La Bahía

47 5 0
                                    

Todo había pasado tan rápido que estaba muy confundida, pero en el fondo Chris era el hombre de mis sueños, con el que quería estar y pasar el resto de mi vida solo con él, pero sabía que en algún momento nos hibamos a dejar de ver, ya que yo vivía en los Ángeles y él en las Vegas, no sabía que pensar, no sabía si lo nuestro iba a funcionar de verdad, aunque Chris se portaba demasiado bien conmigo, me trataba como a una princesa, aunque solo habían pasado dos días de habernos conocido.

Había pasado todo tan rápido que sin darnos cuenta ya habíamos llegado a esa bahía.

Era tan linda. Tenía el agua cristalina, tan transparente que los diferentes peces se podían contemplar desde el yate.

Ellos bajaron primero del yate y luego nos recibieron, primero bajó Dulce y luego yo. Cuando iba bajando por poco caigo al agua, si no fuera por Chris que de inmediato me sostuvo de la cintura.

Chris: Cuidado, hermosa. - me dijo mirandome a los ojos.

Estabamos muy cerca, él me robo un apasionado beso que me dejo impresionada. Sentí un cosquilleo que me decía que él sí era el correcto.

Ya los cuatro en la arena nos dirijimos al puesto de buceo en donde nos prestarían el equipo para bucear.

Estuvimos allí un buen rato mientras Chris y Poncho hablaban con el dueño de el puesto.

Finalmente el señor nos condujo hasta el otro lado de la isla en donde estaban los peces más hermosos de allí.

- Este lugar es exclusivamente para ustedes. - nos dijo el señor mientras nos bajaba con cuidado del bote.

Allí nos alistamos para bucear, nos pusimos todo lo que necesitábamos y nos lanzamos al fondo del mar.

Se veía todo hermoso, los corales, los peces y hasta la arena, que con los rayos del sol parecían escarcha.

Vimos toda clase de peces, nos tomamos fotografías, todo fue maravilloso.

Estabamos ya cansados cuando decidimos subir para ir a almorzar  algo. Fuimos a un restaurante cerca de allí, la comida estaba deliciosa, casi nos comemos todo el restaurante.

Cuando volvimos ellos decidieron llevarnos a su casa para ver unas películas y tomar unas cuantas copas de vino fabricado por el papá de Chris.

Cuando llegamos quedamos sorprendidas.

Anahí: Yo no sabía que ustedes vivían juntos.

Poncho: Sí, - rió. - desde que cumplimos quince nuestros padres decidieron reunir para compranos esta casa.

Chris: Claro, somos amigos desde que teníamos cinco años y nuestros padres estudiaron juntos.

Dulce: Cada día conocemos más y más de ustedes. - dijo con una sonrisa.

Poncho: Esa es la idea. - le guiñó un ojo.

Ellos eran como hermanos, incluso si no los conociera podría decir que lo son, todo lo hacían juntos y eran inseparables.

Entramos a la casa... de verdad tenían muy buen gusto porque la casa era realmente hermosa.

Contraba con tres pisos y una escalera en espiral, tres habitaciones, una para huespedes y las otras para cada uno, tenían cuatro baños, un balcon muy grande y un patio muy espacioso.

Entramos a la sala y dejamos nuestras cosas allí.

Subimos al tercer piso en donde se encontraba la sala de televisión.

Ya eran las seis en punto, así que decidí llamar a mis padres para que no se preocuparan porque iba a llegar tarde.

Vimos tres películas, dos de terror y la última de romance, esa no creo que la hayamos visto bien.

Estabamos comiendo palomitas y bebiendo cerbeza.

¡¡¡¡RIING!!!!

Sonaba mi teléfono descontroladamente.

Me levanté a contestar, y vi la hora, ya eran las cuatro de la madrugada, sin darme cuenta me había quedado dormida. Era mi madre quien llamaba, al principio me entró pánico contestar, pero si quería empezar a vivir una vida distinta, tenía que comenzar mi forma de actuar.

Anahí: Bueno? - contesté.

Tisha: ¿Acaso no has visto la hora que es? - dijo con voz dulce.

Ella era un poco más tranquila en estos temas, ya que de joven se especializo en psicología y entendía las diferentes actitudes de los jóvenes.

Anahí: Sí, mamá, pero ya es muy tarde, estoy con unos amigos y vamos a pasar la noche aquí. - le respondí casi cayendo del sueño.

Tisha: Esta bien, le dire a tu padre que has salido temprano para que no se moleste. - dijo un poco cansada.

Anahí: Esta bien, mamá. Adiós. - le dije rápidamente.

Tisha: Adiós te cuidas. - fue lo que escuché antes de colgar.

Entonces me volví a quedar dormida, la verdad es que estaba muy cansada, y solo necesitaba eso, dormir.












Amor De Verano ●Barken● [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora