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Una joven salió disparada de una pared, Min Yoongi atravesó la pared ya que le había ofrecido un fuerte golpe a una doncella que ingresó al cuarto, el omega contempló aquella vampira que se levantó adolorida y aturdida. Jennie y los demás llegaron corriendo, viendo como el vampiro ahora tomaba del cuello a una de las sirvientas que había llegado solo hacer limpieza.

—¡Mi señor!—gritó Sejeong horrorizada al ver a su amo apretando con fuerza el cuello de aquella sirvienta, la cual no podía liberarse por la descomunal presión que estaban ejerciendo—¡Debe detenerse!

Min Yoongi miró a su derecha viendo a las otras vampiras, con una gran sonrisa tiró aquel cuerpo a un lado, la sirvienta salió volando, hasta atravesar una de las ventanas del primer pasillo.

—Esta es la parte en la que corren—sentenció Jennie.

Mijoo apareció detrás de Min Yoongi que estaba a punto de abalanzarse sobre la ama de llaves y Sejeong, la vigilante rodeó sus manos alrededor del cuello del chico para así dejarlo inconsciente, el menor logró liberarse del agarre de aquella impura, la tomó del cuello y corrió hacia una pared, hasta golpearla contra esta. La impura escupió sangre, miró asustada al joven Min, aquella fuerza era demasiado para ella, incluso la podía comparar al nivel del Duque Jeon Jungkook.

¿Así de fuertes eran los híbridos? no, debía ser gracias al bebé que el joven Min cargaba. Cuando apenas se estaba recuperando, Min Yoongi la tomó de la mano y la jaló con fuerza y la empujó hacía atrás, el cuerpo de Mijoo atravesó la pared y rompió las ventanas, dejando un gran hueco. La líder de las vigilantes, soltó un chillido de alerta, las demás cuidadoras abrieron sus ojos y empezaron a bajar las paredes para buscar como detener aquel híbrido.

Jennie y Sejeong volvieron a echar carrera al notar que el joven Min volvía a depositar su mirada sobre ellas.

—¡No entiendo como puede ser tan ágil aún teniendo ese gran vientre!—gritó la ama de llaves buscando salvaguardar su vida—¡Ni embarazo está quieto!

Tres vigilantes se abalanzaron sobre Min Yoongi para poder detenerlo; pero este fue más rápido, las esquivo, tomó de la cabeza a una y la estrelló contra la pared, destrozando el craneo, el cerebro salió de su lugar y el cuerpo cayó sin gracia, a la segunda, el híbrido atravesó su mano al pecho y arrancó su corazón. Con suma hambre, empezó a succionar el liquido en su interior hasta que se lo acabó, llenando sus manos de sangre y alrededor de sus labios, se relamió con mucha más sed.

La puerta de la mansión se abrió, ingresando Jeon Jungkook y Dongwook que habían escuchado los gritos, el Sangre pura apareció por el pasillo, Jennie al ver a su amo tomó de la mano a Sejeong y se ocultaron detrás del mayordomo en búsqueda de protección. Jeon Jungkook al ver a su amado despierto, sonrió espléndido y estiró sus brazos.

—¡Cariño!—exclamó con suma felicidad.

En eso el híbrido le ofreció una enorme patada en el vientre al Sangre pura, ocasionando que este saliera volando a la pared. Jennie y los demás abrieron los ojos en par, horrorizados. El Duque se tocó la cabeza y se acarició, adolorido, suspiró al ver como su amado iba a él con total deseo de aniquilarlo. El hibrido dio una fuerte patada para destropar su rostro; pero Jungkook se movió con rapidez y se hizo a un lado.

—¿Eh?—inquirió con un tono socarrón Min Yoongi y su ojo rojo se intensificó—, eres rápido, Duque. El mayor apretó su mano y quiso dar un puñetazo a Jeon Jungkook, el sangre pura desapareció del frente y retrocedió detrás de Min Yoongi a unos pasos.

—¡Min Yoongi, debes calmarte!—ordenó aquel vampiro al darse cuenta que su amado no estaba teniendo ningún control total sobre sí mismo.

Jong Suk apareció con suma tranquilidad, enarcó una ceja viendo el desastre en el primer piso.

Kookgi|| SantéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora