I want to be your boyfriend ⦊ Slendytubbies 3: Whiles₉

O2

He intentado comenzar a dormir más pero no importa lo que haga, es inútil. Siete de la mañana con treinta minutos, no es la gran cosa, pero no he podido dormir más de veinte minutos desde que esta pesadilla en vida comenzó, el jodido apocalipsis. Estoy en la misma sala de juntas tres veces a la mañana y las tres veces a la semana no deseo más que regresar a la comodidad de mi cama.

"Café, necesito café." Bien pensado, cerebro.

Tal vez duré demasiado en tomar una desición clara, levantarme de la silla ahora y formarme en la fila de la cafetera o esperar a que la fila fuera mas corta, todo es tan monótono. He de asmitir que no tengo la mejor noción del tiempo... hey, ahora todos me estan mirando a mi.

Lentamente me di la vuelta, la puerta de entrada había sido abierta de golpe y... uhg, nauseas, hice la mayor expresión de asco y molestia que mi rostro permitió.

─── ¡Buenos días, señor! ── Saludó uno de los soldados, el tono alto y firme siendo seguido por los demas soldados presentes, haciendo uno de esos saludos militares que yo definitivamente no pensaba hacer, no para él.

Así que para sorpresa de nadie Miles paso de ellos, apenas devolviendo el saludó con un movimiento de cabeza, entrando a la sala directo al escritorio central, muy metido en su propia mente o demasiado concentrado para interesarse por sus compañeros. Todos los otros siguieron con sus actividades anteriores, como si nada.

No se porque me sentía tan ofendido yo.

─── Disimula más. ─Una voz femenina, dulce y suave resonó en mi oído, mi pelaje esponjandose en respuesta.

Di un diminuto salto del susto y la miré, una militar rosa con la que ya había interactuado antes un par de veces, la mano derecha del Sargento, Anne era conocida por ser la contraparte casi directa de Miles al en cuestión de tratos y esa tan característica personalidad, ambos hacen un trabajo estupendo.

Ella me pone nervioso.

─── ¿Disculpa? ─Salió de mi boca antes de poder siquiera pensar, hace mucho no escucho mi propia voz, wow.

─── Miles se molestara si lo miras tanto, y mas de esa manera, pareces un poco tenso, ¿huh? ─Me soltó un suave golpe en el hombro, una sonrisa que parecia un rayo de luz en esta gris y apestosa sala.─ Así que, ¿W., no?

No me gusta que usen mi nombre.

─── No, asi es. Anne, ¿no es así? ─Ella asintió, yo apenas pude carraspear antes de que mi traicionera lengua siguiera hablando sin mi propio permiso.─ No es eso, solo me molesta como trata a los demás... No importa, es cosa mía.

─── ¿Hablas de Miles? ─Asentí, Anne solamente dejo salir una corta risita, negando con la cabeza.─ Ah, si, pero siempre ha sido así, no le tomes tanta importancia porque solamente te molestaras por nada, ignoralo.

¿Entonces todos lo ignoran? Tiene sentido, aunque yo estuviera un poco más cuerdo dudo que pudiera aguantar un día a su lado.

─── ¿Todos lo ignoran, entonces? Tener un equipo y no aprovecharlo. ─Una vez más hable sin querer hacerlo, esta vez y por suerte fue un murmuro ronco, dándome la vuelta hacia la maquina de café.

Una carcajada, Anne me dio una palmada en el hombro. ─── Pff, algunos lo hacen, si, otros nos acostumbramos, tu ignoralo, no parece agradarte. ─Ella lo dijo como si no hubiera varios soldados a lado mío, dandose la vuelta no sin antes darme otra palmada, esta vez en el pecho.─ ¡Cuidado con las miradas, W.!

Y se fue, la primera persona con la que intercambio más de tres oraciones seguidas en los últimos cuatro meses.

Logré escuchar las risas suaves de los soldados cercanos a mi en los pocos segundos que mi cerebro guardó silencio, y no pude evitar arrugar la nariz con distinguido desagrado. "¿De verdad lo miro tanto?" Me pregunté a mi mismo.

Nah.