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Después de algunos días de nuestro encuentro en aquel estudio, mikey y yo nos hemos hecho más ¿Cercanos? Mikey siempre quiere estar durmiendo y lo peor es que pegado a mi, desde aquella vez que olfateo mi cuello no a dejado de hacerlo y siempre que puede restriega su mejilla con la mía o su nariz en mi cuello hasta quedarse dormido

También ya he salido de la mansión, acompaño de vez en cuando a Mitsuya a hacer pequeños trabajos del clan o solo para hacer las compras necesarias, también hace poco mikey me obsequio un teléfono nuevo para estar en contacto cuando el no se encuentre en la mansión pero lo aprovecho para hablar todos los días con chifuyu. Con ayuda de chifuyu (que ya puede visitarme en la mansión) he remodelado mi habitación para poder sentirme más cómodo , mikey no puso oposición alguna cuando se lo pedí y me permito gastar lo que quisiera e incluso me hizo comprar más ropa.

Ha empezado a ser atento conmigo y eso es extraño pues el mikey que conocí al principio era totalmente diferente y se muy bien cuál es la razón por la cuál todos le respetan y temen, la frialdad y agresividad que emana con cada paso o cuando su lobo toda el control total dicen (los que viven para contarlo) que es el mismísimo diablo en persona, mata a todo lo que se mueva su mirada es incluso tan oscura que no puedes mirarlo a la cara, pero conmigo es todo lo contrario, parece un niño pequeño necesitado de amor.

«Es incluso hasta lindo» sacudo la cabeza ante tal pensamiento ¿Lindo? ¿El? Si claro ¿Porque tiene que interesarme tanto su actitud conmigo?

Trato de sacar todos esos absurdos pensamiento de mi cabeza y meco centro en lo que estoy haciendo: dorayakis

Unos de mis pasatiempos últimamente es la cocina y aunque tengo poca experiencia (nula) me divierto haciéndolo

Quise seguir practicando y se me ocurrió preparar dorayakis ¿Porque no? Nunca los he preparado y son deliciosos, no crean que los preparo porque estos sea (casualmente) uno de los dulces favoritos de mikey, claro que no....

Los hago porque son muy famosos en Japón y ¿A quien no le gustan los dorayakis? « Esto no tiene ningún otro propósito» asiento ante mis pensamientos convenciendome de ello

Doy un respingo cuando la puerta de la cocina se abre y se escuchan risas, son los hermanos Haitani

—Buenos días Takemichi— me saluda Rin junto con una pequeña inclinación

—Buenos días Rin-san, Ran-san — los saludo con una sonrisa últimamente ellos han estado mucho tiempo en la mansión por lo cual hemos convivido mucho

—huele muy bien— dice Ran acercándose con su típica sonrisa juguetona

— pues espero que sepan tan bien como huelen— respondo un tanto nervioso

—que tierno, nuestro pequeño Takemichi nos ha preparado dorayakis — dice Ran revisando el horno

—No son para ti idiota— le reprende Rin con un golpe en la cabeza

Está apunto de responderle pero el pitido del horno suena indicando que están listos, corro emocionado por los guantes para poder sacar las charolas repletas de dorayakis y las coloco con cuidado en la barra para que se enfríen un poco

—huele delicioso — doy un brinquinto en mi lugar cuando la voz y aroma de baji se hacen presentes en la cocina.

—pues claro ¿No vez que nuestro Takemichi es el que está horneando? Todo lo que hace es delicioso ¿Cierto?— me pregunta Ran abrazándome por la cintura y Rin se posa a su lado recargando su barbilla en mi cabeza con una sonrisa

Mi Omega por alguna razón rechaza el contacto físico con Ran por ello me siento algo incómodo cada que me abraza o toca y siempre trato de guardar distancias con el

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