3~ Conversation

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El peli-azul entró a la mansión del azabache, iba a traer a su pequeño para llevarlo a casa, faltaba poco para la hora de la cena.

Encontró a su pequeño viendo televisión con su progenitor, ambos en una casita de almohadas y con lo que parecían ser palomitas y helado.

Estaba por entrar a la habitación cuando sintió una mano en su hombro, volteó a ver de reojo, encontrando al reptil con una mirada apenada y una sonrisa intentando mostrarse alegre.

-Necesito hablar contigo -; Pidió con amabilidad y en voz baja, no quería molestar a los que estaban viendo la película.

-No tengo tiempo -.

-Solo tomará un segundo... -.

-Bien... Que sea rápido -.

Salieron al jardín, en el cual, el castaño rojizo se sentó frente a una mesa que tenían allí, el de orejas de zorro hizo lo mismo, quedando frente a frente con el chico, más aprovecho para sacar un cigarrillo de su bolsillo y encenderlo para luego colocarlo entre sus labios.

-... No creí que fuera cierto que fumaras, otra vez -.

-Es mejor que vivir a base de pastillas, ¿Qué quieres? -.

-Me dejó pensando lo que dijo Tanner hoy por la tarde... -.

-Mierda, solo olvida eso -.

-¿Aún te gustó? -.

-Sí, “pero que importa”, no volveré a esas tonterías de parejas -.

-¿Por qué no? -.

-Solo mira como estoy, no necesito idiotas que me arruinen la vida -.

-Te vas a arruinar los pulmones, al igual que los de Tanner -.

-Cuidado con tus teorías, mi hijo nunca me a visto fumando, jamás lo haría cerca de él, no voy a arruinarle los pulmones a lo único que aún tiene valor en mi vida, ¿solo para eso me pediste hablar? -.

-No, no, no es por eso... -.

-Entonces empieza a hablar estúpido, que se me hace tarde y tengo trabajo mañana -.

-¿Estás enojado porque te rechacé? -.

-No -.

-¿Seguro? -.

-Totalmente -.

-Es que... Me gustaría explicarte porque te rechace... -.

-Porque no me amas, ya está, sencillo, no necesito explicaciones después de tantos años -.

-No es eso, es que tenía mis razones -.

-Raptor, sé que estabas o estás con Muzikato, ahora déjame en paz y vete a cojer con él -.

-No estoy con él, solo escuchame -.

El peli-azul lo observó con seriedad, sin dudas había recuperados su mirada intimidante, hasta el reptil se había puesto algo nervioso por esos ojos grises que parecían observar hasta lo más profundo de su alma. Apago el cigarrillo contra la pared y el trozo sobrante lo metió en una pequeña bolsa que llevaba en sus saco, en la cual iban otros tres trozos idénticos.

-Habla, ahora -.

-Yo sí te amaba... Pero no soy el indicado para ti -.

Un ligero tono rojizo se presentó en la mejillas del omega, más su rostro no mostró ningún cambio en absoluto.

𝕼𝖚𝖊𝖗𝖎𝖉𝖔 𝕺𝖒𝖊𝖌𝖆 L2 {Raptimba - Omegaverse}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora