Shuumatsu no Kaiju

17 dioses vs 17 monstruos

Mjolnir, el imponente de Thor estaba tendido en el suelo completamente inútil en este punto. Es por mucho una de las armas divinas más poderosas que hayan sido construidas en los cielos a menos de los mejores herreros, pero un arma de este calibre también posee un defecto bastante grande que ya es tema de leyenda. El Mjolnir es un arma tan poderosa que se dice que es incluso capaz de destruir la tierra, y un gran poder fluye a través de él como si fuera lava, pero era tan intenso que incluso podía llegar a matar al portador que llegara a tratar de portarlo.

La única razón por la que Thor era capaz de sostener ese martillo fue porque se le fueron dados los guantes Jarngreirpr, que no eran solamente escudos destinados a proteger al dios mientras estaba en una batalla, sino que como verdadera función era el proteger al propio Thor del poder del Mjolnir. Era por razón por la que ambas Armas se complementaban entre ellas a la perfección, y esos guantes eran conocidos como la defensa divina ma fuerte, por lo que el hecho de que hayan sido destruídos en esta misma arena era un suceso imposible.

"Después que Anguirus lograra destruir el Jarngreipr, y que el gran Thor haya dado uso al poder de su gran relámpago, una vez más los dos oponentes están listos para arremeter entre sí con una gran furia!" Heimdall exclamó con una gran sonrisa de emoción, la batalla entre estas dos potencias aún continúa.

Thor solo sonrió con algo de diversión antes de comenzar a cargar electricidad en su mano izquierda una vez más, el simple hecho que ya no tuviera su martillo de su lado no quiere decir que no sea capaz de usar el arma por la que se ha vuelto tan famoso, el poder del trueno. El dios disparó una poderosa ráfaga de electricidad en dirección del dinosaurio acorazado, quien sin perder tiempo salió fuera del camino de este ataque de un salto, dejando que el relámpago impactará contra el suelo y creando una poderosa explosión otra vez. Thor repitió este mismo ataque varias veces mientras Anguirus solo se dedicaba a esquivarlos tan pronto como le era posible, ya vio que eran capaces de dañarlo, por lo que no iba a correr riesgos.

Pero en realidad uno de los planes de Anguirus era conseguir que todas esas explosiones lograran levantar una gruesa nube de polvo y de humo, lo cual funciona la perfección cuando ahora el dinosaurio acorazado permanecía escondido dentro de la dicha nube de humo, con Thor deteniendo su ataque al no poder localizar a su oponente, pero final preparando una carga de electricidad más en su mano en el momento en que estuviera en su rango de visión una vez más.

Pero fue otra cosa lo que salió disparado de todo ese humo, tratándose de una enorme roca que voló por el aire casi con la misma potencia de una bala, Thor logró reaccionar a tiempo y disparó su rayo hacia el proyectil y logró destruirlo a tiempo. Pero no vio venir una segunda roca que se estrelló con fuerza contra su pecho haciéndolo, retroceder un par de pasos pero sin hacerle demasiado daño, aunque la piedra fue la que se llevó la peor parte al ser destruida en el instante en que todo la dura piel del dios.

La nube de humo por fin comenzó a disiparse y ahora se podía ver mucho mejor lo que estaba sucediendo, y es que en el tiempo que Anguirus había estado oculto tras esa cortina de humo, Anguirus aprovechó para escarbar y sacar del suelo un gran número de enormes rocas que ahora estaban colocada en fila alrededor de él. Thor solo levando una ceja sin estar del todo seguro de que es lo que estaba pasando en ese momento, pero al recordar los dos proyectiles que le habían lanzando antes, de inmediato comprendió cuál era la idea de su oponente.

Anguirus se acercó a una de las rocas y después usó su cabeza para arrojarla en el aire con facilidad, y después usó su cola para golpearla como si estuviera bateando una pelota de béisbol, y la fuerza tras el golpe era tanta que su proyectil iba a una velocidad extraordinaria. Aunque como la primera vez, Thor solo usó uno de sus rayos para destruirla antes de que llegara a tocarlo, pero Anguirus solo estaba haciendo un tiro de prueba antes de golpear el suelo con tanta fuerza que elevó todas las rocas sin ningún esfuerzo, y a todas ellas después les dio un golpe con su cola para enviarlas todas en conjunto en contra del dios.