𝑫𝒂𝒓𝒌 𝑫𝒆𝒔𝒔𝒊𝒓𝒆𝒔 [𝒀𝒊𝒛𝒉𝒂𝒏]

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A la mañana siguiente Xiao Zhan ve su reflejo en los espejos de los baños de la prisión, nadie llega a esa hora a los baños, a menos que los guardias lo obliguen a las 6:05 de la mañana, hace meses que descubrió que era la única forma de tener privacidad, aplicó un poco de crema dental en su cepillo y empezó a cepillar sus dientes, hasta que se detuvo en seco al ver el reflejo de un par de reclusos.

Escupió la crema dental—¿Que quieren un autógrafo?—Enjuagó su boca.

Ambos reos tenían la cara tatuada completamente, de tinta negra, acorralaron al pelinegro bloqueando la puerta.

—¿Qué?— Puso las manos en su cintura.

— Siempre pides favores a los demás y nunca agradeces como se debe— Uno de los reclusos tomó uno de los mechones pelinegros de Xiao Zhan.

—No me toques— Apartó su cabello de esas manos lascivas—Ni si quiera los conozco, nunca les he pedido un favor.

—Pero nosotros a ti si te conocemos, y a partir de ahora es como si me debieras un favor. — El otro recluso tomó la cintura de Xiao Zhan.

Xiao suspiró —No estoy de humor para esto, me acabo de tomar seis clonacepan, junto con otros antidepresivos, estoy jodidamente drogado — Mintió, por alguna razón creyó que si estaba drogado podrían tomarlo como loco y dejarlo en paz. El recluso detrás de él llevó sus manos al cierre de sus pantalones —¿Planean Violarme?— Dijo fingiendo temor y sumisión.

Xiao golpeó la nariz del recluso detrás de él, empujando su cabeza hacia atrás, el recluso acaricio su nariz adolorida— No lo tomen a mal— Le agarró fuertemente los huevos al otro recluso frente a él, el tipo gritó — No espero que se ofendan, pero no son para nada mi tipo — Tiró de los testículos del bastardo, el cual cayó al suelo para empezar a llorar de dolor— Ya estoy con un hombre, y se llama Wang Yibo, castaño, mide 1.80, ustedes no le llegan ni a la rodilla.

—Nada mal.

El pelinegro dirigió su mirada a la puerta al escuchar la voz de Wang Yibo — Ya aprendí a cuidarme solo.

Wang Yibo se inclinó para tomar el cuello del tipo en el suelo, el otro recluso aprovechó para salir corriendo de ahí — He oído de ti, asesinaste y violaste a tres mujeres— Tensó su mandíbula hablándole al recluso que yacía en el suelo. —De hijo de puta a otro hijo de puta, eso es lo más bajo que existe ¿Querías Hacerle lo mismo a Xiao Zhan?

El tipo negó con su ojos llenos de lágrimas por él miedo y el dolor —Perdóname no voy a volver a tocar a tú chico.

El castaño río con orgullo en cuanto escuchó "Su chico" — Eres muy inteligente — En un rápido movimiento metió su dedo pulgar en la cuenca ocular del ojo del Tipo.

— ¡Ayuda, guardias! —Gritó de dolor el reó suplicando por ayuda.

— Puto sádico de mierda—Dijo Xiao Zhan apartando la mirada cuando la sangre empezó a manchar el piso de carmesí— Que asco.

— ¿Tu Crees?— Preguntó.

Giró su pulgar adentro de la cuenca ocular del recluso, el hombre estaba agonizando de dolor, siguió girando una vez mas destrozando los resto de lo que alguna vez fue un ojo, sacó su pulgar y sacudió su mano para limpiar los restos de sangre— Al parecer si puedes defenderte solo, pero una ayudadita no esta de más. — Wang Yibo le guiñó un ojo con intensiones de besarlo.

— Que asco Wang Yibo, me besarás con este tipo aquí sin un ojo. — Aquel comentario hizo que Wang Yibo soltara una leve carcajada. — Regresemos a la celda.