_CAPÍTULO 11_

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Si alguien me agarra y me dice:

'Cuando crezcas, una persona noble vendrá, así que tienes que florecer bien hasta entonces.'

Mi primera reacción sería: ¿Escapaste de un manicomio?

Además, Asellus no tenía ningún buen sentimiento hacia mi en primer lugar.

"¿Solo hice que dudara más de mí?"

Como esperaba, él dijo con una expresión firme.

- No seas tonta, Vrill. Si quieres llamar mi atención de esta...

- Es la verdad, y lo digo enserio. Seamos amigos.

Cerró su boca. Su rostro mostraba que para él era algo absurdo.

Sin embargo, no le puse atención y continué hablando claramente.

- Esto es un matrimonio político de todos modos. Piensa en esto como una alianza entre nosotros. Después, si quieres encontrar alguien que te guste, puedes divorciarte de mí sin remordimientos.

- ¿Qué?

- Todavía estamos en nuestros quinces. Necesitamos ajustarnos a la situación. Así que durmamos en habitaciones separadas después de casarnos. Es mejor dormir en otra habitación y mantener la puerta del medio cerrada.

- ... ¿lo dices en serio?

- Claro. Las relaciones sexuales no son buenas para el cuerpo, especialmente en esta edad.

No importa cuál es el trasfondo de la novela, todavía soy una persona moderna.

Asellus también puede levantar la maldición del señorío, sin mí, usando su resistencia mágica.

Será mucho más feliz saliendo con la protagonista femenina, quien tiene una fuerte afinidad mágica.

Pero por alguna razón, la expresión de Asellus era extraña.

Bajó un poco su cabeza como si no hubiera escuchado nada y mordió su labio.

Cuando lo vi más detenidamente, la punta de su oreja estaba un poco roja.

- ¿Estás enfermo, o no te gustó lo que dije? _Pregunté, inclinando mi cabeza.

- ¿Qué sucede? ¿Tienes alguna queja?

Asellus rápidamente agitó su mano y dijo.

- No es eso, Vrill.

- ¿Ah?

- ... es tan repentino.

Asellus desvió su mirada. Giró a ver a las personas detrás de él.

Eran diez sirvientas, sirvientes, y mayordomos en el comedor, parados con una mirada avergonzada en sus rostros.

Sus rostros parecían como si estuvieran sentados en un cojín de espinas porque escucharon la conversación secreta de la pareja.

Entiendo su reacción, pero la reacción de Asellus fue completamente inesperada. 

Pienso que fueron buenas noticias para ti, ¿pero parece que no?

O tal vez traje a la mesa una conversación grosera de la que los nobles no podían hablar francamente, en voz alta.

De todas formas, era necesario tener cuidado.

- Seré cuidadosa la próxima vez.

Asellus asintió con una expresión temblorosa.

Regresé a mi dormitorio después de terminar mi comida.

Tan pronto como la puerta del dormitorio fue cerrada, Senna, quien me había seguido en la oscuridad hasta entonces, gritó con emoción.

- ¡Ay dios mío! Señora, usted es tan genial.

- ... ¿ah?

- ¡Enserio! Casi me enamoro de usted.

Senna revoloteaba de emoción.

Parecía que Senna ocultaba su inocencia en la oscuridad.

"¿No sería difícil para una sirvienta hacer eso en una ordinaria familia noble?"*

[*Se refiere a que es un comportamiento que no debería tener hacia los nobles]

Senna rápidamente estabilizó su cuerpo probando que mi predicción era correcta.

- Oh, lo siento fui grosera...

Ella me miró, pero negué con la cabeza para indicar que estaba bien.

- Está bien. Pero es mejor que seas cuidadosa cuando estemos fuera.

- ¡Sí, sí! Por supuesto.

- Especialmente si ves a Oden, te regañaría seriamente.

Era una broma pero escuchando lo que dije, Senna tembló.

Estaba desconcertada y hablé.

- ¿Qué sucede?

- ... señora es cierto. Si el mayordomo lo sabe, me regañará.

- Está bien. Lo mantendré en secreto.

- ¿Enserio?

Tan pronto como asentí, Senna se alegró notablemente.

Me preguntaba, ¿qué tan estricto es el mayordomo?

Incluso el mayordomo, cuyo señor murió y fue reemplazado por un sucesor joven, tenía que mantener su cabeza erguida.

"Pero todos parecen ingenuos excepto el mayordomo, ¿cierto?"

La sirvienta, Sena, y otros sirvientes eran buenos y no tan ásperos.

Incluso prometí ser amigos con Asellus, así que pienso que lo estoy haciendo bien.

Fue cuando me sentía orgullosa de mí misma por estar completando el plan paso a paso.

TOC TOC

Escuché un toque de afuera.

Al mismo tiempo, una vieja pero poderosa voz resonó.

- Tengo algo que decirle. ¿Podría por favor venir a la recepción por un momento?

Era la voz del mayordomo.

Contesté despreocupadamente.

- Lo tengo.

Escuché el sonido de su caminar.

Yo, también, trataba de mirar con suavidad, pero la complexión de Senna se volvió blanca.

- ¿Qué pasa Senna?

- ... el mayordomo...

- ¿Ah?

 - ¡Caramba, la audición del mayordomo es demasiado aguda!

¿Es eso tan aterrador?

Sacudí mi mano, diciendo que todo estaba bien.

Sin embargo, la reacción de Senna era poco clara, y estaba viéndome con una expresión rara en su rostro.

Me preguntaba si estaba bien hablar.

En este punto, estaba curiosa acerca de lo que tenía por decir y la insté a hablar.

- Está bien hablar cómodamente.

- Pero...

- Senna solo me está ayudando a adaptarme a la mansión.

Senna abrió ampliamente sus ojos.

Tan pronto le sonreí, Senna dudó y dijo.

- El mayordomo tiene una sólida formación. Hasta cierto punto, usted recuerda qué sucedió hace unos años. 

- ¿Enserio?

- Sí, acaba de escuchar las palabras, así que también tenga cuidado en el salón. El mayordomo a menudo regaña al maestro Asellus.

Es lo suficientemente poderoso para disciplinar al único heredero de la mansión.

"De alguna manera." Parecía que no era un mayordomo ordinario.




No quiero tener a tu bebéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora