- Cap. 12 -

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Asqueroso y estúpido, todo aquello que se atravesara en su camino era considerado así "¿Por qué los humanos son tan ignorantes pensando que me van a derrotar? Malditos seres inferiores". Sus pensamientos se vieron interrumpidos por un ataque de golondrinas que le lanzó la menor de Sesshōmaru.

- ¿Qué haces? Dices quererme con vida y luego atacas.

- No trates de entenderme, al final tu asquerosa existencia no le importa a nadie.

- Escoria demoníaca... _ lanzó sus telarañas las cuales bailaban al paso de la púrpura, esta no se quedaba atrás, cortaba tela tras tela hasta tener su cara contra la de su enemiga, la cual saca su bastón y empieza a contraatacar.

- KEH, no me quedaré atrás. Hay que mal herir a ese ajo mal formado. _ La azabache empuñó su espada y se abalanzó contra Zero, Kirara la siguió y decidió tomar un riesgo que no sabía si saldría bien o no: se alzó en vuelo y lanzó fuego sobre la Kurinkaramaru de Moroha, quedando convertida en una hermosa hoja de metal y fuego.

La azabache no dudó en aprovechar tal potencial y sin pensarlo se abalanzó contra la mujer que atacaba brutalmente a su prima. Silencio. La azabache había atacado en las piernas a Zero, su Corte ardiendo le causó graves quemaduras a dicha señora, su vestido cortado a las rodillas, de ahí para abajo sólo se veía piel expuesta y quemada.

- ¡Desgraciada cuarto demonio! ¿Piensas que con eso me vas a derrotar? ¡LA ESTUPIDEZ HUMANA ES TU MEJOR ARMA!

- ¡NO ME ALCE LA VOZ BRUJA DESQUICIADA! Te haces la fuerte pero en tus insultos se ve que te duele hasta el...

- Cálmate Moroha, ella no accederá a punta de palabreo _ La albina, luego de admirar la pelea por el rato, decidió unirse de una vez. _ "No me vas a vencer otra vez, tengo miedo, pero si no lo enfrento ahora, luego será tarde" _ Los seres poderosos también tienen algo que tener, algo que perder, y algo que proteger; esto es un pensamiento que no cualquiera puede comprender.

- Por fin sales de la cueva cachorrita, dime, ¿Ahora el lobo feroz está de tu lado?

- Puedo tratarlo mejor que el cazador disfrazado de lobo.

- Se van a arrepentir.

Mientras las mitad demonio peleaban contra poderoso yokai, un joven poco nombrado buscaba dichoso péndulo, en algún lugar debería de estar, pero siendo sincero, el ojo esmeralda no sentía presencia alguna de ese objeto, ¿Y si Zero no lo tenía?

- ¡Señorita Towa! Creo que Zero no tiene lo que buscamos.

- Digo lo mismo, no le encuentro nada.

- ¿De qué hablan? _ preguntó esputefacta la oji morada.

- Aunque quisiera no te puedo decir, es por su bien.

- ¿Y que es lo que según requieren par de imbéciles? _ Riku se abalanzó contra su señora, chocando espada con bastón, ambos con una mirada de furia determinados en matarse.

- No se haga la santa señora, usted sabe perfectamente que es lo que queremos.

- Quisiera no ayudarles, pero no tengo idea de que me hablas.

- Entregueme el péndulo de La Libélula Atrapa sueños o se lo arrebataré por las malas. _ dijo el rojizo en susurro, pues sabia que si las demás presentes escuchaban caerían en el mismo hechizo y sería peor.

- Lamentablemente, no tengo nada que ver con ese estúpido péndulo ni mucho menos con la leyenda de ese insecto. ¿Para qué matarlos en sueños si puedo hacerlo de verdad? _ Dicho esto escapó del agarre de su "sirviente" y voló a una altura considerable. _ Ya me cansé de jugar amablemente. _ dicho esto atrajo a ella las Perlas Arcoíris, al fin y al cabo era su dueña; las tomó e incrementó nuevamente aquellos poderes que prometió no volver a usar. El ambiente se puso más tenso, el aire sopló con más intensidad y el cielo tomó un tono gris que indicaba la venida de una posible tragedia.

- ☆ Viaje entre épocas a través de sueños.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora