio...- sonrió con
timidez.

Tay rió ligeramente antes de
abrazar el pequeño cuerpo delante
suyo. New correspondió.

- Eres tan bonito...- suspiró apretando
más el abrazo.

Las mejillas del menor se tiñeron de unsuave rosa.

- ¿Ya estamos bien ahora, Tae?-
preguntó New enderezándose
y viendo aquellos ojos profundos y
hermosos.

- Claro.- ambos sonrieron y chocaron
sus labios en un beso lento y lleno de
sentimientos guardados.

Las grandes manos de Tay
viajaron hasta la cadera del menor,
dando suaves caricias y apretando de
vez en cuando, mientras que New
acariciaba el cuero cabelludo del
mayor.

Se separaron por falta de aire, mirando
por segundos eternos a los ojos.

- Tienes que ir a casa antes de que
el director nos atrape aquí.- musitó Tay.

- Tienes razón... ¿por qué no me
acompañas y comemos en mi casa?-
propuso con una grande sonrisa.

- ¿Y tu mamá?

- Dile que vas a darme tutorías.

- Uhm esta bien.

- Luego podemos ir a mi habitación
a hablar un rato, o tal vez... podría
mostrarte mi lencería.- Tay le
dedicó una sonrisa ladeada.

- Bien, entonces andando.

New mordió con lentitud su
labio inferior, bajándose del regazo de
Tay y caminando hacia la puerta.

- Adelantate y esperame en el
estacionamiento.

El castaño asintió y salió del salón
moviendo sus caderas con elegancia.

Tay por mientras guardó sus
cosas con rapidez y se apresuró a
seguir los pasos del menor.

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- Hola mamá.- saludó New
entrando a la casa con Tay detrás.

- Hola Tae.

- Buenas tardes señora Kim.- dijo el
pelinegro.

- ¡Profesor Tawan! ¿Cómo está? ¿Que lo trae aquí? ¡Disculpe el desorden!

- Estoy muy bien gracias, New dijo
que si podía darle unas tutorías, y no se preocupe por eso.

- ¡Oh! Está bien, deberían comer
y comenzar. Hice una milanesa
acompañada de un tazón de ramen.

- Se escucha delicioso.- dijo Tay
con una sonrisa.

- ¡Pasen a la mesa!

La señora Kim desapareció por el
umbral de la puerta con los otros dos
siguiendo sus pasos.

New se sentía emocionado porque
su plan había salido a la perfección.

Incluso mejor de lo que esperaba.

No podía aguantar más para tenerlo a
solas.

CHRIST ✨

-bye-bye-

\(^w^)/