El Destructor o Salvador del Falso Mundo

La Misión de Naruto

Konan estaba atónita, Naruto la había atacado, miró el rostro impasible que mantenía el rubio, ni siquiera parecía reconocerla.

Suigetsu hizo sellos de mano a gran rapidez y expulsó una gran bola de agua, cambio el sello de mano y la enorme bola de agua se separó en una gran cantidad de pequeñas esferas de agua, que iban a gran velocidad.

Naruto las esquivó sin problema, sin embargo justo detrás del rubio se formó nuevamente la enorme esfera de agua, el Suigetsu que estaba delante de Naruto se volvió completamente agua. El nieto de Madara se dio cuenta de lo que pasaba, se giró y detuvo con su kunai el ataque con la Kubikiribocho de Suigetsu que había aparecido en la esfera de agua.

A pesar de haber detenido el ataque, fue empujado con fuerza y chocó contra un árbol. Naruto no tuvo tiempo de recomponerse, ya que fue atrapado por una enorme mano de color púrpura. Se trataba del Susanoo de Sasuke quien estaba rodeado por la mitad del cuerpo del Susanoo.

—Naruto, escúchame... ¿cómo es que sigues con vida? ¿Y porqué estás con Zetsu? ¡responde Naruto!— Exigió Sasuke totalmente serio y dejando ver su mangekyou eterno y su Rinnegan.

—Esto no me detendrá —dijo Naruto y justo cuando iba a escapar del agarre del Susanoo, Sasuke hizo desaparecer su Susanoo.

—Ya lo se, responde mis preguntas, luego acabaré con esto usando todo mi poder —aseguró Sasuke y en ese momento Karin se paró al lado del peli azabache.

—Naruto, si de verdad eres tú, no tendrías porque ocultar nada. O es que no nos reconoces... Soy Karin, nos conocimos en aquella guarida de Orochimaru, nunca pensé que terminaría siendo tan unida con alguien más como lo fui contigo y Suigetsu. Ustedes son mi familia, pensé que habías muerto, y cuidamos este mundo de paz que tú tanto querías, ¿porqué eres tú mismo ahora el enemigo?

Las lagrimas salieron de los ojos de la Uzumaki, su tono de voz se quebraba, tanto Sasuke, Suigetsu y Konan se sorprendieron ante la reacción de Karin.

Naruto agachó la cabeza, el cabello cubría sus ojos, en ese momento Suigetsu se acercó a Naruto quedando frente a él, unos pasos más adelante de Sasuke y Karin.

Suigetsu le tiró la Kubikiribocho a los pies a Naruto, todos quedaron sorprendidos ante lo que había hecho el shinobigatana.

—El motivo de mi vida era seguirte a ti, creí que estaba siguiendo tus anhelos, pero si no es así, si tú verdadera misión es ir en contra de este mundo, entonces dejaré que acabes con mi vida —expresó Suigetsu y el rostro de todos eran en una reacción similar, estaban perplejos—. No iré en contra de ti, y tampoco iré en contra de Karin, ella quiere proteger este mundo. Por eso la única opción que a mí me queda es la muerte, así que hazlo.

—Suigetsu qué haces...

—Te dije que mis motivos son diferentes a los tuyos Sasuke, así que no te metas, por favor —pidió Suigetsu mirando tanto a Sasuke como a Karin, dándole una leve sonrisa a la Uzumaki.

—Adelante, hazlo, no tengo últimas palabras ni últimos deseos. Estoy listo para morir —expresó Suigetsu, en su tono de voz se podía notar que no mentía, ni tampoco estaba hablando solo por hablar.

Naruto tomó la Kubikiribocho y sin levantar la mirada, aún cubierta por su cabello se acercó a Suigetsu. Zetsu blanco estaba con la mitad del cuerpo fuera en una rama de un alto árbol, observaba con una sonrisa todo.

—*Esto es interesante, parece que esta aceptando su muerte. Bueno, ahora solo queda que Naruto acabe con él*— Pensó Zetsu blanco sin perder la divertida sonrisa.

Naruto llegó a pararse justo delante de Suigetsu, apretó con fuerza la empuñadura de la Kubikiribocho, Suigetsu no hacía ningún movimiento, su determinación era sin duda enorme.