Magnetismo《Black Hat X Lectora》2° Libro

Capitulo 9

- Voltaje. - me llamo esa imperdible voz de mi jefe mientras arreglaba su librero y desempolvaba sus viejos vinilos. -

Conteste con un si y dirigiendo mi vista hacia el con un pedazo de tela especial para limpiar esos discos en mi mano izquierda y un disco de color grisáceo en la derecha.

Desde lo pasado en Japón no he podido relajarme en lo más mínimo, ahora él se sentia con todo el derecho de estar cerca mio pero, por lo menos cuando quería tocarme siempre se limitaba a acariciarme el pelo, el rostro o darme un roce de manos.

Ya que yo no le he dado el permiso de tocar otras partes de mi cuerpo y por ahora no lo haré, estamos bien a como estamos o debería decir, yo estoy bien así.

Lo más raro de todo es tener que lidiar con el hecho de que ahora nos besamos y yo debo corresponderle.

No he podido hablar del todo con Flug desde que viajamos, lo he visto por cortos plazos de tiempo y ninguno de ellos lo he hecho sola.

Me ha hecho otros chequeos y tambien me ha dado una dieta especial para evitar los desmayos, basta decir que desde la primera semana haciéndola tuve menos problemas con mi síndrome de posturas, en lo único por él que no puede ayudarme es con mis fríos repentinos, eso es algo involucrado con lo estresada que estoy y hay días que yo realmente paso de arriba para abajo en la mansión haciéndome cargo de mas de una cosa.

Después de que casi todas las noches iba a recordarle a Flug sobre lo rápido que debía ser con su trabajo, ahora va él jefe a hacerlo mientras que yo ceno lo que sea que haya hecho en la cocina y en el peor de los casos tengo que prepararme una sopa instantánea o como todos las conocemos, las famosas maruchan.

Estaba alternando varias sopas instantaneas en mis cenas por que la dieta que tenia debía ser con bastante sal y tambien mucho liquido.

- Ven acá, - me ordenó sentado en el sillón y apoyando sus codos en el escritorio. - no quiero alzar la voz. - aclaró a lo que solo le hice una seña de que pondría en su lugar el vinilo para estar cerca suyo. -

Guarde el disco en su estuche de cartón y puse el pedazo de tela encima de los demás discos para recordar que luego debía seguir haciendo eso.

Me puse frente al escritorio para que nuestras miradas estuvieran perfectamente puestas en el uno y el otro.

- ¿Te ha aparecido otro mechón gris? - me preguntó pero, por como lo decía casi sonaba como una afirmación. -

El pelo lo suelo manejar suelto así que envés de responderle de inmediato con mis manos puse mi cabello delante de mis hombros para revisarlo, si habia aparecido otro mechón yo lo ignoraba, aún no me había dado cuenta de ello.

Al lado derecho me había salido otro por lo que pude ver y parecía haber salido casi en la misma zona que el anterior.

- Parece que si, - conteste volviendo mi vista a él.  - no lo había notado hasta ahora. - mencioné poniendo mi cabello hacia atrás de nuevo. -

Arrugo un poco el ceño.

Esta vez el no puede decir que se lo estaba ocultando por que juro que no había visto ese mechón hoy temprano que me aliste para iniciar el trabajo.

Me hizo una seña de que me hiciera al lado de él.

Me va a revisar el pelo, lo más seguro.

Rodee el escritorio ponerme al lado izquierdo de él como tenia acostumbrado a hacer siempre, le di la espalda, él seguía sentado en su sillón, solo escuche como se levantó para hacer lo suyo.

Senti ambas de su manos en mi cabello, tengo una cabellera que no solamente es larga, sino que es gruesa a la vez, así que él comenzó a apartar a un lado la zona que chequeaba para no tener que volver a revisar los mismos mechones.