XVI (FINAL PARTE I)

187 34 5
                                    

Todo estaba claro.

Desde un inicio cada paso estaba planeado y había caído como un idiota.

De entre tantas posibilidades, ¿era cierto que debían repetir el patrón antiguo?

── Te sorprende, ¿cierto? ──la suave voz del joven apareció desde una de las esquinas, sitio donde la luz no llegaba a iluminar── El que todo esto no era más que un plan perfectamente escrito y que tú, quien osaba sentirse superior no fue más que una pieza en un juego manipulado por mí. ──soltó una risa nerviosa, provocando una sensación nueva en el cuerpo del hombre que permanecía atado a una silla con un par de cadenas, símbolo de lo que representaba su unión── Sí alguien me lo hubiera dicho en el pasado, me habría reído en su cara, pero miranos, aquí estamos, amor.

── No te entiendo, ¿de qué estas hablando? ──la confusión era todo lo que invadía su cuerpo, pues ni la forma tan dolorosa en la que se encontraba prisionero, ni la media oscuridad lograban provocar alguna emoción en él.

── Bueno, resultaste más estúpido de lo que creía, pero descuida, te lo contaré lentamente para que puedas comprender poco a poco. ──Estiró su cuerpo, descansando sus extremidades para relajarse──. Yo te amaba, demasiado. Era esa clase de amor que te quemaba por dentro. Ese que invadía cada célula de tu ser y te llenaba de una calidez incomparable. Soporté tanto. Y era capaz de perdonarte cualquier cosa, todo lo que me hiciste. Cada golpe, insulto y abuso que sufrí de tu parte. Absolutamente todo, sí tan solo me lo hubieras pedido. ──sonrió, recordando cada escena y reviviendola por escasos segundos──. Incluso estaba dispuesto a perdonarte por lo sucedido con JJ, ¿te das cuenta de cuánto te amaba? Fui un idiota, en eso tenías razón. Pero todo ese amor que sentía por ti se convirtió en asco; en rabia y en un odio tan profundo que lo único que deseaba era hacerte daño.

── Build, yo... ──el sonido que provocó el impacto del golpe que arremetio contra él evitó que siguiera hablando.

── Cállate, no tienes derecho a hablar. ──le apuntó con un dedo, retomando su postura en el asiento── Como decía; el saber tu engaño me hizo mucho más daño del que sufrí durante esos meses que me hiciste vivir un infierno. Es por eso que te odié y comencé a planear como lastimarte. Cuando te enfrenté esa noche ya lo había predispuesto todo, llamé a Tong y la policía. Me encargué de todo lo necesario para que cuando llegaran vieran el triste desenlace de un pobre hombre muerto a manos de su psicópata pareja. Lamentablemente no fuiste capaz de matarme. Hasta para eso eres inútil. ──se quejó con fastidio── Así que, mi primer intento falló, más no me di por vencido. No iba a permitir que siguieras tu vida como sí nada después de haber destruido la mía. ¿Dejarte ser feliz con el estúpido de tu amante? Ni loco, así que cuando tú caritativamente me brindaste una segunda oportunidad no perdí el tiempo y así es como terminamos aquí, precisamente. Me costó bastante, pues mis recuerdos eran una confusión enorme pero fui yo quien le permitió a Blue existir. Necesitaba un respiro, y de alguna forma sabía que los chicos no se detendrían para intentar protegerme. Para mi buena suerte, así fue. Ellos se encargaron de hacerme pasar por muerto y de forma inconsciente completaron mi maravilloso plan. Pasaste, ¿cuatro, quizás cinco años? Encerrado en un agujero lejos del maldito de Us. Perdiste tu reputación, cualquier rastro de dignidad la acabaste el día que llegaste suplicando por un amor que tú mismo destruiste. Que curioso, fuiste víctima de ese inmenso y enfermizo amor. Dime, Bible, ¿qué sentiste en el momento que asesinaste a tu mejor amigo? Supongo que debió ser liberador, ¿no? Al menos para mí lo fue. Eliminaste a uno de los tormentos más grandes en mi vida. Oh, y ni hablar del día en que murió Nittitorn. Glorioso, simplemente. Es una lástima que ninguno de ellos dos pudieran ser testigos de esto, sin embargo, estoy conforme con que seas el único espectador, después de todo; es únicamente por y para ti.

𝐓𝐈𝐌𝐄 𝐈𝐒 𝐑𝐔𝐍𝐍𝐈𝐍𝐆 𝐎𝐔𝐓 ; ; 𝐖𝐃𝐘𝐒 𝐏𝐀𝐑𝐓 𝐈 𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora