En el presente:
Lisa's POV
—Bienvenida —una voz suave me dijo al oído.
No podía ver su rostro o localizarla en la oscuridad, pero me encontraba agradecida por el sonido. Me hallaba feliz de que estaba rodeada por ángeles. No había estado segura de que fueran a darme la bienvenida cuando cruzara.
Dicen que cuando mueres, todas tus memorias destellan ante tus ojos. Ves tu vida en una secuencia de ensueño así puedes recordar las personas que has perdido y las personas que has amado. Todo en lo que pude pensar fue en Jennie. En la oscuridad, fue su rostro el que me mantuvo caliente. Morí feliz... bueno, tan feliz como podría hacerlo. Morí con el conocimiento de que Jennie me amaba. No me encontraba loca por morir justo cuando todos mis sueños estaban a punto de hacerse realidad. Era el karma o destino, como dirían algunas personas. Una muerte causa una muerte. Fue mi culpa que Minnie estuviera muerta, y ahora estaba muerta. Era como debía ser.
Recordé lo que mi pastor me dijo en la iglesia una vez. Dijo que cuando una persona moría, el soplo de vida se separa del cuerpo y el alma deja de existir. Dijo que la muerte era como un sueño largo y profundo. Y que tendríamos que esperar hasta que Jesús regresara y entonces los buenos irían al cielo y los malos al infierno. Sus palabras me habían asustado hasta la muerte.
¿Podrías imaginarte solo esperando a ser despertada, sin saber si vivirás una vida eterna llena de amor y esperanza o si te quemaras en los pozos del infierno? Ahora que estaba muerta, no parecía tan malo.
Me encontraba sola con mis pensamientos y mis recuerdos. Y todo en lo que podía pensar era en Jennie… sus bellos ojos marrones, su cabello largo y sedoso, la forma en que me sonrió cuando me vio, la forma en que me tocó tan suavemente, la forma en que gimió cuando la besé. Podía recordar hasta el último momento que pasé con ella. No podía detener la culpa sin embargo. Se quedó conmigo, incluso en la muerte. Y una parte de mí se sentía inquieta.
Una parte de mí se preguntaba si aún me hubiera amado si supiera la verdad. Recordé esa última noche en Englewood. Minnie había comenzado a beber a la hora del almuerzo. Enviando mensajes de texto de ida y vuelta con alguien intensamente, y todo en lo que podía pensar era en lo triste que estaba al no saber cuándo vería a Jennie de nuevo. Habíamos discutido un poco. Minnie me había dicho que podía engañarme tanto como podía engañarla a ella. Había ignorado su charla ya que era el alcohol hablando.
No la engañaba físicamente, aunque mentalmente ella se encontraba lejos de mi mente. Se había emborrachado en la cena, diciéndome que no era realmente una mujer. Que incluso Bambam pensaba que podía encontrar a alguien mejor. Había rodado los ojos y pensado en cómo podría encontrar a Jennie a solas.
Cuando fue a acostarse, me sentí eufórica. La lleve a la cama con una botella y supe que termino. Ella también lo sabía. Y no me sentí culpable porque ella había estado demasiado ocupada enviando mensajes de ida y vuelta. No sabía con quien hablaba, pero quienquiera que fuese parecía hacerla feliz porque reía cada vez que recibía un nuevo mensaje.
Fui a la playa con Jennie, sintiéndome como si estuviera en la cima del mundo. Todo iba bien. Y cuando hicimos el amor, sentí que mi corazón rebosaba de felicidad y alegría. Pero entonces mi teléfono comenzó a sonar. Fingí ignorarlo, pero sabía que molestaba a Jennie también. La vi revisar el teléfono pero fingí besar su hombro. La observé mientras leía los mensajes y luego los eliminaba. Vi los mensajes donde Minnie me pedía que fuera a buscarla, pero los ignore.
De hecho, ver a Jennie borrar los mensajes me hizo feliz. Me encontraba mal de la cabeza, pero me hizo sentir como si realmente me amara. Pensé para mí misma, "Que linda. Esta celosa así que está borrando los mensajes". Ni siquiera considere ir a recoger a Minnie.
ESTÁS LEYENDO
⌗𝐒𝐢𝐧 ; 𝐉𝐞𝐧𝐥𝐢𝐬𝐚 𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧
Fanfiction𝐋𝐚𝐥𝐢𝐬𝐚 𝐌𝐚𝐧𝐨𝐛𝐚𝐥 𝑇𝑎𝑡𝑢𝑎𝑑𝑎. 𝐶𝑎𝑙𝑖𝑒𝑛𝑡𝑒. 𝐿𝑎 ℎ𝑒𝑟𝑚𝑎𝑛𝑎 𝑑𝑒 𝑚𝑖 𝑚𝑒𝑗𝑜𝑟 𝑎𝑚𝑖𝑔𝑎. 𝐹𝑢𝑒𝑟𝑎 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝑙𝑖́𝑚𝑖𝑡𝑒𝑠; 𝑎 𝑒𝑥𝑐𝑒𝑝𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑑𝑒 𝑎𝑞𝑢𝑒𝑙𝑙𝑎 𝑢́𝑛𝑖𝑐𝑎 𝑛𝑜𝑐ℎ𝑒. 𝐀𝐪𝐮𝐞𝐥𝐥𝐚 𝐮́𝐧𝐢𝐜𝐚 𝐧...