Una Historia de Amor Diferente

Capítulo 5

Narra Nurbanu

No puede ir con la sultana en el momento que yo quise, pero ahora ya estaba en camino, cuando llego me dejan entrar casi de inmediato. Me sorprendo al ver qué también estaba Mihrimah y Mihrunisa la favorita del príncipe Mustafa.

-Sultanas- hago reverencia-

-Nurbanu que te trae por aquí -me sonríe la sultana Hurrem-

-Me gustaría hablar con usted a solas-

-Tranquila Nurbanu, ella dos son mí plena confianza asique puedes hablar tranquila- dice mientras le hace señas a los sirvientes para que se fueran-

-Ayer en la noche fui a los aposentos del príncipe Selim pero el ya estaba ocupado con otra mujer -le cuento-

-Eso es imposible si yo misma le pedí a Firial que te prepare -dice sería-

-Pues paso eso mí sultana-

-Que raro todo- dice Mihrimah-

-Debe haber sido la sultana Mahidevran -dice Mihrunisa- alguien tuvo que contarle que Nurbanu le es fiel a usted-

-Creo que tienes razón Mihrunisa -dice Hurrem- no te preocupes Nurbanu, yo voy a resolver esto, tu ve a prepararte ya así estás temprano con mí príncipe-

-Como usted me orden sultana, sabe qué para lo que me necesites yo estoy a su disposición -le sonrió-

-Es bueno escucharte -me sonrie-

Salgo de los aposentos, y le aviso a Sumbul las órdenes de la sultana Hurrem entonces me lleva los mismos aposentos que ayer.
Decidí que esta vez utilizaría un vestido típico para así salir un poco de mí rutina, miraba cada uno de que había allí pero nada llamaba mí atención hasta que uno color tierra con piedras fue el que me eligió. Una vez que me coloque pude ver qué me quedaba pintado parecía hecho únicamente para que yo lo usará, agregué algunos accesorios y salí de vuelta con Sumbul, quien al verme comenzó nuestro camino.  A diferencia de ayer en la noche, apenas llegue a la puerta, me abrieron para que pasara, entre con cuidado pero me sorprendió no ver a Selim asique me senté junto a la ventana a esperarlo, tardo casi una hora mas en llegar a sus aposentos pero cuando me vio su cara seria cambio por una sonrisa perversa. 

-Que bueno tenerte aquí -sonríe acercando se- 

-Siempre estaré aquí cuando me necesite -le sonrió- usted es mi prioridad- 

-Ayer te extrañe muchísimo pero ya estaba ocupado hermosa- 

-Yo también lo extrañe mi príncipe- hago una mueca- lo entiendo pero yo estaba ilusionada con verlo-

-Prometo compensar eso, pero primero comamos algo y luego te daré un regalo- susurra acariciando mi mejilla- 

El fue quien se encargo de pedir que nos trajeran comida y mucho vino, comimos mientras el me contaba todas las novedades sobre el imperio y que podría irse a su provincia una vez que el sultán vuelva de su próxima batalla asique el tiempo que tenia para meterme en su corazón debía tomar un poco de velocidad  sino me dejaría aquí. 

Cuando terminamos de comer, se levanto y me hizo hacer lo mismo, camino hasta estar frente a su cama donde me sujeto con fuerza por la cintura pegándome a su cuerpo luego de eso me beso y aproveche el momento para rodear su cuello con mis brazos. Apreto mi cadera haciéndome jadear y se aprovecho de eso para meter su lengua en mi boca haciendo que el dominara el beso. Nos tiro sobre la cama haciendo que nuestros sexos vestidos se rocen, comenzó a moverse haciendo aun mas fricción, me encargue de sacar su camisa y pantalon mientras el arrancaba mi vestido, nos hizo girar haciendo que quedara encima pero enseguida hizo señas para que me pusiera entre sus piernas. 

-Abre la boca bonita- ordena mientras terminaba de quitarse toda la ropa- 

Metio su miembro en mi boca , empece a chupar y  lo que  no cabía lo bombeaba con mi mano, tomo mi cabello en su mano  con este haciéndome profundizar mis movimientos. Tenia los ojos llenos de lagrimas debido a las arcadas que me provocaba su gran tamaño, senti el liquido pre seminal por lo que acelere aun mas mis movimientos, podia escuchar sus gruñidos.

-Mierda no te detengas- dice tirando de mi cabello- 

Percibí como sus fluidos eran liberados en mi boca y me los trague entero, lamí mis labios mientras me levantaba me había gustado tener cierto control pero esto no duro mucho una vez que estuve parada sentí como me sujetaba por las caderas  y me cargo pegándome a una pared, su mano fue a mi interior donde jugo con mi clítoris mientras besa mi cuello, me penetro de una sola estocada por lo que solté un gran gemido. Empezó a moverse ferozmente, rápido y brucos, puse mi mano en su cuello para a traerlo de vuelta mis labios y besarlo. Deje ir mi cabeza hacia atrás mientras nuestros gemidos se mezclaban, sentí como acelero sus embestidas haciéndome gemir aun mas fuerte. Sentía como mi orgasmo estaba cerca por lo cual mordí mi labio inferior. El placer se extendió por todo mi cuerpo cubierto de una fina capa de sudor, los fluidos de Selim se mezclaban con los míos. Juntamos nuestras frentes tratando de normalizar nuestras respiraciones, cuando estuvimos tranquilos los dos, me cargo hacia su cama y me dejo sobre esta mientras se acostaba junto a mi. 

-Duerme bien hermosa -susurra en mi oído- 

-Sueñe bonito Selim -digo escondiéndome en su pecho-  

Otro capítulo fuera, espero que les haya gustado! En un rato el último de hoy, espero sus votos y comentarios.