Espeluznante

Juntos como una persona

Espero que el capitulo sea de su agrado <3

Mi familia era de comerciantes, sucios por el dinero y arrogantes a más no poder, hasta ahora no sé específicamente que es lo que mi padre llevaba en aquellas carrozas cuyo tamaño simulaba el de una casa entera, o eso aparentaban a mi vista, recuerdo que al implantar comercio con el reino de tréboles, teníamos que quedarnos en una casita en la frontera, pequeña y diría que más fría por dentro que por fuera, ahí acostumbraba a quedarme por meses cada año, creo que desde que tenia una edad que rondaba por los 14 años.

Una vez ahí, mi padre tendría que realizar tratos con tréboles, se quedaría a verificar la mercancía y colectaría nuevos productos a lo largo de todo el reino, antes de todo ese correteo nos llevaría a mí y a Mathie a vivir a una casa de uno de sus subordinados de esa región. "Dmitry Braginsky" un hombre serio, con algunas canas y el ceño fruncido todo el tiempo, tenía una voz gruesa y fuerte (a un paso de los gritos).Nunca olvidaré el miedo que me dio la primera vez que lo vi, pero no logró recordar la ultima vez que lo hice.

En la casita vivía Katyusha, una chica algo miedosa, pero muy amable, Natalya con quien en dudosa ocasión hablaría, pues en cada ocasión que cambiaría unas palabras con Iván ella clavaría sus ojos en mí y no desaprovecharía cualquier oportunidad para empujarme y por último ahí conocería a mi perdición, Iván.

La primera vez que lo vi, nuestros padres se encontraban bebiendo, en un momento de lo que aparentaba una cena se tocó el tema de la economía del reino, con distintas opiniones, el ambiente se hacía cada vez más tenso, en medio de mi incomodidad, miraba alrededor, Mathew miraba con la cabeza baja el plato de sopa frente a nosotros, Katyusha se levantó de la mesa, llevando consigo a Natalya "Es una conversación de hombres" fue lo último que les dijo su padre para despacharlas, ese señor en serio daba miedo, todas sus palabras sonaban amenazantes, pero siempre eran respondidas por mi padre con algo que solo lo hacía enojar más.

En medio de aquello, vi hacia el otro chico en la mesa, Iván, sus ojos eran serios pero mantenía una sonrisa en su boca, aún así se mantenía en constante alerta, por lo que no tardó en notar mi mirada, siendo atrapado por esos ojos amatistas que se clavaban en mí, solo me dio tiempo para pensar en ellos "Espeluznante" eso los definió por el resto del tiempo que continuamos juntos, pero mis pensamientos desvanecieron al oír a mi padre levantarse, como si no hubieran discutido hace un momento una sonrisa posaba en su cara.

- Pues bien, mi querido Dmitry, seguiría en esta interesante conversación contigo, pero si no me voy ahora mismo, mi cochero no tardará en abandonarme, aún siendo uno de mis hombres, siguen siendo tan inútiles, no cómo tú claro está, - decorando sus palabras con risas se levantó despidiéndose de su amigo.

"No te olvides cuidar de Mathew y Alfred, es un buen chico" Siendo lo último dicho, recogió su chaqueta, repitiendo palabras como "Pórtate bien y ayuda en la casa" salió por la puerta con una sonrisa arrogante.

Una vez que se fue, todo volvió a recobrar un tenebroso silencio, sentía el nerviosismo de Mathie, pero tampoco me atrevía a dirigirle palabra, tomando un ultimo trago de vodka, el señor levantó su mirada para mirarnos, sus ojos nos inspeccionaban y su ceño se fruncía cada vez más.

- ¿Planeas ir por tus maletas o quieres que yo haga eso?

La pregunta nos tomó de sorpresa y sin animarnos a responder fuimos con rapidez por las maletas.

- Su cuarto es el mismo que el de Iván, así que vayan donde él para que les acomode, no hagan ruidos fuertes, y aquí se desayuna a las siete en punto.

Sin más palabras se sirvió otro vaso de vodka, y salió de la casa, con nuestras maletas al pie de la escalera, miramos hacia Iván, él con una sonrisa, tan risueña como infantil, pero con algo escondiéndose atrás, algo que probablemente tardé en entender.