𝑫𝒂𝒓𝒌 𝑫𝒆𝒔𝒔𝒊𝒓𝒆𝒔 [𝒀𝒊𝒛𝒉𝒂𝒏]

05

Wang Yibo desabrochó el mono y salió de él. Los bóxer blancos y finos de la prisión fueron los siguientes, apretados y estirados sobre los músculos abultados de los muslos de Wang Yibo. Xiao Zhan jadeó y volvió losojos al suelo mientras Wang Yibo los colgaba en el mismo gancho que el mono. Miró a través de la piel ondulante, las nalgas tensas y una enorme... Oh Señor. Xiao Zhan tragó saliva mientras captó una ojeada del

monstruo que vivía en los pantalones de Wang Yibo.

Los ojos de Wang Yibo se estrecharon contra él cuando ordenó.

— Quítate la ropa.

Xiao Zhan sacudió la cabeza frenéticamente. Oh no. No. No. No. Estaba helando y no quería estar desnudo frente a todos esos hombres extraños de nuevo. Quedó traumado cuando al salir de la ducha casi aquel hombre se atreve a tocarlo.

Incluso con la protección de Wang Yibo, los ojos lujuriosos todavía se dirigían hacia él. Todo lo que le protegía la piel desnuda era su mono delgado. No podía imaginarse quitándoselo.

Tragó saliva y mantuvo los ojos abiertos, lejos del cuerpo desnudo de Wang Yibo. Él se lamió los labios nerviosamente.

—Yo… estoy bien, voy a esperar aquí. No estoy muy sucio, ¿Qué te parece mañana…

— Nos mantenemos limpios Xiao Zhan. Tomarás duchas diarias. Esto no es negociable. Podrías acostumbrarte a eso.

Temblando como una hoja, Xiao Zhan se despojó de su ropa, saliendo de su mono sin siquiera quitarse los zapatos. Su pálida carne se estremeció en el frío vestuario y él pudo sentir los ojos del otro convicto rastrillándolo.

Se inclinó y apartó los bóxer de sus caderas delgadas y sobre sus pies, se quitó los zapatos y se puso los chancletas. Sus manos picaban por cubrirse mientras observaba la fría apreciación de Wang Yibo sobre su flaco cuerpo. Fue construido como su madre, ni un rasgo de su padre excepto las glándulas que colgaban entre sus piernas.

Tenía sus largas piernas bien formadas, caderas esbeltas y amplias nalgas. Tenía una

cintura diminuta, piel cremosa y rasgos increíblemente delicados. Si sus pectorales fueran más grandes, su cuerpo fácilmente podría haber sido confundido con el de una mujer. Su apariencia afeminada era algo que había avergonzado a Xiao Zhan

toda su vida, pero su cuerpo fue fácilmente cubierto y disimulado por ropa varonil y holgada. Ahora, no quedaba nada para esconderse detrás. Intentó no saltar cuando Wang Yibo le entregó su jabón en una cuerda y

colocó una mano grande y cálida protectoramente en su espalda baja para guiarlo en las duchas. Xiao Zhan nerviosamente torció la cuerda en su muñeca y mantuvo sus ojos abatidos. Sus ojos fijos en una mancha de sangre de color óxido en el hormigón cerca del desagüe.

El agua estaba caliente, el suelo resbaladizo. Entumecido, Xiao Zhan dejó que Wang Yibo lo colocara bajo la boquilla. El terror estaba grueso en su garganta cuando sintió al hombre grande venir detrás de él, eligiendo compartir la ducha de Xiao Zhan con él en lugar de colocarse

bajo una de las boquillas de ducha vacías a cada lado. Podía sentir el pecho grande de Wang Yibo y los muslos enormes contra su espalda y

trasero, contuvo su aliento cuando Wang Yibo lo giró suavemente e inclinó

la cabeza de Xiao Zhan de nuevo en el agua, mojándole el pelo.

Los ojos de Xiao Zhan levantaron la vista hacia el rostro de Wang Yibo en una especie de shock aterrorizado. Era flexible, pero sólo porque no sabía qué hacer.

Todas las historias de la prisión hablaban de ser violados en las duchas. Wang Yibo había prometido protegerlo, pero

¿quién iba a protegerlo de Wang Yibo? El rostro del castaño quedó en blanco cuando él apartó a Xiao Zhan de él, manteniendo la espalda cubierta por su propio cuerpo caliente y