No quiero tener a tu bebé

_CAPÍTULO 62_

Pronto se puso el sol y llegó la noche.

Asellus me dijo que cenara con él si estaba libre.

Acepté su oferta y cerré el libro.

Era un libro sobre la historia de LeTella.

Tuve un calambre porque estaba constantemente leyendo en la misma posición, y me dolía la cabeza después de leer todo el contenido.

Necesitaba refrescarme un rato.

"Le iba a preguntar por los regalos."

Tengo que agradecerle

Pero por alguna razón, dudé en dar las gracias.

Si lo hacía, tenía la sensación de que Asellus lo haría a menudo.

"De ninguna manera."

No importa cuán exitoso fuera, había un límite para sus finanzas.

En primer lugar, LeTella era un reino pequeño y Austell no era un estado muy rico.

Se acabará la enorme recompensa que recibió por derrotar al monstruo.

Supuse arbitrariamente que la mitad habría desaparecido con los regalos. 

*****

El sonido de los platos traqueteando resonó en el comedor.

A pesar de que era el final del verano, estaba nevando mucho.

Y el entorno se ha vuelto blanco.

Mientras cortaba zanahorias maduras, pensé en Islet.

¿Qué está haciendo Islet?

Debería estar aliviada ahora que se ha ido, pero estaba extrañamente ansiosa.

Más aún porque sé que no hay forma de que simplemente retroceda con esa personalidad.

"Estoy segura de que volverá a la mansión con el pretexto de una maldición..."

No sé cuándo llegará ese momento.

Mientras miraba sin querer por la ventana, escuché una voz suave a mi lado.

- Brill, ¿qué estás pensando?

Asellus sonrió con picardía.

Una mentira fluyó sin saberlo ante una pregunta aguda.

- ... Pensando en los regalos que me enviaste.

- Entonces continúa.

- Eh.

Era la primera vez que recibía tantos regalos, por lo que las palabras de agradecimiento no salieron bien.

Mi garganta hizo cosquillas. Continué balbuceando como si lo estuviera posponiendo.

- Gracias Asher.

También había una sonrisa incómoda.

No hubo respuesta inmediata de Asellus.

"¿Mi agradecimiento fue demasiado malo?"

Desearía tener una reacción más significativa como la de Sena.

Miré a Asellus.

Antes de ver su rostro, primero vi su mano sobre la mesa.

Pero de alguna manera, sus grandes manos eran blancas y temblaban sin cesar.

Sorprendida, hice contacto visual con él.

- ... ¿Asher?

Asellus frunció el ceño como si le doliera.

Los vasos sanguíneos eran visibles alrededor de su cuello y su ropa estaba empapada de sudor.

Rápidamente me levanté de mi asiento.

La vajilla prolija se derramó por todas partes.

- Asher, ¿estás bien?

- ... Espera, Brill.

Extendió la palma de la mano como si no tuviera que acercarme.

El maná dorado goteaba a su alrededor.

Ni siquiera podía acercarme y solo parpadeé.

Una vista extraña se estaba desarrollando ante mis ojos.

La energía mágica explotó como fuegos artificiales en el aire.

Asellus también se echó hacia atrás, avergonzado.

Respiró profundo, cubriendo su rostro con ambas manos.

El sonido de su respiración vibró sutilmente.

Esperé pacientemente a que se calmara.

Afortunadamente, el maná desbordante disminuyó gradualmente.

Después de un rato, respiró hondo y dijo.

- ... Lo siento.

"¿Por qué sucedió esto?"

Es bueno controlando el maná.

¿Hay algún efecto secundario por exagerar?

Mirándolo con expresión preocupada, Asellus evitó mi mirada.

Las puntas de sus orejas estaban ardiendo.

Pregunté sorprendida.

- ¿Tienes fiebre?

Asellus negó con la cabeza.

Luchó por agarrar el mantel y lentamente continuó hablando vergonzosamente.

- ... Estoy tan feliz. Si estoy rebosante de alegría, no puedo controlar mi maná.

[N/T: ¿Cómo puede ser tan lindo? Pero entonces cuando se besen dentro de 50 caps (no es spoiler, yo tampoco sé) mata a Avril por exceso de maná.]

Sus brillantes ojos dorados estaban visiblemente agitados.

No pude decir nada. Tenía sentimientos encontrados.

Hubieron algunos explosivos mágicos que sonaron en el comedor después de esperar un rato.

Cuando el maná terminó, el silencio cayó en el comedor.

En silencio, dije lentamente.

- ¿Te gustó tanto? [Que Avril le agradeció]

- Sí.

Ojos claros e inocentes me miraron. 

[N/T: Me parece lindo pero no creo que sea inocente.]

Me aparté de su mirada.