Querido Destino

Cap 3. Arrivederci amore mio

punto de vista audrey

El descanso de verano terminó en un suspiro o al menos así lo sentí yo, aproveché cada minúsculo segundo para pasar tiempo con Tom, durante el descanso también hablé con Victoria, ella era mi mejor amiga desde hace ya 6 años cuando me cambiaron a esa escuela, junto con ella también usó otra amiga, se llamó Mia, ella era una chica tímida, cerró y tenía el complejo de madre, eso en lo personal era algo que me molestaba aveces, me hacía sentir como si fuera mi madre con la que pasaba el tiempo, como si fuera una niña que atentaba contra su vida todo el tiempo, ella me limitaba a muchas cosas, dejando el tema de lado, Victoria era un alma libre, espontáneo y muy buena amiga pero cuando las dos estaban juntas éramos unas personas completamente distintas, cuando estaba con ella hasta yo misma desconocía, no podía decir lo mismo de Mia,era la que decía no a todo, no salía, no hacía tonterías, al principio no me molestaba pero con el tiempo nos dimos cuenta de que podía llegar a aburrirnos la respuesta no, bueno siendo justos con ella sus padres le prohibieron la mayor parte de las actividades, sin duda el señor y la señora Brown tenían una manera de criar a sus hijos extraña, todos sabíamos eso pero no queríamos meternos en situaciones ajenas.

Hoy era domingo y estaba ayudando a Tom a terminar de empacar su ropa, me sentí mal por su partida pero no había nada que nosotros pudiéramos hacer para cambiar las cosas, el se vio aún más decaído que yo y era demasiado lógico, era él el que empezaría de cero, era él el que tenía que separarse de todos sus amigos y la mayoría de su familia, , uno de los dos dejar de tener sentimientos por el otro, sabia que estando lejos seria muy dificil mantener todo estable y aunque me duela es simplemente aceptar la verdad, en algun momento tendre que dejarlo ir, resignarme a verlo feliz en los brazos de otra persona,al terminar de guardar sus cosas me miró con lágrimas en los ojos y me abrazó, sentí como su respiración chocaba con mi cuello y sergio¿do a eso sentí sus lágrimas, mojaban mi blusa pero no le presté atención a eso, me acercaba a él lo más posible como si tuviera miedo de mi partida.

-Audrey te lo pido por lo que más quieras no terminas con lo que tenemos, te lo ruego, no rompas lo que nos tomó años construir, se que no crees que la distancia funciona pero de verdad no creo poder continuar si tu no estás conmigo, por favor lizzy no me dejes querida- decía mientras lloraba en mi cuello, me llamó lizzy, la que me única llamó así era Victoria, este apodo llegó de mi segundo nombre, Elizabeth, mi padre fue el que me puso ese nombre en honor a su abuela, el nombre me usó mucho, lo senti muy elegante. Me separé un poco de Tom y vi su mirada de súplica.

-Tom tu mejor que nadie sabes que la distancia nunca funcionó conmigo y no es que quiera alejarte completamente solo creo que con el tiempo las cosas van a dejar de funcionar y de verdad creo que sería arrastrarnos a un callejón sin salida, sería derrumbar lo lindo que tenemos ahora, mira podemos ser amigos hasta que vuelvas y podamos estar juntos otra vez, no lo veas como algo definitivo sino como poner una pausa a lo nuestro, un final abierto de nuestro hermoso libro pero Tom por favor no te sientas tan mal por lo que está pasando si?, prometeme que lo le tomarás importancia y que serás feliz, Francia es hermoso disfrútalo- dije mientras sostenía su cara y limpiaba sus lágrimas con dulzura, volví a abrazarlo y sentí como rompía en llanto otra vez, a esta mis lágrimas amenazaban por salir de mis ojos pero tenía que ser fuerte con esta decisión si no terminaría cediendo a todo lo que me pedía.

-Lizzy quiero intentarlo, quiero seguir contigo, si me amas tanto como dices shouldsunderstand this sentimiento, siento que si me separo de ti estaría firmando mi propia condena, no terminar quiero, quiero que sigamos escribiendo nuestra historia, quiero ser el único al que mires con amor y al que le entregues ciegamente todo de ti, contigo lo quiero todo, se que solamente tengo ojos y corazón para tí y sé que tu tienes miedo pero yo no soy como los otros imbéciles que se atrevieron a dañar tu corazón, te consta que yo no te haría eso nunca- dijo un poco más calmado pero firme, se vio tan seguro de sí mismo y de sus palabras, era demasiado convincente y ahí supe que no sería fácil dejarlo ir, simplemente era Tom, mi Tom, era el chico que me había robado mi corazón desde nuestra primera conversación,nunca en mis 17 años había conocido a otro chico como él y eso de verdad me fascinaba.