Venganza y sufrimiento {Cinco Y Tn}

Cap.29: Oportunidad de amar

Llevaba un buen rato tomando mientras Klaus solo me observaba con pesar.

— ¿Que? Doy lastima ¿verdad? —reí tomando un trago—

— Dave, creo que debes parar, te haces daño

— ¿Daño? daño fue el que me hizo la vida cuando vi a tu hermano... —tomé otro trago— Abrazando a mi amiga, ¡Mi primer amor! 

— Dave... necesitas descansar, deja de tomar y vamos a tu casa

— No, yo quiero estar aquí. Así no pienso en la envidia que le tengo a tu hermano

— ¿De qué hablas? ¿Envidia?

— Si, envidia —sonreí mirando mi vaso— Envidia porque él puede besar esos lindos labios que tanto deseaba besar yo, envidia porque todos sabrán que él es quien le robo el corazón, y envidia porque... él tiene ese lugar que tanto queria ocupar

— Sabes que hay muchas personas dispuestas amarte ¿verdad?

— Es que yo no quiero otra chica, la quiero a ella...

Trate de tomar nuevamente, pero Klaus me detuvo, bufe intentando alejarme de su agarre lo cual no logre.

— ¿Porque no me sueltas? —trate de zafarme fallando otra vez— ¡Suéltame! ¡No existe nadie para mí en el mundo! —rompí en llanto—

Klaus me observo en silenció hasta que tomo mi barbilla haciendo que lo mirara.

— Estoy yo ¿sí? Tan solo dame la oportunidad de conquistarte, si al final no resulta... me alejare, pero dame la oportunidad de sanar tu corazón, dame la oportunidad de amarte... por favor

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Narra _____

Fui hasta la habitación encontrándome con Cinco quien miraba fijamente unos documentos, el no noto mi presencia hasta que me acerque a él.

— ¿Todo bien? —pregunto sin despegar la vista de los papeles—

— Si... yo... le dije de nosotros

— Ya veo... ¿cómo se lo tomo?

— Pues... dijo que se alegra por mi... ¿qué haces?

— Estoy viendo unos papeles acerca de aquel tipo de la última vez, el del edificio. Pero no encuentro nada que nos sirva —bufo—

— Has tenido un día complicado, deja eso un rato

— En un momento más... tengo que encontrar algo

Suspire y gire la silla para poder sentarme en la mesa cerca de Cinco.

— Eres muy necio, no quiero que te agotes de mas

— Prometí encontrar la verdad, mientras más pronto la encuentre más pronto podrás descansar y dejar esta etapa tan dura de tu vida

— Lo sé, pero trata de relajarte un poco ¿sí?

— Esta bien, ¿qué quieres hacer? ¿cenamos fuera?

— Ya comí —dije mientras lo esquivaba—

— En la mañana, pero ahora ¿qué comiste?

— Una manzana... antes mi madre eso me daba después del desayuno

— Eso no me parece bien, ya pasaron varias horas desde eso

— No tengo hambre

Cinco se levantó de su asiento y me acorralo mientras yo seguía encima del escritorio.

— Amas mucho cuando digo cosas románticas ¿no?

— Si, aunque casi no las digas

— Bueno, ¿quisieras escucharlas por mucho tiempo?

— Si, por supuesto

— Bien, entonces vallamos a comer, aunque sea solo un poco ¿sí?

Estaba lista para oponerme, pero sus palabras románticas y mis besitos estaban en juego.

— Bien... 

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Fuimos a un pequeño restaurante y pedimos nuestra comida, mientras esperábamos sentí la mano de Cinco encima de la mía lo que me hizo mirarlo con una sonrisa.

A lo minutos llego nuestro pedido, mire mi plato pensativa, demonios... era mucho más grande de lo que pensaba.

— Come, aunque sea un poco ¿sí? —tomo la cuchara y la acerco a mi boca—

— No soy una niña chiquita

— Dile eso a tu estatura —insistió terminado que yo accediera—

Después de unas horas acabamos todo, Cinco me hizo comer todo y nunca antes me sentí así de satisfecha de comer algo.

Cinco tomo mi mano y salimos del lugar, pero mi sonrisa fue borrada cuando lo vi a el...

— Carlos...