𝑫𝒂𝒓𝒌 𝑫𝒆𝒔𝒔𝒊𝒓𝒆𝒔 [𝒀𝒊𝒛𝒉𝒂𝒏]

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En prisión aún existía la mafia, eso no era secreto para nadie. Estaban los hombres fuertes de negocio, los ladrones, asesinos, y los mafiosos, aquellos que trafican con armas; drogas y hasta personas, por eso hay diferentes tipos de bandos los cuales siempre son liderados por uno más fuerte y capaz que los demás. Hay un señor de nombre Kang MingWool, el cual es un ex jefe coreano de mafia un antiguo rey como le llamaban algunos, pero a pesar de estar retirado lo siguen respetando como tal.

Wang Yibo jugaba con aquel señor casi todas las tardes, le enseñaba como defenderse en prisión y sobre todo cuidar sus espaldas. Pero no importaba que tan ágil era ese hombre jugando que siempre terminaba ganando las partidas con una buena baraja de corazones.

—¡No Jodas!— Exclamó Sochul, uno de sus hombres, arrojando sus cartas sobre la mesa— Jefe usted esta haciendo trampa— Acarició su mentón con furia.

—Wang Yibo es muy bueno Jugando—Dijo el señor Kang — Y no te ofendas, pero Juegas como el carajo Sochul, eres un mejor protector que jugador. — Dejó sus cartas sobre la mesa

—¡Cállate!—Respondió Sochul furioso, su confianza con el señor Kang era tan buena que solo a él le permitía que le hablase de esa manera.

Xiao Zhan que se encontraba en aquella celda deslizó sus codos sobre la mesa aburrido, sus ojos se posaron en Wang Yibo que no tenía para cuando acabar —Sólo es un maldito presumido— Dijo Xiao Zhan mordiendo sus labios coquetamente. Wang Yibo desvió la vista a su dirección con un poco de desaprobación.

— Xiao Zhan has silencio.

— ¿Yo que hice ahora?— Fingió inocencia, curvo sus labios en una sonrisa.

—¿Quieres que te rompa esa linda carita? — Preguntó Wang Yibo divertido.

— Me encantaría.

Sochul miró a ambos hombres cómplice—¿Ustedes dos están coqueteando o simplemente son insultos pasivo agresivos? — Bromeó el hombre.

Wang Yibo alzó una ceja, estuvo a punto de hablar cuando escuchó los pasos de unos reclusos que se detuvieron frente de él, MingWool compartia celda con un hombre de apodo El Diablo qué era su máximo liderazgo ahora, tenía su rostro completamente tatuado y dos prótesis que parecen cuernos en su frente motivo por el cual llevaba su apodo.

—¿Se les ofrece algo señores?—Preguntó Wang Yibo fingiendo amabilidad.

—¿Jugar?—Dijo el tatuado metiendo las manos en su bolsillo—Apostamos.

Wang Yibo mostró sus dientes, si perdía el juego perdería respeto, ya que para muchos era un líder en su pabellón, pero eso era lo interesante del Juego—¿Y que Tienen para apostar?

El sujeto sacó de su bolsillo una llave y la lanzó en la mesa— Se le cayó a uno de los guardias, no se que abre, pero te será de utilidad, tienen un plan de escape ¿cierto?

El castaño tomó la llave y se la entregó a MingWool que lo miraba con determinación —No miente—Contestó—Puede sernos de utilidad.

—Bien ¿Que quieres?—Contestó Wang Yibo

El tipo se sentó en la mesa atrevidamente, pasó sus manos por su calva y le dio una mirada al pelinegro— A tu chico.

Wang Yibo frunció sus labios — Bien—Xiao Zhan frunció el ceño, MingWool y Sochul se miraron entre si, acababa de apostar a Xiao Zhan como si fuera de su propiedad, y ni si quiera lo pensó— Que tal si jugamos el juego del dolor—Sonrió.

El de rostro tatuado se volteó para ver a sus chicos, no entienden que clase de juego es, más bien nadie en la mesa entiende, excepto el pelinegro que reaccionó Indiferente, Wang Yibo se levantó de la mesa, apoyó sus manos en los bolsillos de su pantalón.