20~ Pregnancy

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Un nuevo día se hizo en la casa, ya habiendo pasado dos meses del enfrentamiento de los más jóvenes.

Raptor si se molesto ante esto, no era alguien que apoyará las peleas, pero Timba felicito en cierta parte al joven, ya que lo hizo en defensa propia, si bien no lo hubiera provocado, hizo lo correcto en no dejarse intimidar.

Parecía otro día normal, el más joven estaba ocupado haciendo una tarea en la casa de su amigo castaño. Y la pareja se encontraba en la casa tranquilamente... O al menos el castaño estaba tranquilo.

El peli-azul estaba bastante preocupado por algo que estaba sucediendo. Tenía una idea y opinión clara, así que simplemente salió de la casa para comprar unas cosas necesarias.

El de ojos bicolor no comentó nada, ya que estaba acostumbrado a que el chico a veces saliera sin dar explicaciones.

El día continuó normal, hasta después de la cena... El castaño observó con curiosidad una bolsa que había traído el peli-azul luego de su salida.

-Amor, ¿Qué hay en esa bolsa? -; Preguntó el híbrido reptil terminando de guardar unos platos ya limpios.

-Unas vitaminas que compré, cariño -; Respondió con tranquilidad, terminando de limpiar la mesa.

El castaño por alguna razón no confío en aquellas palabras, por lo que decidió ayudar a guardar las supuestas vitaminas, abrió la bolsa y precisamente, era un bote de vitaminas lo que había en esta, lo sacó y leyó un poco la etiqueta de esta.

Tomó la bolsa para tirarla, más notó que en esta había algo más, una pequeña pastilla, la cual sacó, pero rápidamente el peli-azul se la arrebato.

-Azulito... ¿Qué sucede? -.

-Nada... Solo... No importa -.

-¿Y esa pastilla? -.

-Solo es una pastilla... No es para tanto -.

-Muéstramela -.

-Tranquilo Raptor... N-no es importante -.

-Timba, muestramela -.

-Raptor, calmate -; Pidió bajando sus orejas nervioso.

-Timba, dame la pastilla -; Habló seriamente, con un tono algo ronco.

El peli-azul aceptó la indicación, entregando la pastilla a su esposo y bajando la mirada. El reptil analizó esta pastilla, hasta que leyó algo interesante en esta.

-¿Una pastilla abortiva?... Timba tu no necesitas esto -; Comentó el reptil viendo de nuevo al chico de orejas de zorro.

No recibió respuesta, solo un par de lágrimas que se escaparon de los ojos del oji-plata, el cuál no sentía el valor de ver a su esposo de frente.

-Timba... No la necesitas... ¿Verdad? -.

-Lo siento... -; Fue su única respuesta, para luego abrazarse a sí mismo y enredar su cola entre sus piernas.

-Timba... ¿E-estas en cinta? -; Preguntó bastante sorprendido viendo como el chico se derrumbaba frente a él.

-N-no que-ría que te en-teraras... S-se que n-no qui-eres hijos... I-iba a hacer-lo antes de que lo des-cubri-eras... -; Habló entre sollozos y terminó de sentarse en el suelo, empezando a llorar apenado.

-Pero Timba, e-estás cosas debemos hablarlas -.

No recibió respuesta, el chico de cabellos azules estaba más que destrozado, estaba seguro de que hasta ahí llegaría su relación con él de ojos bicolor, ya que ya habían hablado con anterioridad al respecto de tener hijos o no.

𝕼𝖚𝖊𝖗𝖎𝖉𝖔 𝕺𝖒𝖊𝖌𝖆 L2 {Raptimba - Omegaverse}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora