CAPITULO 19

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El sonido del agua  cayendo de la ducha era casi imperceptible para los sentidos de nuestro joven, temeroso y excitado ángel, que ahora lucia entregado en sumisión ante la nueva faceta de un muy enojado Min Yoongi, quien tenia la mano derecha sobre su blanquecino cuello sujetándolo con una fuerza hasta ahora desconocida por él.

Abrió los ojos rápido cuando escucho el sonido de lo que parecía ser la hebilla de un cinturón. ¡Si eso era! Lo confirmo cuando bajo un poco la vista para ver que el contrario se lo había quitado.

Soltó al rubio de mala gana y  salió con el cinturón en la mano izquierda doblado por la mitad y haciendo un leve balancín. Jimin trago saliva en seco y quiso seguirlo porque habían muchas cosas raras en esa situación, una de ellas era que haya nombrado al demonio de Seúl. El lo sabia! Y ahora estaba en un grave problema. La numero dos y mas importante, como se le había ocurrido dejar que Yoongi viera sus marcas. Todas aquellas preguntas se detuvieron con su andar cuando vio al pálido chico detener su caminar y verlo fijamente con la misma mirada felina, oscura y tenebrosa.

-no te dije que podías venir detrás de mi Jimin. – el delgado ángel se congelo en su lugar- regresa y cierra la llave de la ducha, voy a estar esperándote en mi habitación. Tu y yo vamos a tener una charla. – Asintió como 3 veces con la cabeza y de un momento a otro se vio corriendo al cuarto de baño para acatar su orden.

Al regresar a la habitación lo vio sentado de espaldas en su ya conocida silla giratoria frente al escritorio donde solía componer sus armoniosas y pacificas melodías.

En ese momento juraría que ninguna nota de piano podría expresar a la perfección el enojo que sentía el músico en todo su cuerpo.

-regrese – menciono en un tono apenas audible mientras se acercaba a la silla y lo veía girar a su encuentro-

La vista de Jimin se dirigió a las manos de Min, quien tenía aun el cinturón en esta, luego extendió la mano izquierda que sujetaba el objeto de cuero y lo miro como si le estuviera dando una orden, una de las que ya conocía. este juego era su favorito y algo en su cabeza resonó al instante.... PORQUE EL TAMBIEN CONOCIA EL PROCEDIMIENTO, JAMAS SUPO DE ESTE TIPO DE GUSTOS EN YOONGI...

-No estoy siendo lo suficientemente claro Jimini? – aquel apodo usado solamente por Jeon hizo que el corazón del rubio se aceleraba. Iba a matar a Kim Taehyung cuando lo viera- necesitas que sea mas explicito? – nuestro hermoso ángel negó a toda velocidad poniéndose de rodillas frente a su nuevo y misterioso amo, quien lo veía desde arriba con los aires de superioridad nunca antes vistos en él.

Cerro los ojos cuando sintió que una enorme mano que tomaba de sus cabellos para acercarlo aún más, para luego sentir el frio cuero deslizarse alrededor de este, de un momento a otro el cinturón subió hasta su mentón quedando atrapado en sus enormes y gruesos labios rosados, mientras sentía que la hebilla apretaba sus cabellos un poco mas arriba de la nuca.

Abrió los ojos para ver como su amo se ponía de pie, posicionándose a su espalda mientras jalaba levemente el cinturón indicándole que se pusiera en pie.

Una vez que  lo hizo y sintiendo como su corazón iba a explotar por el conjunto de emociones que estaba experimentado lo volvió a escuchar hablar con voz ronca.

-quítate la bata! No te dije que te vistieras Jimini – era cierto, de regreso al cuarto de baño se había colocado una bata para cubrir su avergonzado cuerpo, creyendo tontamente que iban a tener una conversación –

Una vez que volvió a estar desnudo sintió como los dedos del contrario se posicionaban sobre sus adoloridas caderas que aun tenían rastros de los dientes de Jeon. Apretó mas fuerte logrando que soltara un leve gemido y cuando obtuvo eso volvió a presionar mientras escuchaba de fondo algo que parecía un pesado suspiro de molestia.

Fuckboy  (KOOKMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora